11/12/2017, 23:25
¤ Katon: Hō-ō Tamago no Jutsu
¤ Elemento Fuego: Técnica del Huevo de Fénix
- Tipo: Ofensivo
- Rango: A
- Requisitos: Uchiha 25
- Gastos:
- Efectos adicionales: -
- Sellos: Caballo → Dragón → Buey → Liebre → Jabalí → Caballo → Tigre
- Velocidad: Media
- Alcance y dimensiones:
¤ Elemento Fuego: Técnica del Huevo de Fénix
- Tipo: Ofensivo
- Rango: A
- Requisitos: Uchiha 25
- Gastos:
- 21 CK, 5 CK activar
- (Uchiha 45) (multiplicable x2)
- (Uchiha 65) (multiplicable x3)
- Efectos adicionales: -
- Sellos: Caballo → Dragón → Buey → Liebre → Jabalí → Caballo → Tigre
- Velocidad: Media
- Alcance y dimensiones:
- 1 metro de ancho y 1 de largo como proyectil, 2 metros de ancho y 2 de largo al explotar, alcanza 2 metros antes de disiparse como proyectil (multiplicado x1)
- 2 metros de ancho y 2 de largo como proyectil, 3'5 metros de ancho y 3'5 de largo al explotar, alcanza 3 metros antes de disiparse como proyectil (multiplicado x2)
- 3 metros de ancho y 3 de largo como proyectil, 5 metros de ancho y 5 de largo al explotar, alcanza 4 metros antes de disiparse como proyectil (multiplicado x3)
El usuario dispara desde su boca una bola de fuego muy similar en aspecto al Gōkakyū no Jutsu, con dos diferencias notables: su velocidad de viaje es notablemente inferior a la referida, de forma que cualquiera con un mínimo de reflejos podrá quitarse de en medio a tiempo, y se puede observar una especie de núcleo blanquecino en el interior del orbe, como si tuviera una esfera nívea en su interior rodeada por el habitual color anaranjado y rojizo de las llamas.
Una vez la técnica esté en tránsito, el ejecutor, sosteniendo el sello del Carnero con una mano durante unos segundos, puede desestabilizar el chakra del interior del proyectil a voluntad, llevando a que la bola de fuego colapse sobre sí misma, generando una violenta conflagración que azotará a todo lo que se encuentre en el interior de su rango. Ahí es donde reside el auténtico daño de la técnica, no en la esfera en sí, que igualmente desprenderá calor y producirá quemaduras leves (5 PV si se da contacto físico).
Una vez la técnica esté en tránsito, el ejecutor, sosteniendo el sello del Carnero con una mano durante unos segundos, puede desestabilizar el chakra del interior del proyectil a voluntad, llevando a que la bola de fuego colapse sobre sí misma, generando una violenta conflagración que azotará a todo lo que se encuentre en el interior de su rango. Ahí es donde reside el auténtico daño de la técnica, no en la esfera en sí, que igualmente desprenderá calor y producirá quemaduras leves (5 PV si se da contacto físico).