16/09/2021, 18:06
(Última modificación: 16/09/2021, 18:08 por Kaminari Chika. Editado 1 vez en total.)
Toshio y el líder bandido se encontraron a unos cuatro metros del carro mientras que los arqueros se detuvieron a nueve, cuando su líder les ordenó que apuntasen y atacasen. El arquero que estaba a la izquierda del líder se apartó a tiempo para esquivar el kunai, pero el de la derecha estaba pendiente de Toshio y le hizo un corte en el hombro por reaccionar tarde. Haru se adelantó a la pelea entre Toshio y el líder para lanzarle un tronco al pobre arquero que aún estaba recuperandose del ataque con el kunai.
Las flechas atravesaron las muñecas del líder, pero eso no lo detuvo en sus dos cortes (12 PV por corte), dibujando una X en el pecho del pelirrojo.
— ¿Crees que esto me duele? ¡Pues sí! Pero más me duele ver como mis compadres se mueren de hambre por culpa de los lios de los shinobi. — por un momento, le titubeó el agarre de las armas, pero sus puños se cerraron con más fuerza alrededor del mango de los tanto y lanzó otro par de cortes mientras los culos de las flechas se inundaban de su propia sangre.
El arquero al que Haru había avasallado se recuperó como pudo y sacó una flecha de su carcaj, lanzandosela con desesperación al mokutonero. El otro arquero decidió seguir apoyando a su líder, mientras su compañero entretenía a Haru. Se movió lateralmente, alejandose de ambos para poder apuntar mejor a Toshio, buscando darle en una de las rodillas al pelirrojo.
Del cuarto bandido no parecía haber rastro alguno, ¿habría huido?
Las flechas atravesaron las muñecas del líder, pero eso no lo detuvo en sus dos cortes (12 PV por corte), dibujando una X en el pecho del pelirrojo.
— ¿Crees que esto me duele? ¡Pues sí! Pero más me duele ver como mis compadres se mueren de hambre por culpa de los lios de los shinobi. — por un momento, le titubeó el agarre de las armas, pero sus puños se cerraron con más fuerza alrededor del mango de los tanto y lanzó otro par de cortes mientras los culos de las flechas se inundaban de su propia sangre.
El arquero al que Haru había avasallado se recuperó como pudo y sacó una flecha de su carcaj, lanzandosela con desesperación al mokutonero. El otro arquero decidió seguir apoyando a su líder, mientras su compañero entretenía a Haru. Se movió lateralmente, alejandose de ambos para poder apuntar mejor a Toshio, buscando darle en una de las rodillas al pelirrojo.
Del cuarto bandido no parecía haber rastro alguno, ¿habría huido?