26/12/2015, 05:36
No llevaba mucho de haber salido de la academia, de hecho, fui de los más jóvenes en graduarme con tan solo once años de edad; no eran el más inteligente, pero era bueno en lo que hacia y la constante presión de mi padre para hacerme mejorar y el constante reproche de mi hermano me hacían a mi parecer uno de los mejores genin recién graduados, estaba a la espera de mi primera misión así que no tenía más que hacer que salir a practicar mis técnicas para hacerlas mas precisas.
Salí desde muy temprano hacia el bosque de los alrededores de la aldea y estuve practicando mi estilo Raiton casi toda la mañana. termine exhausto de practicar casi había llegado al límite de mi chakra así que opte por trepar a un árbol que había cerca para tomar una pequeña siesta y recuperar algo de mis fuerzas.
Dormí un par de horas quizás más el sol entraba por entre los arboles y justo un rayo de sol se había puesto en mi cara para ser más exacto en mis ojos y esto interrumpió mi sueño, abrí un ojo todavía entre dormido y simplemente me voltee para el otro lado. mientras intentaba consolidar de nuevo mi sueño oí unos pasos entre la hierba y mire hacia abajo y vi que una chica se acercaba era alto quizás mucho mayor que yo unos quince o dieciséis años le habría puesto.
Me puse a observar que hacia la chica y pude notar que ella también venia a practicar después de que empezó a lanzar sus sebons y demás armas a los árboles, era muy buena no veía la necesidad de su practica aunque en ese momento recordé lo que siempre decía mi padre Haruto la práctica hace un buen shinobi, no olvides que siempre habrá algo que mejorar...
Cuando ella se encontraba descansando al pie del árbol decidí arriesgarme y saltar hacia a ella haciendo una entrada un poco rápida a la espera de cual fuera su reacción.
Salí desde muy temprano hacia el bosque de los alrededores de la aldea y estuve practicando mi estilo Raiton casi toda la mañana. termine exhausto de practicar casi había llegado al límite de mi chakra así que opte por trepar a un árbol que había cerca para tomar una pequeña siesta y recuperar algo de mis fuerzas.
Dormí un par de horas quizás más el sol entraba por entre los arboles y justo un rayo de sol se había puesto en mi cara para ser más exacto en mis ojos y esto interrumpió mi sueño, abrí un ojo todavía entre dormido y simplemente me voltee para el otro lado. mientras intentaba consolidar de nuevo mi sueño oí unos pasos entre la hierba y mire hacia abajo y vi que una chica se acercaba era alto quizás mucho mayor que yo unos quince o dieciséis años le habría puesto.
Me puse a observar que hacia la chica y pude notar que ella también venia a practicar después de que empezó a lanzar sus sebons y demás armas a los árboles, era muy buena no veía la necesidad de su practica aunque en ese momento recordé lo que siempre decía mi padre Haruto la práctica hace un buen shinobi, no olvides que siempre habrá algo que mejorar...
Cuando ella se encontraba descansando al pie del árbol decidí arriesgarme y saltar hacia a ella haciendo una entrada un poco rápida a la espera de cual fuera su reacción.