9/10/2021, 03:24
Yota le arrancó una sonrisa. El chico sabía la respuesta a su pregunta, de eso no tenía dudas, pero Zaide tenía que concederle que aún así seguía intentándolo. Supuso que venía de fábrica en todos los kusajines: no rendirse, sin importar las circunstancias.
—Considéralo un piropo, Yota. —En parte lo era—. Prefiero arriesgarme a no tener ayuda en el Bosque de Azur a tu Chidori por la espalda.
»O peor aún —añadió, sin poder retener su lengua—, a que me muestres a alguien que no quiero ver en forma de zombie.
—Considéralo un piropo, Yota. —En parte lo era—. Prefiero arriesgarme a no tener ayuda en el Bosque de Azur a tu Chidori por la espalda.
»O peor aún —añadió, sin poder retener su lengua—, a que me muestres a alguien que no quiero ver en forma de zombie.