16/02/2019, 00:40
Daruu se reincorporó y le dio una palmadita en la espalda.
—Oh, vamos, ¡no llores! —dijo—. Ya está todo. Ya ha pasado. Estoy contigo. Centrémonos en disfrutar, ¿sí?
Los muchachos terminaron de comer en silencio. Daruu pagó la cuenta, como había prometido, y ambos se marcharon en busca de un buen hotel donde pasar aquellos días. Llevaban un rato caminando cuando Daruu decidió romper el silencio con algo a lo que le había estado dando más de una vuelta.
—Oye, ya que hablabas antes de Kokuo —dijo—. Cuando os visité, en la cárcel, me parece recordar que tenías algo en mente para ayudarla a ser más libre. ¿Vas a contármelo en algún momento?
—Oh, vamos, ¡no llores! —dijo—. Ya está todo. Ya ha pasado. Estoy contigo. Centrémonos en disfrutar, ¿sí?
Los muchachos terminaron de comer en silencio. Daruu pagó la cuenta, como había prometido, y ambos se marcharon en busca de un buen hotel donde pasar aquellos días. Llevaban un rato caminando cuando Daruu decidió romper el silencio con algo a lo que le había estado dando más de una vuelta.
—Oye, ya que hablabas antes de Kokuo —dijo—. Cuando os visité, en la cárcel, me parece recordar que tenías algo en mente para ayudarla a ser más libre. ¿Vas a contármelo en algún momento?