18/07/2019, 16:01
—E-espero que el destino cruce nu-nuestros caminos. Pronto.
Kazuma observo con atención a la muchacha, y se le ocurrió que quizás, de alguna manera, ella era una de esas personas reales que deseaba conocer: solía sentir que los demás aspirantes a ninja solo tenían una faceta, una cara que se mostraba permanentemente como la única cosa que querían en la vida. En concreto, le parecían superficiales…, pero puede que entre ellos hubiese gente como Ranko.
—Y también lo espero, Ranko-san —dijo con una tenue sonrisa—. Hasta la próxima.
El joven comenzó a caminar, alejándose de la muchacha; pero de pronto una duda le asalto, y supo que no podría estar tranquilo sino la respondía, o al menos la expresaba.
—Solo una cosa más —dijo mientras se giraba lentamente—: dime, ¿por qué te gusta la poesía?
Kazuma observo con atención a la muchacha, y se le ocurrió que quizás, de alguna manera, ella era una de esas personas reales que deseaba conocer: solía sentir que los demás aspirantes a ninja solo tenían una faceta, una cara que se mostraba permanentemente como la única cosa que querían en la vida. En concreto, le parecían superficiales…, pero puede que entre ellos hubiese gente como Ranko.
—Y también lo espero, Ranko-san —dijo con una tenue sonrisa—. Hasta la próxima.
El joven comenzó a caminar, alejándose de la muchacha; pero de pronto una duda le asalto, y supo que no podría estar tranquilo sino la respondía, o al menos la expresaba.
—Solo una cosa más —dijo mientras se giraba lentamente—: dime, ¿por qué te gusta la poesía?