Este foro utiliza cookies
Este foro utiliza cookies para guardar tu información de inicio de sesión si estás registrado, y tu última visita si no lo estás. Las cookies son pequeños documentos de texto guardados en tu ordenador; las cookies establecidas por este foro sólo pueden ser utilizadas en este mismo sitio y no poseen riesgos de seguridad. Las cookies de este foro también llevan un registro de los temas que has leído y cuándo fue la última vez que los leíste. Los administradores NO tienen acceso a esta información, sólo TU NAVEGADOR. Por favor confirma si aceptas el establecimiento de estas cookies.

Se guardará una cookie en tu navegador sea cual sea tu elección para no tener que hacerte esta pregunta otra vez. Podrás cambiar tus ajustes sobre cookies en cualquier momento usando el link en el pie de página.
Otoño-Invierno de 221

Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.
#7
Con una última respuesta de la nueva Arashikage, las cuatro mujeres presentes tomaron asiento. Kintsugi y Hana tomaron asientos opuestos a la posición de Shanise y Ayame, respectivamente. Afortunadamente, nadie tuvo que romper el hielo en el tenso silencio que se formó entonces, pues el Uzukage no tardó en aparecer, acompañado de su inseparable jōnin.

Disculpen la tardanza. Nos hemos entretenido un poco con las nuevas vistas que regala Tanzaku Gai —se excusó, y Kintsugi le regaló una inclinación de cabeza, indulgente—. Shanise-dono, enhorabuena por su nuevo cargo —se refirió en primer lugar hacia la Arashikage, antes de volverse hacia su acompañante—: Ayame-san, qué bueno verte por aquí.

La torpe muchacha se reincorporó de golpe, con una brusca inclinación, antes de regresar a su sitio con las mejillas encendidas.

Kintsugi-dono, Hana-san, me alegro de volver a veros.

El placer es nuestro, Uzukage-dono —respondió Kintsugi. Hana, junto a ella, se limitó a inclinar la cabeza.

Como le decía a Kintsugi, es un honor sentarme entre nosotros —intervino Shanise entonces—. Si no me equivoco, fue Kintsugi-dono quien solicitó la reunión, pero antes me gustaría advertir de algo. Fuera de Amegakure, todo el mundo cree que Yui es la Señora Feudal. El cargo de Tormenta es un secreto, por ahora. Menos para vosotros y para los nuestros. Tenemos nuestras razones.

Muy bien. Se mantendrá en secreto entonces —concedió Kintsugi. Después de todo, Kusagakure no ganaba nada revelando algo así.

Podemos comenzar.

La Morikage apoyó sendas manos sobre la mesa, bien a la vista de todos. En aquella ocasión no habría trucos ni sorpresas, y así lo hizo saber con aquel simple gesto. Después, miró a todos los presentes a través de su antifaz. ¿Por dónde comenzar? Sus ojos se detuvieron momentáneamente en Hanabi, pero en el último momento decidió que aquel tema podría esperar. Al menos un poco más.

Ha quedado claro que Dragón Rojo se ha convertido en un enemigo para las tres aldeas —pronunció, tomando como impulso el tema de aquella organización criminal. Miró a Shanise, después miró a Hanabi, e inclinó la cabeza—. Debo pediros disculpas. Me equivoqué. Creí que Kusagakure y el País del Bosque quedaban aparte de las intenciones de Dragón Rojo, pero después de ese ataque coordinado en el Valle de los Dojos ha quedado claro que no es así —La Morikage volvió a levantar la barbilla—. Es mi deber velar por la seguridad de mi aldea. Por eso, Arashikage-dono, Uzukage-dono, pueden contar con nosotros al respecto de este tema. Sobre todo contra unos enemigos como los que vimos en el estadio. Amegakure y Uzushiogakure han tenido shinobi exiliados en esa banda, por lo que presupongo que tenéis más información sobre ellos que yo. Por eso también me gustaría pediros que compartiéseis dicha información.


Mensajes en este tema
RE: Reunión para una nueva era - por Aburame Kintsugi - 15/09/2020, 20:23


This forum uses Lukasz Tkacz MyBB addons.