Ritsuko es una joven con un cuerpo de contextura atlética aunque sus músculos parecen estar lejos de marcarse, no importa por donde se la mire, no tiene ningún indicio de haber tenido algún tipo de entrenamiento. Fuera de estos pequeños detalles, físicamente su cuerpo se ha desarrollado levemente, su estatura está entre la media y la alta, sus piernas y caderas presentan cierto grosor y su busto un volumen acorde a su edad. De todas formas las curvas que posee ahora no llegan a ser las de una mujer adulta aunque si las de una adolescente. Además, es una chica pálida aunque sin llegar al blanco excesivo y enfermizo y las únicas imperfecciones en su piel son una cicatriz en el brazo izquierdo y otra en el vientre a un lado del ombligo, además de dos válvulas diminutas e inútiles bastante cerca de la comisura lateral externa de cada ojo.

El rostro de esta chica no tiene nada de llamativo, mejillas redondeadas, nariz pequeña y grandes ojos de color rojo punzó igual al de su larga cabellera. Esta última suele mantenerla atada a pocos centímetros del final cercano a su cintura con un lazo rojo. Por mucho tiempo la chica no le dedicó prácticamente nada de tiempo a su cabello pero ahora, gracias a la atención brindada su cabello se muestra perfectamente lacio y sedoso e incluso algo más largo de lo habitual llegándole a la altura de los glúteos.

El flequillo por su parte aun se mantiene igual que siempre, le resulta imposible darle una forma así que tras cepillarlo lo deja como quede y ya, usualmente los mechones más largos llegan hasta la altura de las cejas y nunca logra estorbarle a la vista. Además, en la parte superior de la cabeza sigue saliéndole un largo mechón que parece una especie de antena, tiene una forma de arco cuya punta termina por delante de ella y que le cae en gracia adornar con un cascabel.

Algo que siempre viste Ritsuko es top estilo corsé sin muchos detalles en el, es de un color negro con algunos detalles lineales por los bordes de color rojo además de una franja roja en la parte frontal que oculta una bragueta y algunas perforaciones en la espalda justo a la altura donde están las válvulas, luego usa un pantalonsillo también negro que le deja las piernas casi completamente expuestas. Por encima de esta última prenda tiende a ponerse una falda roja de tipo tubo un poco más larga pero tampoco cubre demasiado.

Por otra parte, tiende a utilizar una gabardina reversible, negra por un lado y roja por el otro. Tiene mangas largas y abultadas que permiten ocultar perfectamente armas de buen volumen, una capucha de tamaño considerable y la falda posee un corte triangular en la parte frontal para permitir el libre movimiento de la chica. Aun así, el sector que cubre el torso se apegada al cuerpo de la joven y además tiene varios botones adicionales en la parte frontal, aunque solo los utiliza en días fríos.

Para días fríos lo único que esta kunoichi cambia es el top y el pantalonsillo, en lugar de estos usa una playera de mangas largas hecha con el mismo material de los abrigos polares y un pantalón del mismo material de la prenda anterior y ambos son del mismo tono de negro además de estar ajustados al cuerpo de la chica. Por encima del pantalón también suele usar la falda roja que se describió previamente.

Para terminar, la pelirroja siempre lleva la bandana shinobi atada a la cintura como si de un cinturón se tratase y el portaobjetos se encuentra por encima de su glúteo derecho y sobre la gabardina para facilitar el acceso. En los pies siempre se la verá usando las típicas sandalias shinobi pero con la particularidad de que estas tienen un agujero circular en la suela justamente para la válvula que posee en cada pie.

Pese a todo lo vivido Ritsuko se muestra totalmente indiferente a lo que se cuenta por ahí, le da exactamente lo mismo si la miran bien o mal, si la insultan, le escupen en la cara o le dedican una agradable sonrisa puesto que en el fondo de su ser no le afectan en lo más mínimos los cuentos que circulan sobre ella o su vida.

Así fue como le ha tocado enfrentarse a la vida y así es como lo hará, con absoluta indiferencia a todo incluso cuando se supone que su vida corre peligro, le importará nada. ”Me importa una mierda” dirá seguido y no será una mentira ni un intento por hacerse la dura, será absolutamente cierto.

La única opinión que realmente le vale es la de su propia madre, la cual estando difunta mucho no podrá aportar así que la voz de su cabeza pasaría a tener la máxima prioridad, pues está convencida que es la voz de su madre que sigue en este plano. En otras palabras, la única ‘persona’ a la que escuchará con suma atención será a sí misma.

Usualmente se muestra fría e indiferente con todos, trata de relacionarse lo mínimo posible porque a su ojo todos son iguales, unos hipócritas que solo buscan que el resto les acepten incluso si eso significa repudiar al más necesitado y por si fuera poco, a estos últimos que verdaderamente necesitan algún tipo de ayuda les tratará de la misma manera. ¿Por qué? ”Si yo pude, ellos también.” Esa es una de sus ideologías principales.

No le importa la situación ajena, no le importan las diferencias en ambientes de crianzas ni nada similar, a ella lo único que le importa es seguir respirando por mucho que en ocasiones pueda dificultársele debido a su enfermedad.

Y no, esta chica no es como otras que tienen sus facetas, no cambiará su forma de tratar a nadie solo porque se ganen su confianza, sencillamente seguirá en la suya como siempre. No le importa si se queda sola, no le importa no tener amigos ni compañeros en los que fiarse, no le importa nada siempre y cuando tenga su máscara o a su madre cerca. En casos extremos, un cascabel sirve para tranquilizarle.

Pero ser antisocial no implica que sea estúpida, claro que no, siempre aceptará la misión que su kage tenga para ella incluso si eso es básicamente suicidarse, hará lo posible por cumplirla lo más rápido posible porque para ella ser una kunoichi significa ser rápida, silenciosa, precisa y en lo posible, una completa desconocida. Aunque nadie en la aldea se lo permita.

No busca la aprobación, el afecto, el odio, no busca absolutamente nada en su vida, solo seguir respirando día tras día para no darle el gusto a aquellos que desean que muera.

También es habitual que en momentos de soledad, o en los que cree que no hay personas cerca comience a entablar una conversación consigo misma y en voz alta, puede tener incluso algunas reacciones dignas de alguien que realmente está interactuando con otro ser, pero nada de esto es real, está siempre sola en medida de lo posible y solo habla e interactúa consigo misma.

¤ La naturaleza te lo da (Gratis)
—No sé, los arbolitos se me hacen diferentes, por ejemplo... En ese me di una hostia cuando era pequeña, todavía tiene la ramita algo astillada.

¤ Ambidiestro (coste de 1 punto)
—Dos manos, para algo están, venga. No saber usarlas es de estúpidos.

¤ Poco escrupuloso (coste de 1 punto)
—Bueno... Convengamos que mi viejo trabajaba con cadáveres y no siempre estaban bonitos... Los cadáveres, el tipo nunca fue bonito a mi vista.

¤ Ventaja genética (coste de 3 puntos)
—Se supone que tendría que buscarme la forma de que me saquen todo esto pero me resulta cómodo para sacar lava de otros lados sin que nadie se lo espere.

¤ Conductos de Chakra

¤ Infame (otorga 1 punto)
—Lo que pasó con la familia y demás mierdas no son secreto para nadie. Todos saben cómo era mi viejo, las borracheras que se pegaba y las palizas que me metía. Lo que no entiendo es por qué carajos dicen que mi madre está muerta cuando está siempre conmigo.

¤ Pesadillas (otorga 1 punto)
—No pasa una sola noche en que sueñe que mi padre se tiraba a la forja con mi madre en lugar de ese esqueleto, no sé por qué, pero no me gusta nada despertarme llorando así.

¤ Fobia agudizada a los gatos (otorga 1 punto)
—¡Esos bichos son la peor mierda del mundo! ¡Saben que pueden matarme y todavía vienen a buscarme!

¤ Alergia al pelo de gato (otorga 1 punto)
—Hasta cuando no me tocan me pueden matar, o sea no es por nada, pero me pasan los pelos de uno de esos cerca y se me irrita la piel, o las moqueras... Una mierda.

¤ Exclusión de contrincante [niños menores de 10 años] (otorga 1 punto)
—No, nunca, jamás en la puta vida voy a pelearme de nuevo con un pendejo. La última vez resultó ser que sabía usar armas y me terminó apuñalando.

¤ Trastorno psicológico (otorga 2 puntos)
—Todos insisten en que estoy mal de la cabeza, pero no es cierto, ¿verdad mamá?

¤ Negación de la Realidad