12/02/2025, 22:37
Sora la miró y pudo ver en ella por primera vez tristeza. Se apartó dejandole el camino libre.
— Claro. Puedes irte cuando quieras. No queria incomodarte. Debería haberme imaginado que no querrías quedarte. Da igual. — a pesar de que su expresión no cambiaba, sus ojos y sus palabras radiaban pena.
— Claro. Puedes irte cuando quieras. No queria incomodarte. Debería haberme imaginado que no querrías quedarte. Da igual. — a pesar de que su expresión no cambiaba, sus ojos y sus palabras radiaban pena.