23/04/2019, 13:44
Tanto Daruu como Datsue se quedaron en silencio, y Ayame se mordió el labio inferior, con el corazón galopante en el pecho. Ya estaba comenzando a temer que la hubiesen abandonado, cuando escuchó la voz de su compañero:
—Ayame. Esto que nos cuentas es muy preocupante, sobretodo si estás en lo cierto. Pero me resulta tan increíble...
—¡Ya lo sé! —gimió ella, angustiada—. ¡Pero precisamente por eso os he llamado a estas horas de la noche!
Para ella era igual de difícil para ellos. O quizás incluso más. Ella no había sido la única persona que había visto a Calabaza, pero sí había sido la única persona que le había terminado reconociendo como Uchiha Akame. Dejando a un lado a Kaido, claro está, pero dada su condición de exiliado de la aldea no podían contarle como testigo.
La pobre muchacha estaba comenzando a sentirse como la típica loca que estuviera intentando explicar algo inexplicable, y eso la llenaba aún más de angustia.
—Si de verdad es él... Si de verdad es Uchiha Akame y se aliando con Kaido, las aldeas deben saberlo...
—Datsue, por favor, di algo... creo que Ayame dice la verdad. Y estoy empezando a asustarme.
—Ayame. Esto que nos cuentas es muy preocupante, sobretodo si estás en lo cierto. Pero me resulta tan increíble...
—¡Ya lo sé! —gimió ella, angustiada—. ¡Pero precisamente por eso os he llamado a estas horas de la noche!
Para ella era igual de difícil para ellos. O quizás incluso más. Ella no había sido la única persona que había visto a Calabaza, pero sí había sido la única persona que le había terminado reconociendo como Uchiha Akame. Dejando a un lado a Kaido, claro está, pero dada su condición de exiliado de la aldea no podían contarle como testigo.
La pobre muchacha estaba comenzando a sentirse como la típica loca que estuviera intentando explicar algo inexplicable, y eso la llenaba aún más de angustia.
—Si de verdad es él... Si de verdad es Uchiha Akame y se aliando con Kaido, las aldeas deben saberlo...
—Datsue, por favor, di algo... creo que Ayame dice la verdad. Y estoy empezando a asustarme.