26/12/2022, 22:56
Aiza asintió. Si le había convencido o no Daigo con su argumento, no dio muestras de ello.
Pasaron dos horas hasta que Daigo vio su deseo cumplido. Primero Akiko y luego Ishi aparecieron en la habitación. Las dos se encontraban visiblemente mejor que semanas atrás. La primera con algo más de carne en los pómulos y los brazos; la segunda, con una mirada no tan hambrienta y voraz.
—¿Qué tal te encuentras hoy, Daigo?
—Va siendo hora de que mejor. Esto no es un albergue.
Pasaron dos horas hasta que Daigo vio su deseo cumplido. Primero Akiko y luego Ishi aparecieron en la habitación. Las dos se encontraban visiblemente mejor que semanas atrás. La primera con algo más de carne en los pómulos y los brazos; la segunda, con una mirada no tan hambrienta y voraz.
—¿Qué tal te encuentras hoy, Daigo?
—Va siendo hora de que mejor. Esto no es un albergue.