23/03/2016, 17:36
Al escuchar mi petición Tatsuya se me quedó mirando de reojo, mochi en mano y con una mirada que daba a entender que tenía intención de provocarme. -Hmpf- Resoplé un poco al darme cuenta de sus intenciones mientras pensaba. Y ahora es cuando intenta decir alguna tontería para ver si consigue picarme, pero no lo va a conseguir tan fácil. Quiero ese mochi pensé seguro de mi mismo mientras esperaba a que me diese mi mochi.
-¿Acaso eres tan débil que no te da el brazo para agarrarlo tu mismo?- Fue lo que me respondió.
-Tsk- Chasqueé la lengua al escuhar su respuesta. Lo sabía, sabía que no me brindaría un solo mochi sin intentar molestarme un poco, y siendo sinceros lo había conseguido.
Estaba cansado y hambriento despues de haber estado entrenando tanto tiempo, mientras el solo había estado sentado todo el día mirando. ¿Qué se creía? Me dispuse a tomar yo mismo uno de los postres, casi a la vez que Tatsuya acababa su propio mochi. Momento en que volteó la mirada para verme.
-Estas hecho un desastre, tocaste el bokken sudado y además lo recogiste del suelo, ve a lavarte las manos al río, o... ¿Estas tan cansado que ni eso puedes hacer?- Remató Tatsuya lo que había dicho hace un tiempo. Durante un instante me detuve, lo miré un segundo de reojo a punto de coger el mochi. No parecía tener la intención de marcharme a lavarme las manos para poder comer y de hecho no la tenía.
Me dispuse nuevamente a tomar el mochi que me correspondía por derecho, al fin y al cabo ¿Cómo podría el comérselos todos? Era lo que pensaba mientras tomaba uno de los pasteles sin si quiera preguntar nuevamente. Ya lo tenía entre mis manos y muy pronto entre mis fauces, pero la voz de un hombre de mediana edad me interrumpió.
El señor se acercó a nosotros. Tenía una altura media, una cabellera café que caía casi hasta a sus hombros, la musculatura y la piel de un civil que aparentemente hacía algún tipo de trabajo físico usualmente, una barba algo corta y una mirada que denotaba una gran preocupación
-Escuchen, jóvenes, ¿Pueden ayudarme? Necesito su ayuda, mi hijo Kenta se ha perdido y no lo encuetnro por ningún lado.- Nos dijo para llamar nuestra atención. Yo lo ignoré completamente mientras saboreaba mi postre, pero el hombre no parecía estar dispuesto a ceder y continuaba frente a nosotros, suplicando nuestra ayuda con la mirada.
-¿Acaso eres tan débil que no te da el brazo para agarrarlo tu mismo?- Fue lo que me respondió.
-Tsk- Chasqueé la lengua al escuhar su respuesta. Lo sabía, sabía que no me brindaría un solo mochi sin intentar molestarme un poco, y siendo sinceros lo había conseguido.
Estaba cansado y hambriento despues de haber estado entrenando tanto tiempo, mientras el solo había estado sentado todo el día mirando. ¿Qué se creía? Me dispuse a tomar yo mismo uno de los postres, casi a la vez que Tatsuya acababa su propio mochi. Momento en que volteó la mirada para verme.
-Estas hecho un desastre, tocaste el bokken sudado y además lo recogiste del suelo, ve a lavarte las manos al río, o... ¿Estas tan cansado que ni eso puedes hacer?- Remató Tatsuya lo que había dicho hace un tiempo. Durante un instante me detuve, lo miré un segundo de reojo a punto de coger el mochi. No parecía tener la intención de marcharme a lavarme las manos para poder comer y de hecho no la tenía.
Me dispuse nuevamente a tomar el mochi que me correspondía por derecho, al fin y al cabo ¿Cómo podría el comérselos todos? Era lo que pensaba mientras tomaba uno de los pasteles sin si quiera preguntar nuevamente. Ya lo tenía entre mis manos y muy pronto entre mis fauces, pero la voz de un hombre de mediana edad me interrumpió.
El señor se acercó a nosotros. Tenía una altura media, una cabellera café que caía casi hasta a sus hombros, la musculatura y la piel de un civil que aparentemente hacía algún tipo de trabajo físico usualmente, una barba algo corta y una mirada que denotaba una gran preocupación
-Escuchen, jóvenes, ¿Pueden ayudarme? Necesito su ayuda, mi hijo Kenta se ha perdido y no lo encuetnro por ningún lado.- Nos dijo para llamar nuestra atención. Yo lo ignoré completamente mientras saboreaba mi postre, pero el hombre no parecía estar dispuesto a ceder y continuaba frente a nosotros, suplicando nuestra ayuda con la mirada.
![[Imagen: IMG-20210515-202948-586.png]](https://i.ibb.co/fqtcMG8/IMG-20210515-202948-586.png)
¡Muchas gracias a Nao por el sensual avatar y a Ranko por la pedazo de firma!
Team pescado.