30/01/2016, 16:21
(Última modificación: 30/01/2016, 16:22 por Inuzuka Nabi.)
Los limpiadores profesionales se pusieron a debatir por esto y por lo otro, Nabi seguia esperando desde el umbral de la puerta con su tipico rostro totalmente helado. Por fin se pusieron a coger cosas, Juro cogió tres cepillos y un cubo mientras que Kazuma se acercó a agarrar un producto de limpieza especializado en pintura y unos guantes y mascarillas. Entonces saltó al pobre rubio y le soltó todo un discurso metaforico y profundo.
—¿Qué sucede, Nabi? ¿Te avergüenza que te vean manipulando productos de limpieza? —Preguntó sin que se apreciara ninguna doble intención en su voz—. Me imagino que para alguien tan serio como tu esto no es un trabajo digno de un ninja —reflexiono tratando de entender que pensaba su compañero—. Sé que puede parecer vergonzoso andar de limpia muros. Pero hay cosas menos nobles y hasta podría ser peor —aseguro sonriendo—. Podríamos estar en un combate o misión importante y terminar haciendo el ridículo luego de hacernos los duros, para luego terminar humillados y vivir bajo la sombra de la vergüenza causada a nuestra aldea —Se encontraba divagando y perdiendo el rumbo de la metáfora que tenía como intención valorar la dignidad y la humildad—. Bueno de todos modos no creo que ninguno de nosotros sea tan arrogante como para permitir que le suceda algo así… Esto... Ya olvide que trataba de decir —dijo un poco confundido mientras levantaba una caja—. Como sea hoy nos toca limpiar y podría ser un día duro así que hay que darnos prisa.
¿Que pelicula se esta montando Kazuma?
No me avergüenza, y no tengo ningún problema con limpiar. Pero no entiendo de utensilios de limpieza, no voy a meterme en medio a molestar. Vosotros pareceis bastante más conscientes de lo que haceis. Así que os lo dejo a vosotros y si eso te molesta puedo llevar yo las cosas hasta el sitio.
- Vale, si falta algo más, es momento de decirlo... - murmuró Juro, cogiendo las cosas - Nabi, ya que estas ahí apunta lo que cogemos.
Voy.
Las formas de ambos habian sido cuanto menos poco amigable. Uno le habia soltado un discurso presuponiendo los pensamientos del Uchiha solo por su forma de ser, sin ningún tipo de conocimiento. Y el otro, simplemente, parecia tener una muy mala imagen de él. En cualquier caso, una persona con menos paciencia y seriedad que Nabi podria haberlos matado a los dos por bordes y malos compañeros. Pero el rubio ni se habia percatado de las intenciones ocultas tras las palabras.
Se acercó donde estaba la secretaria, que se dedicaba a vigilarlos de reojo tal vez pensando que no se iban a dar cuenta. Cogió el boligrafo y apuntó todo lo que habia visto coger a esos dos y los nombres de los tres shinobis. Al acabar, dejó el boli encima del cuaderno y se la acercó a la muchacha.
Aqui tiene, antes de que acabe el dia estara todo de vuelta.
Esperaria unos segundos a ver si la chica le contestaba algo o le hacia alguna aclaración, despues volveria con su par de sirvientes que se estaban sintiendo mal por las cosas que narro yo en vez de lo que les dice Nabi, que metaroleros que eran.
Hecho.
Esperaria a ver cual era el siguiente paso en el plan.
—¿Qué sucede, Nabi? ¿Te avergüenza que te vean manipulando productos de limpieza? —Preguntó sin que se apreciara ninguna doble intención en su voz—. Me imagino que para alguien tan serio como tu esto no es un trabajo digno de un ninja —reflexiono tratando de entender que pensaba su compañero—. Sé que puede parecer vergonzoso andar de limpia muros. Pero hay cosas menos nobles y hasta podría ser peor —aseguro sonriendo—. Podríamos estar en un combate o misión importante y terminar haciendo el ridículo luego de hacernos los duros, para luego terminar humillados y vivir bajo la sombra de la vergüenza causada a nuestra aldea —Se encontraba divagando y perdiendo el rumbo de la metáfora que tenía como intención valorar la dignidad y la humildad—. Bueno de todos modos no creo que ninguno de nosotros sea tan arrogante como para permitir que le suceda algo así… Esto... Ya olvide que trataba de decir —dijo un poco confundido mientras levantaba una caja—. Como sea hoy nos toca limpiar y podría ser un día duro así que hay que darnos prisa.
¿Que pelicula se esta montando Kazuma?
No me avergüenza, y no tengo ningún problema con limpiar. Pero no entiendo de utensilios de limpieza, no voy a meterme en medio a molestar. Vosotros pareceis bastante más conscientes de lo que haceis. Así que os lo dejo a vosotros y si eso te molesta puedo llevar yo las cosas hasta el sitio.
- Vale, si falta algo más, es momento de decirlo... - murmuró Juro, cogiendo las cosas - Nabi, ya que estas ahí apunta lo que cogemos.
Voy.
Las formas de ambos habian sido cuanto menos poco amigable. Uno le habia soltado un discurso presuponiendo los pensamientos del Uchiha solo por su forma de ser, sin ningún tipo de conocimiento. Y el otro, simplemente, parecia tener una muy mala imagen de él. En cualquier caso, una persona con menos paciencia y seriedad que Nabi podria haberlos matado a los dos por bordes y malos compañeros. Pero el rubio ni se habia percatado de las intenciones ocultas tras las palabras.
Se acercó donde estaba la secretaria, que se dedicaba a vigilarlos de reojo tal vez pensando que no se iban a dar cuenta. Cogió el boligrafo y apuntó todo lo que habia visto coger a esos dos y los nombres de los tres shinobis. Al acabar, dejó el boli encima del cuaderno y se la acercó a la muchacha.
Aqui tiene, antes de que acabe el dia estara todo de vuelta.
Esperaria unos segundos a ver si la chica le contestaba algo o le hacia alguna aclaración, despues volveria con su par de sirvientes que se estaban sintiendo mal por las cosas que narro yo en vez de lo que les dice Nabi, que metaroleros que eran.
Hecho.
Esperaria a ver cual era el siguiente paso en el plan.
—Nabi—