4/02/2019, 20:03
—¡Así será!— Correspondió al saludo apretando la mano de Kurozuchi, la mano del que sería a partir de ahora su nuevo maestro.
Ahí, en la puerta del borde de la sala, Iroha se observaba recostada en el marco, sonriente y de brazos cruzados.
Ahí, en la puerta del borde de la sala, Iroha se observaba recostada en el marco, sonriente y de brazos cruzados.