7/04/2020, 08:19
Era una noche poco común, ya que Isamu se encontraba deambulando por el Distrito Comercial, algo que no suele hacer mucho. Se encontraba con unos pantalones cortos de color negro y una camisa de manga larga del mismo color. Luego de un largo día, se le ocurrió por salir a caminar sin algún rumbo predeterminado, aunque ya sabiendo que a estas horas de la noche esta zona es bastante concurrida. No se le notaba con apuros ni preocupaciones, solo parecía estar caminando de una manera muy tranquila, apreciando con su mirada cada rincón que este recorría.
Su paso era lento y constante, no le interesaba apurarse, el lugar en sí es muy llamativo y su vista no se aburre ni de la inmensa cantidad de luces de neon ni tampoco de cada puesto de comercio que se cruza. El joven estaba distraído con la naturaleza del lugar, algo que no lo hacía poner mucha atención ni siquiera a la gente que se estaba paseando por el lugar.
»Vaya ... hace mucho no venía por aquí. Tampoco estoy con las suficientes energías para venir todos los días. —reflexionaba y daba un suspiro algo intenso.
No fue mucho el tiempo que paso hasta que se topo con un ruido que lo saco totalmente de foco y lo hizo voltear con su mirada hacía un lugar que parecía estar inundado de personas.
»¿Es necesario esa cantidad de ruido?—pasaba por su cabeza, estando algo fastidiado— »Aunque ...
Su cuerpo se viró completamente hacía ese lugar, que parecía ser un bar, y tomo rumbo hacía ahí. Parecía que no había ningún tipo de seguridad o control con la gente que entraba, por lo que no se preocupo en absoluto en meterse directamente, haciéndose hueco entre la gente, y buscar un lugar que no este ocupado.
Ya estando sentado y un poco más "cómodo" en aquel lugar repleto de gente, ve que las meseras estaban sirviendo todo tipo de bebidas. Isamu no suele beber alcohol, aunque a veces hay excepciones, y esta era una de ellas, se sentía con ganas de refrescar un poco su paladar, por lo que pidió un bebida con algo de alcohol. Se encontraba esperando su bebida, tranquilamente, casi hipnotizado por las personas y el ambiente del lugar, se sentía como en una burbuja mirando a todos su alrededores, pero ... ¿A que había ido a ese lugar? El ruido. Ese maldito ruido que lo había distraído de su paseo poco habitual en estos lares.
»¿A que se debe todo esto?—su vista fue al punto más central del lugar, el escenario. Parecía que había una persona cantando. ¿Un niño con algo que parecía un hacha? Aunque eso no era lo que le llamo la atención principalmente. El estilo que este personaje llevaba era muy llamativo, resaltaba a simple vista.—Que raro todo esto. De todos modos, suena bastante bien al parecer.
Su codo izquierdo se apoyo sobre la mesa, para poder reposar su mentón en su mano y quedarse viendo detalladamente al chico que era el centro de atención del bar. Mientras tanto, este espera que su trago llegue a la mesa de manera paciente.
Su paso era lento y constante, no le interesaba apurarse, el lugar en sí es muy llamativo y su vista no se aburre ni de la inmensa cantidad de luces de neon ni tampoco de cada puesto de comercio que se cruza. El joven estaba distraído con la naturaleza del lugar, algo que no lo hacía poner mucha atención ni siquiera a la gente que se estaba paseando por el lugar.
»Vaya ... hace mucho no venía por aquí. Tampoco estoy con las suficientes energías para venir todos los días. —reflexionaba y daba un suspiro algo intenso.
No fue mucho el tiempo que paso hasta que se topo con un ruido que lo saco totalmente de foco y lo hizo voltear con su mirada hacía un lugar que parecía estar inundado de personas.
»¿Es necesario esa cantidad de ruido?—pasaba por su cabeza, estando algo fastidiado— »Aunque ...
Su cuerpo se viró completamente hacía ese lugar, que parecía ser un bar, y tomo rumbo hacía ahí. Parecía que no había ningún tipo de seguridad o control con la gente que entraba, por lo que no se preocupo en absoluto en meterse directamente, haciéndose hueco entre la gente, y buscar un lugar que no este ocupado.
Ya estando sentado y un poco más "cómodo" en aquel lugar repleto de gente, ve que las meseras estaban sirviendo todo tipo de bebidas. Isamu no suele beber alcohol, aunque a veces hay excepciones, y esta era una de ellas, se sentía con ganas de refrescar un poco su paladar, por lo que pidió un bebida con algo de alcohol. Se encontraba esperando su bebida, tranquilamente, casi hipnotizado por las personas y el ambiente del lugar, se sentía como en una burbuja mirando a todos su alrededores, pero ... ¿A que había ido a ese lugar? El ruido. Ese maldito ruido que lo había distraído de su paseo poco habitual en estos lares.
»¿A que se debe todo esto?—su vista fue al punto más central del lugar, el escenario. Parecía que había una persona cantando. ¿Un niño con algo que parecía un hacha? Aunque eso no era lo que le llamo la atención principalmente. El estilo que este personaje llevaba era muy llamativo, resaltaba a simple vista.—Que raro todo esto. De todos modos, suena bastante bien al parecer.
Su codo izquierdo se apoyo sobre la mesa, para poder reposar su mentón en su mano y quedarse viendo detalladamente al chico que era el centro de atención del bar. Mientras tanto, este espera que su trago llegue a la mesa de manera paciente.
Hablar — «Pensar»