6/08/2021, 17:26
—Es todo un placer, Yamada-san. —Le regalé otra reverencia.
No podía creerlo: cada palabra salida de la boca de Hiro era verdad pura. ¡Me alegraba tanto habérmelo topado!
—No me incomoda. Es más que natural tener curiosidad sobre alguien tan particular como yo. Tiene razón, Yamada-san. Ella podría pudrirse en la cárcel de la Aldea, y yo seguiré siendo quien soy. Muchas gracias. Sí, mi familia adoptiva es maravillosa.
No tenía sentimiento alguno por Iwada Ririki más que repudio. Amaba estar viva, odiaba lo que ella me había hecho. No, odiaba cómo me había hecho.
¡Oh! ¡Preguntas sobre mi cuerpo! ¡Me gustan, me gustan! Aclaré mi garganta suavemente y junté las manos frente a mí, cruzando los dedos, los brazos cayendo delicadamente hasta mi regazo.
—Es... Extraño. No suelen entender lo que soy. Sólo mi Hermana Ranko lo acepta de corazón. Y sí, tengo necesidades, como todo. No puedes prender un horno si no tienes madera o carbón, ¿Verdad? Si dejas algo por demasiado tiempo al fuego, se quema o funde, ¿Verdad? Este precioso cuerpo... aunque relativamente débil, requiere de mantenimiento. Alimento para generar chakra para moverme, descanso para enfriarme y evitar desgaste. No es tan difícil de entender, ¿Verdad?
Reí levemente, cubriendo parte de mi boca con el dorso de la mano. No dudaba que Hiro comprendiera, pues parecía alguien sabio e inteligente, al menos hasta ese momento.
No podía creerlo: cada palabra salida de la boca de Hiro era verdad pura. ¡Me alegraba tanto habérmelo topado!
—No me incomoda. Es más que natural tener curiosidad sobre alguien tan particular como yo. Tiene razón, Yamada-san. Ella podría pudrirse en la cárcel de la Aldea, y yo seguiré siendo quien soy. Muchas gracias. Sí, mi familia adoptiva es maravillosa.
No tenía sentimiento alguno por Iwada Ririki más que repudio. Amaba estar viva, odiaba lo que ella me había hecho. No, odiaba cómo me había hecho.
¡Oh! ¡Preguntas sobre mi cuerpo! ¡Me gustan, me gustan! Aclaré mi garganta suavemente y junté las manos frente a mí, cruzando los dedos, los brazos cayendo delicadamente hasta mi regazo.
—Es... Extraño. No suelen entender lo que soy. Sólo mi Hermana Ranko lo acepta de corazón. Y sí, tengo necesidades, como todo. No puedes prender un horno si no tienes madera o carbón, ¿Verdad? Si dejas algo por demasiado tiempo al fuego, se quema o funde, ¿Verdad? Este precioso cuerpo... aunque relativamente débil, requiere de mantenimiento. Alimento para generar chakra para moverme, descanso para enfriarme y evitar desgaste. No es tan difícil de entender, ¿Verdad?
Reí levemente, cubriendo parte de mi boca con el dorso de la mano. No dudaba que Hiro comprendiera, pues parecía alguien sabio e inteligente, al menos hasta ese momento.
Diálogo (Darkorchid)