13/10/2016, 16:17
— Pues, si es una reapertura de algún negocio, supongo venderán algo y no tengo mucho dinero encima… Pero descuida, tengo para pagar la comida…no te vayas a alarmar — El ojiblanco sonrío ante su propio comentario, y Riko hizo lo propio, aunque seguía bastante concentrado en acabar su plato de ramen, al que ya solo le quedaba el caldo, que bebió de forma rápida.
— ¡Jefe! Dime cuánto te debo. — Soltó el de rastas, y el hombre asintió y les tendió una pequeña cuenta, a lo cual reaccionó echando mano a su bolsillo y sacando el dinero justo, y un poco más, de propina, que le dio al hombre en mano.
— Pero si, todo a su momento…enfrentarme a mi sensei se traduciría en una derrota aplastante, pero eso no me detendrá, algún día le venceré — Riko miró a su compañero, que parecía querer quitarle importancia a lo que acababa de decir, pero que al fin y al cabo, era algo importante, querer superar a tu maestro es algo bueno.
— ¡Claro que si! Al fin y al cabo, el alumno acaba superando al maestro, ¿no? — Animó el de rastas a Hazegawa.
Ambos genin se disponían a salir del local, y antes de cruzar el umbral de la puerta, el moreno se fijo en un pequeño reloj de pared, y al darse cuenta de la hora, se apresuró.
— Oye Haze, me da que tendremos que dejar el entrenamiento para otro día, tengo que estar en casa en nada y no se si me va a dar tiempo, ¿vale? — Dijo Riko un poco a trompicones. — La próxima vez que nos veamos, tenemos ese combate. — Y tras estas palabras, el joven echó a correr. — ¡Adiós!
— ¡Jefe! Dime cuánto te debo. — Soltó el de rastas, y el hombre asintió y les tendió una pequeña cuenta, a lo cual reaccionó echando mano a su bolsillo y sacando el dinero justo, y un poco más, de propina, que le dio al hombre en mano.
— Pero si, todo a su momento…enfrentarme a mi sensei se traduciría en una derrota aplastante, pero eso no me detendrá, algún día le venceré — Riko miró a su compañero, que parecía querer quitarle importancia a lo que acababa de decir, pero que al fin y al cabo, era algo importante, querer superar a tu maestro es algo bueno.
— ¡Claro que si! Al fin y al cabo, el alumno acaba superando al maestro, ¿no? — Animó el de rastas a Hazegawa.
Ambos genin se disponían a salir del local, y antes de cruzar el umbral de la puerta, el moreno se fijo en un pequeño reloj de pared, y al darse cuenta de la hora, se apresuró.
— Oye Haze, me da que tendremos que dejar el entrenamiento para otro día, tengo que estar en casa en nada y no se si me va a dar tiempo, ¿vale? — Dijo Riko un poco a trompicones. — La próxima vez que nos veamos, tenemos ese combate. — Y tras estas palabras, el joven echó a correr. — ¡Adiós!
~ Narro ~ Hablo ~ «Pienso»