2/06/2020, 00:10
—¡Ah, gracias! — Dijo sonriente mientras sacaba un poco la lengua. Aunque luego se cubrió de rubor cuando el shinobi tuvo que acercarle la jarra. —La próxima vez le diré a mi hermano que deje las cosas más cerca...— Infló los cachetes.
Estaban preparando la bebida, cuando la pregunta de los estudios llegó a los oídos de la muchacha, haciendo que se frenase en seco, solo para luego continuar con su trabajo como si nada sucediese.
—Sí...— dijo desanimada. —Quiero decir. Creo que por mucho que los perfeccione, al final de cuenta ya no servirán para nada. No ahora que estaré sentada en esta silla para siempre — suspiró. —Lo lamento, no quiero tocar ese tema para arruinar el almuerzo. Será mejor que comamos, luego le encargaría encarecidamente que se encargase de la limpieza de los salones — aquel tono ya era muy frío.
Por un lado ella parecía querer decir algo pero por el otro rehuía. Vamos, titubeaba en la negación. Lo cierto es que ella ahora parecía estar más reacia a hablar, sin pronunciar palabra alguna aún comiendo en la misma mesa que el joven.
Estaban preparando la bebida, cuando la pregunta de los estudios llegó a los oídos de la muchacha, haciendo que se frenase en seco, solo para luego continuar con su trabajo como si nada sucediese.
—Sí...— dijo desanimada. —Quiero decir. Creo que por mucho que los perfeccione, al final de cuenta ya no servirán para nada. No ahora que estaré sentada en esta silla para siempre — suspiró. —Lo lamento, no quiero tocar ese tema para arruinar el almuerzo. Será mejor que comamos, luego le encargaría encarecidamente que se encargase de la limpieza de los salones — aquel tono ya era muy frío.
Por un lado ella parecía querer decir algo pero por el otro rehuía. Vamos, titubeaba en la negación. Lo cierto es que ella ahora parecía estar más reacia a hablar, sin pronunciar palabra alguna aún comiendo en la misma mesa que el joven.