30/07/2021, 11:22
(Última modificación: 30/07/2021, 11:27 por Kaminari Chika. Editado 1 vez en total.)
—¿Es que quieres que te mate o qué? Porque no planeo hacerlo. Busca muerte en otro lado.
— ¿Y ahora qué dice éste? — contestó para sí mismo.
—Eso no significa que te vaya a dejar ir así como así.
Tras su propio discurso motivador de él para él, Toshio saltó katana en mano desde el hongo gigante en dirección a donde estaba el moreno. Lo cual era probablemente la peor idea jamás usada. En cuanto el pelirrojo saltó, su rival simplemente dio un salto lateral breve para apartarse de su trayectoria. En cuanto cayese, lo podría dejar paraplejico minimo.
Sin embargo, una vez desde el lateral, pudo ver toda la treta con algo de asombro de que fuese casi tan mala idea como la original. Toshio había clavado su kodachi antes de saltar y ahora su otra katana volaba a través del clon señuelo. Espera, ¿señuelo?
Se giró a tiempo para bloquear al verdadero, que había buscado el choque de armas a proposito y su Kodachi voló de su mano contra... ¿una vaina? ¿Estaba usando su vaina para pelear?
— No esperaba que supieras moverte. — soltó mientras daba un salto hacia atrás y sacaba uno de sus pergaminos pequeños del cinto, desenrollandolo instantaneamente frente a Toshio.
El pelirrojo vería una compleja formula de sellado antes de ver... nada. Todo a su alrededor se había llenado de ardiente ceniza que no solo le impedía ver y respirar, sino que quemaba (10 PV).
Si salía de la nube de ceniza vería varias bolas de agua rodeándola y dirigiéndose hacia el centro desde la dirección en la que había desaparecido el Hozuki. Un total de cuatro bolas de agua atravesarían la nube de ceniza de lado a lado cubriendo toda la horizontal a escasa altura del suelo. (10 PV por bola) Si salía antes de que impactasen, todas curvarían su trayectoria ligeramente en su dirección.
Pero pronto se daría cuenta de que pasar desapercibido no era el plan de su contrincante.
— En fin, gracias por el cambio de arma, la verdad es que estaba mayor ya. — se jactó desde la posición que había ocupado Toshio hace un momento, recuperando la Kodachi que él mismo había clavado.
— ¿Y ahora qué dice éste? — contestó para sí mismo.
—Eso no significa que te vaya a dejar ir así como así.
Tras su propio discurso motivador de él para él, Toshio saltó katana en mano desde el hongo gigante en dirección a donde estaba el moreno. Lo cual era probablemente la peor idea jamás usada. En cuanto el pelirrojo saltó, su rival simplemente dio un salto lateral breve para apartarse de su trayectoria. En cuanto cayese, lo podría dejar paraplejico minimo.
Sin embargo, una vez desde el lateral, pudo ver toda la treta con algo de asombro de que fuese casi tan mala idea como la original. Toshio había clavado su kodachi antes de saltar y ahora su otra katana volaba a través del clon señuelo. Espera, ¿señuelo?
Se giró a tiempo para bloquear al verdadero, que había buscado el choque de armas a proposito y su Kodachi voló de su mano contra... ¿una vaina? ¿Estaba usando su vaina para pelear?
— No esperaba que supieras moverte. — soltó mientras daba un salto hacia atrás y sacaba uno de sus pergaminos pequeños del cinto, desenrollandolo instantaneamente frente a Toshio.
El pelirrojo vería una compleja formula de sellado antes de ver... nada. Todo a su alrededor se había llenado de ardiente ceniza que no solo le impedía ver y respirar, sino que quemaba (10 PV).
Si salía de la nube de ceniza vería varias bolas de agua rodeándola y dirigiéndose hacia el centro desde la dirección en la que había desaparecido el Hozuki. Un total de cuatro bolas de agua atravesarían la nube de ceniza de lado a lado cubriendo toda la horizontal a escasa altura del suelo. (10 PV por bola) Si salía antes de que impactasen, todas curvarían su trayectoria ligeramente en su dirección.
Pero pronto se daría cuenta de que pasar desapercibido no era el plan de su contrincante.
— En fin, gracias por el cambio de arma, la verdad es que estaba mayor ya. — se jactó desde la posición que había ocupado Toshio hace un momento, recuperando la Kodachi que él mismo había clavado.