3/02/2016, 23:22
Marujaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
Era un termino recien aprendido para el Uchiha, pero esa mujer daba todas las evidencias de ser un ser de susodicha categoria. Mujer de avanzada edad cuyo mayor desafio en el dia a dia son las tareas cotidianas de casa. Por llevar esa vida, su segunda dedicación es espiar a sus vecinos y enterarse de cada cotilleo habido y por haber. Como tal, suele ser considerada una especie molesta y que es mejor evitar si no quieres acabar con la cabeza más caliente que una patata caliente. Sin embargo, no iba a ser él el que lo dijera. Pues ese no era su cometido, sino el de su magnanimo lider, JURO-SAMA.
—Si fuera por mí, permitiría que nos acompañara con mucho gusto —dijo fingiendo pesar—. Pero… Es que nuestro líder de misión es alguien bastante intransigente y desconfiado… Por cierto este es nuestro gran líder. —Dijo señalando seriamente a Juro para que este cargara con cualquier queja o pero que pudiera poner aquella mujer.
Por un momento, incluso Nabi titubeó, a punto de soltar una pequeña carcajada cuando Kazuma le pasó el marron de decidir que hacer con la señora que aseguraba tener información altamente confidencial y vital para la misión, a pesar de que era totalmente imposible que supiera que ellos eran los encargados de aquellas pinturas especificamente. Todo olia muy mal. Pero era decisión unica y exclusivamente de Super Juro.
El rubio simplemente se dedicó a inspeccionar detenidamente toda pista visual que pudiera recolectar de la extraña civil que se habia plantado ante ellos. Algún tipo de marca o huella que pudiera darle una pista de sus intenciones, o una mancha de pintura, por ejemplo. A lo mejor solo les estaba dorando la pildora para que se tragaran el presupuesto social de que solo los jovenzuelos hacen pintadas en la calle.
Era un termino recien aprendido para el Uchiha, pero esa mujer daba todas las evidencias de ser un ser de susodicha categoria. Mujer de avanzada edad cuyo mayor desafio en el dia a dia son las tareas cotidianas de casa. Por llevar esa vida, su segunda dedicación es espiar a sus vecinos y enterarse de cada cotilleo habido y por haber. Como tal, suele ser considerada una especie molesta y que es mejor evitar si no quieres acabar con la cabeza más caliente que una patata caliente. Sin embargo, no iba a ser él el que lo dijera. Pues ese no era su cometido, sino el de su magnanimo lider, JURO-SAMA.
—Si fuera por mí, permitiría que nos acompañara con mucho gusto —dijo fingiendo pesar—. Pero… Es que nuestro líder de misión es alguien bastante intransigente y desconfiado… Por cierto este es nuestro gran líder. —Dijo señalando seriamente a Juro para que este cargara con cualquier queja o pero que pudiera poner aquella mujer.
Por un momento, incluso Nabi titubeó, a punto de soltar una pequeña carcajada cuando Kazuma le pasó el marron de decidir que hacer con la señora que aseguraba tener información altamente confidencial y vital para la misión, a pesar de que era totalmente imposible que supiera que ellos eran los encargados de aquellas pinturas especificamente. Todo olia muy mal. Pero era decisión unica y exclusivamente de Super Juro.
El rubio simplemente se dedicó a inspeccionar detenidamente toda pista visual que pudiera recolectar de la extraña civil que se habia plantado ante ellos. Algún tipo de marca o huella que pudiera darle una pista de sus intenciones, o una mancha de pintura, por ejemplo. A lo mejor solo les estaba dorando la pildora para que se tragaran el presupuesto social de que solo los jovenzuelos hacen pintadas en la calle.
—Nabi—