5/06/2022, 19:33
Al inicio de su carrera, Toshio pudo ver a Ruhara sacar una pequeña esfera que arrojaría entre ambos, antes de empezar a alejarse con unos saltos. «¿Una bomba?» Toshio se preparó, tapándose el rostro con el brazo libre sin detener su avance en ningún momento.
Con confianza, el chico corrió incluso a través del humo que se había empezado a formar alrededor suyo. Había visto la dirección que Ruhara había tomado, así que exactamente a donde debía dirigirse si quería encontrarse con ella, por lo que apenas un instante más tarde, la mujer vería a Toshio salir del humo de un salto, enarbolando su Wakizashi para lanzarle un corte de arriba a abajo que no le haría daño alguno incluso si impactaba, pues ni el ataque ni el herrero eran reales.
Toshio, el real, había creado dos Bunshin básicos, aprovechando que el humo estorbaba tanto su vista como la de sus enemigos para preparar su ardid. Mientras el clon de enfrente saltaba para atacar a Ruhara, el real salía del humo por la izquierda, mientras el segundo clon lo hacía por la derecha. Ambos, aprovechando la confusión causada, lanzarían una Shuriken cada uno a un costado del cuello de Ruhara.
Justo cuando ambas Shuriken hubiesen pasado su objetivo, ambos herreros tirarían del imperceptible hilo que los unía a la estrella voladora, enviando un pulso de chakra, pero solo la verdadera acabaría enrollándose en su objetivo y clavándose en su cuello (8 PV/corte superficial, 12 PV/corte e impacto directo).
— ¡Jun, no te confíes! —Le gritó entonces, aunque Jun probablemente no podía verlo desde donde estaba—. Si esta no es la real, debe estar escondida en el agua, como los ninjas de antes.
Hecho aquello, empezaría a tirar del hilo para arrastrar a Ruhara hasta él.
Con confianza, el chico corrió incluso a través del humo que se había empezado a formar alrededor suyo. Había visto la dirección que Ruhara había tomado, así que exactamente a donde debía dirigirse si quería encontrarse con ella, por lo que apenas un instante más tarde, la mujer vería a Toshio salir del humo de un salto, enarbolando su Wakizashi para lanzarle un corte de arriba a abajo que no le haría daño alguno incluso si impactaba, pues ni el ataque ni el herrero eran reales.
Toshio, el real, había creado dos Bunshin básicos, aprovechando que el humo estorbaba tanto su vista como la de sus enemigos para preparar su ardid. Mientras el clon de enfrente saltaba para atacar a Ruhara, el real salía del humo por la izquierda, mientras el segundo clon lo hacía por la derecha. Ambos, aprovechando la confusión causada, lanzarían una Shuriken cada uno a un costado del cuello de Ruhara.
Justo cuando ambas Shuriken hubiesen pasado su objetivo, ambos herreros tirarían del imperceptible hilo que los unía a la estrella voladora, enviando un pulso de chakra, pero solo la verdadera acabaría enrollándose en su objetivo y clavándose en su cuello (8 PV/corte superficial, 12 PV/corte e impacto directo).
— ¡Jun, no te confíes! —Le gritó entonces, aunque Jun probablemente no podía verlo desde donde estaba—. Si esta no es la real, debe estar escondida en el agua, como los ninjas de antes.
Hecho aquello, empezaría a tirar del hilo para arrastrar a Ruhara hasta él.