8/04/2020, 01:24
El joven se quedaba algo sorprendido por la vista que tenía de aquel bar, con muchas personas coreando y alentando a ese chico tan extravagante que se encontraba encima de la tarima. Una vez más, algo logra sacarlo de foco y es la mesera con la bebida que había pedido. Al dejarla en frente de él, simplemente toma la bebida con una mano y hace un gesto de agradecimiento, bajando la cabeza levemente, como en forma de reverencia.
—Muchas gracias.—decía sin forzar mucho la voz, sin importar la cantidad de barullo que había en el ambiente.
Ya con el vaso en la mano, decide ponerlo en sus labios y beber un pequeña cantidad del contenido que tenía dentro. Se le notaba en la cara lo poco acostumbrado que estaba a beber y lo fuerte que se encontraba aquel trago. Intenta disimular un poco su expresión facial, pero nota nuevamente la voz de la mesera se dirige a él. Este baja el vaso, apoyándolo en la mesa y se queda atento a las palabras de la chica.
—Lamento si el ambiente está más disperso de lo habitual. Hoy se estaba realizando una fiesta que si bien no es privada, ha sido organizada específicamente por una persona. No es algo común pero ha de sentirse incómodo.—
—No se preocupe, me siento bien y entiendo la situación.—desviaba la mirada e intentaba dibujar una sonrisa falsa en su inexpresiva cara para parecer estar a tono en la situación y no parecer estar desencajado.
Empezaba a notar como aquel escándalo que hacía la gente iba disminuyendo, parecía que aquel niño ya estaba dando sus últimas palabras con respecto al show que estaba brindando. La mirada de Isamu no tardó en fijarse en como el músico dedicaba unas palabras a una persona que, al parecer, era la que organizaba todo, aunque no le dio mucha importancia a aquella situación. Posteriormente, nota como se termina de despedir del público, rematando con una especie de chiste o comentario sobre la aldea.
—Diría que la fiesta no se acaba hasta que salga el sol, pero aquí en Ame eso casi nunca pasa así que... ¡Hasta dónde el cuerpo aguante!—
»Vaya ... que original este tipo—pensaba con cierta ironía en su propia cabeza.
El guitarrista, vocalista y, también, gran estrella de esa noche no tardó en bajarse del escenario y dirigirse hacía la mesera que estaba al lado del muchacho. Ambos, mesera y niño, mantuvieron una conversación, algo trivial, y dejando denotar que ya ambos se conocían y que este niño era una persona asidua de este lugar. Mientras tanto, el joven solo se queda como espectador de dicha charla y logra darle otro sorbo al trago que parecía ser algo fuerte para él.
»Parece ser más chico, incluso de lo que aparenta. No estoy seguro, pero es raro.—apoyaba el vaso en la mesa luego de degustarlo por segunda vez.—Creo que luego deberé tomar un poco de agua, no tengo que deshidratarme.
Su mirada, algo intensa y con un tono como de estar aburrido, se dirigió directamente al chico que estaba parado fumando un cigarrillo.
—Parece que vuelves loca a la gente de este lugar. No es de extrañarse, pareces muy alborotado y apasionado haciendo eso que haces.—su cara dejaba mostrar una pequeña sonrisa—A la gente le encanta eso.
—Muchas gracias.—decía sin forzar mucho la voz, sin importar la cantidad de barullo que había en el ambiente.
Ya con el vaso en la mano, decide ponerlo en sus labios y beber un pequeña cantidad del contenido que tenía dentro. Se le notaba en la cara lo poco acostumbrado que estaba a beber y lo fuerte que se encontraba aquel trago. Intenta disimular un poco su expresión facial, pero nota nuevamente la voz de la mesera se dirige a él. Este baja el vaso, apoyándolo en la mesa y se queda atento a las palabras de la chica.
—Lamento si el ambiente está más disperso de lo habitual. Hoy se estaba realizando una fiesta que si bien no es privada, ha sido organizada específicamente por una persona. No es algo común pero ha de sentirse incómodo.—
—No se preocupe, me siento bien y entiendo la situación.—desviaba la mirada e intentaba dibujar una sonrisa falsa en su inexpresiva cara para parecer estar a tono en la situación y no parecer estar desencajado.
Empezaba a notar como aquel escándalo que hacía la gente iba disminuyendo, parecía que aquel niño ya estaba dando sus últimas palabras con respecto al show que estaba brindando. La mirada de Isamu no tardó en fijarse en como el músico dedicaba unas palabras a una persona que, al parecer, era la que organizaba todo, aunque no le dio mucha importancia a aquella situación. Posteriormente, nota como se termina de despedir del público, rematando con una especie de chiste o comentario sobre la aldea.
—Diría que la fiesta no se acaba hasta que salga el sol, pero aquí en Ame eso casi nunca pasa así que... ¡Hasta dónde el cuerpo aguante!—
»Vaya ... que original este tipo—pensaba con cierta ironía en su propia cabeza.
El guitarrista, vocalista y, también, gran estrella de esa noche no tardó en bajarse del escenario y dirigirse hacía la mesera que estaba al lado del muchacho. Ambos, mesera y niño, mantuvieron una conversación, algo trivial, y dejando denotar que ya ambos se conocían y que este niño era una persona asidua de este lugar. Mientras tanto, el joven solo se queda como espectador de dicha charla y logra darle otro sorbo al trago que parecía ser algo fuerte para él.
»Parece ser más chico, incluso de lo que aparenta. No estoy seguro, pero es raro.—apoyaba el vaso en la mesa luego de degustarlo por segunda vez.—Creo que luego deberé tomar un poco de agua, no tengo que deshidratarme.
Su mirada, algo intensa y con un tono como de estar aburrido, se dirigió directamente al chico que estaba parado fumando un cigarrillo.
—Parece que vuelves loca a la gente de este lugar. No es de extrañarse, pareces muy alborotado y apasionado haciendo eso que haces.—su cara dejaba mostrar una pequeña sonrisa—A la gente le encanta eso.
Hablar — «Pensar»