29/01/2025, 21:43
— No te preocupes, yo pagaré por ambas. — echó un vistazo a ambos tickets y en menos de cinco segundos ya tenía el dinero.
Se levantó y se lo entregó al padre de la familia.
— Ha estado todo buenisimo, señor Long. Será un placer volver cuando terminemos la misión. — dijo en su tono educado mientras hacía una leve reverencia. — Rin, ¿podemos hablar fuera un momento?
Dicho eso, se dirigiría a la puerta. Ni siquiera miró la galleta de la suerte, seguramente porque no sabía ni qué era.
Se levantó y se lo entregó al padre de la familia.
— Ha estado todo buenisimo, señor Long. Será un placer volver cuando terminemos la misión. — dijo en su tono educado mientras hacía una leve reverencia. — Rin, ¿podemos hablar fuera un momento?
Dicho eso, se dirigiría a la puerta. Ni siquiera miró la galleta de la suerte, seguramente porque no sabía ni qué era.