14/02/2020, 22:31
— Así que no tengo con quien ir, no tengo tanta confianza con nadie de la villa. A ver, sí, pero la mayoría de gente que conozco trabaja ese día. Ya sabes, puestos de comida y de juegos. Ni siquiera tengo nada que ponerme, así que supongo que será otro año sin festival. Tampoco pasa nada, seguro que necesitan a alguien para ayudar con misiones D.
Aquel discurso hizo que un pinchazo en el pecho pasase por el corazón de Eri. Poco sabía del pasado de su nueva pupila pero se podía imaginar por qué no había ido el año pasado, eso y que lo había leído también en su expediente, claro, pero le gustaría conocerlo por parte de la chica.
Aunque tampoco quería presionarla.
No pudo decir nada más porque llegaron al restaurante donde fueron recibidas por Yamamoto. Pronto ambas se vieron sentadas en una mesa con una carta delante, y la Uzumaki estaba a la espera de saber qué era lo que quería Hana para comer. Podría pedir lo más caro, así que no tendría problema en elegir lo que quisiera.
Pero Hana no parecía una persona dispuesta a aprovecharse de la situación.
—Lo que tú quieras me vale, es la primera vez que vengo así que puedo probar lo que sea.
Eri sonrió de vuelta a la chica, quien contagió su sonrisa a la Uzumaki que no tardó en hacerle una señal al dueño del lugar. Tardó unos minutos en llegar pues estaba con un encargo de una mesa alejada a donde estaban ambas chicas.
—¿Qué quieren las jóvenes? —preguntó amablemente.
—Pues... —Eri miró por última vez la carta, y no pudo evitar sentir como su boca se hacía agua al ver la imagen del bol de ramen con huevo y cerdo que estaba a la mitad del papel—. Dos cincos, por favor, y agua para dos.
Yamamoto asintió y se retiró, volviendo a dejarlas solas.
—Bien, ya está, así que, bueno —buscó algo que decir para establecer una conversación—. ¿Querrías ir conmigo al festival este año? —preguntó. Ella tampoco tenía con quien ir tras la ruptura con Nabi, e ir sola no era una buena opción, así que...
Aquel discurso hizo que un pinchazo en el pecho pasase por el corazón de Eri. Poco sabía del pasado de su nueva pupila pero se podía imaginar por qué no había ido el año pasado, eso y que lo había leído también en su expediente, claro, pero le gustaría conocerlo por parte de la chica.
Aunque tampoco quería presionarla.
No pudo decir nada más porque llegaron al restaurante donde fueron recibidas por Yamamoto. Pronto ambas se vieron sentadas en una mesa con una carta delante, y la Uzumaki estaba a la espera de saber qué era lo que quería Hana para comer. Podría pedir lo más caro, así que no tendría problema en elegir lo que quisiera.
Pero Hana no parecía una persona dispuesta a aprovecharse de la situación.
—Lo que tú quieras me vale, es la primera vez que vengo así que puedo probar lo que sea.
Eri sonrió de vuelta a la chica, quien contagió su sonrisa a la Uzumaki que no tardó en hacerle una señal al dueño del lugar. Tardó unos minutos en llegar pues estaba con un encargo de una mesa alejada a donde estaban ambas chicas.
—¿Qué quieren las jóvenes? —preguntó amablemente.
—Pues... —Eri miró por última vez la carta, y no pudo evitar sentir como su boca se hacía agua al ver la imagen del bol de ramen con huevo y cerdo que estaba a la mitad del papel—. Dos cincos, por favor, y agua para dos.
Yamamoto asintió y se retiró, volviendo a dejarlas solas.
—Bien, ya está, así que, bueno —buscó algo que decir para establecer una conversación—. ¿Querrías ir conmigo al festival este año? —preguntó. Ella tampoco tenía con quien ir tras la ruptura con Nabi, e ir sola no era una buena opción, así que...
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)