27/01/2025, 23:21
La idea de Rin a la hora de actuar fue un éxito rotundo, y su senpai lo reconoció en el momento con aquella simple palmadita en la espalda. Rin posó sus manos en las caderas, sacando pecho y completamente orgullosa de lo que había conseguido con tanta facilidad, dejando escapar una gran exhalación por sus fosas nasales.
— Je, te dije que sabía como manejarme — respondió, pasando a cruzarse de brazos, mirando con una suave sonrisa. — Vamos, habla o te acabará cayendo una más grande
— Je, te dije que sabía como manejarme — respondió, pasando a cruzarse de brazos, mirando con una suave sonrisa. — Vamos, habla o te acabará cayendo una más grande