Otoño-Invierno de 221
Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.
Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.
Nivel
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12 |
Exp
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74 puntos |
Dinero
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2000 ryō |
Ficha de personaje
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Uchiha Umi Datos básicos
· Fecha de nacimiento: Primer Mizuyōbi de Augurio del año 202 · Residencia: Uzushiogakure · Género: Femenino · Facultad personal: Uchiha · Naturalezas del chakra: Katon, Suiton Descripciones
· Física: · Psicológica: Atributos
· Nivel: 12 • Fuerza: 30 • Resistencia: 30 • Aguante: 40 • Agilidad: 40 • Destreza: 40 • Poder: 40 • Inteligencia: 40 • Carisma: 20 • Voluntad: 30 • Percepción: 40 • PV: 170 • CK: 180 Facultades
• Facultad personal (Uchiha): 60
Inventario
Portaobjetos básico (tras la cintura) (5/10) - Shuriken (x5): 8 PV/corte superficial, 12 PV/corte e impacto directo - Kemuridama (x1): 6 metros de humo gris durante 2 turnos Méritos y defectos
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Historia
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Prólogo Se movían a través de la planicie en silencio, como sombras, auspiciados bajo un manto oscuro. Como extraños en su propio país. Como extraños, habían salido por encima del muro, mientras puertas adentro comenzaba el caos. Sus pies caminaban, torpes y agitados, por las susurrantes hierbas mecidas al viento. Las suelas chapoteaban en los charcos y en el barro. Las hermanas iban de la mano, siguiendo a sus padres. Sus corazones latían a toda velocidad. Umi veía en el rostro de su hermana el miedo, a pesar de que no conocía la verdad. Volteó la vista una última vez hacia lo que había sido su hogar, y sintió que los ojos se le anegaban. Vio una columna de humo allá, a lo lejos, y se obligó a apartar la mirada. Las espaldas de sus padres se alejaban, inconscientes de que sus hijas no podían correr tan rápido. Umi apremió a su hermana, pero aún así les era casi imposible seguirles el paso. Umi tragó saliva. Empezó a marearse. Las siluetas de sus padres se le emborronaron durante un instante. Como si supiera lo que estaba a punto de ocurrir. · · · Umi y Suzaku yacían acurrucadas en una esquina. Umi abrazaba a su hermana, que seguía durmiendo, ajena a lo que pasaba. Ryūken y Akiko, sus padres, empuñaban sendos kunais atrincherados a ambos lados de la puerta. «Sólo hemos parado a descansar un momento», se dijo Umi. «¡Sólo ha sido un momento! ¡No pueden habernos alcanzado tan rápido!» Habían escuchado ruidos de pasos en el tejado. Luego, un aterrador silencio que duró más de tres largos minutos. «Quizás no haya sido nada. Quizás hayan sido unos pájaros, o...» ¡CRASHH! PTMBFIIIIIIIIIIIIiiiiiiiiiiiii!
Entraron por la ventana. El vidrio quebró y dos pequeñas esferas rodaron por la habitación. Una bomba de luz y otra de sonido. Umi soltó a su hermana, que despertó de golpe. Hubieron ruidos metálicos, provocados por el choque y el roce de los aceros. Cuando pudo sobreponerse de las bombas, vio a su hermana tirada en el suelo. Levantó la vista. Había dos hombres uniformados, con máscaras: ANBUs de Hanabi. Su madre estaba muerta. Su padre estaba arrinconado en una esquina, frente a las puntas brillantes de dos espadas. —¡¡PAPÁAAAAA!! —La vista se le tiñó de carmesí, por primera vez en su vida. «Por favor, por favor, diles que te rindes, sólo queríamos huir, no hicisteis prácticamente nada por él, especialmente tú. Te perdonarán, te...» —Umi buscó a su alrededor. Una katana grande en el suelo. Se agachó, la empuñó... pesaba demasiado para ella... —La... larga vida a Uzushiogakure no Sato. Larga vida a Zoku. Umi se quedó paralizada en el sitio. ¿Por qué? Zoku había perdido. Zoku probablemente ya estaría muerto. A su padre ni siquiera le gustaba aquél diablo. Umi tenía la sensación de que sólo le seguía el juego a mamá. Y mamá lo apoyaba porque su familia lo hacía. La misma que renegaba de ella por casarse con un Uchiha en lugar de un Uzumaki. ¡Y ninguno de ellos había hecho más que robar algunos documentos para él! No tenía sentido. Nada de aquello tenía sentido. Iban a morir por el ideal de otros. Y los ANBU iban a matar por el ideal de otros. Uno de ellos atravesó el pecho de Ryūken. Desde aquél día, Umi decidió que si tenía que morir por alguien, sería por su familia. —¡AAAAAAAAAAAAHHHHH, aaaaAAAAAA... —Torpemente, cargó con la espada hacia adelante. · · · —...AAAAAAAAAAAAAAH!! —Umi se destapó y se reincorporó de golpe, sudando a pesar de que era pleno invierno. No estaba en la posada. No estaba allí. Todo aquello había pasado hacía ya años... «Si tan sólo pudiera volver atrás... advertirles... sugerir no detenernos en aquella mierda de posada... seguir caminando...» Pero no. No podía volver atrás. Sus padres murieron aquella noche, y luego las llevaron de vuelta a la aldea, argumentando que tan sólo eran niñas. Interrogaron a Umi. Fingió que no sabía nada, claro. Le creyeran o no, los hombres de Hanabi parecieron apiadarse de ellas. La casa de sus padres había ardido en un incendio derivado de las revueltas, así que Uzushiogakure les construyó una nueva y se encargó de su manutención y educación, hasta que pudieran pagarse sus propios gastos. «Una broma cruel. Matan a tus padres, y luego te dan una casa y una oportunidad educativa en la academia para que mates a otros por ellos.» Umi jamás le contó a Suzaku la verdadera afiliación política de sus padres, sin embargo, ni buscó retribución alguna. Sushi era la única familia que le quedaba. Su sueño, desde antes de la muerte de sus padres, había sido en convertirse en toda una kunoichi, como ellos. Para Umi, Uzushiogakure jamás volvería a ser un hogar, pero para Suzaku aún había tiempo. No le iba a quitar eso también a ella. Así que no hubo alternativa. Se hizo kunoichi, se esforzó para ganar un buen sueldo y no depender de aquellos bastardos, y cuidó de su hermana hasta que pudo apuntarse a la academia. Ahora dormía ahí al lado, en su cama, a apenas dos metros, todavía con su recién adquirida bandana atada alrededor de la fuente. Pese a su grito. Siempre había tenido un sueño pesado. A Umi se le dibujó una sonrisa. Volvió a atormentarse cuando recordó la situación internacional. Los Señores Feudales de casi todos los países la habían palmado. El mismísimo Kyūbi amenazaba con conquistar todo Oonindo. ¡Joder, un día estaba caminando por el puerto tan tranquila y un puto bijū hizo acto de presencia en la propia Uzushiogakure! Todo el mundo parecía muy inquieto últimamente, y todas las señales parecían apuntar a que se avecinaba una guerra. No estaba segura de que quisera formar parte de todo aquello. Ella sólo quería el dinero. Para tener una buena casa, para comer buena comida, para no tener que preocuparse por el gasto del aire acondicionado en verano. Pero no quería ir a guerrear por ningún estúpido símbolo en espiral. Sólo quería una vida acomodada, plena y feliz para ellas dos. No estaba segura de que quisiera formar parte de todo aquello. Pero sí estaba segura de que no quería que Sushi lo hiciera. Se levantó de la cama y cruzó el pasillo, dejando atrás las escaleras que llevaban al salón y a la cocina, y entró al baño. Se miró en el espejo. «Estúpida, te has ido a dormir con el maquillaje puesto. Mira todo ese rimel, cayéndote por el moflete. Pareces un fantasma. Si Suzaku se levanta la vas a matar del susto.» Rio en voz baja y se lavó bien la cara. Pero no estaba segura de que pudiese dormir. «Tengo que hablar con ella. No puedo perderla, no a ella también.» |
Cronología
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Técnicas del sistema
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Nº total de técnicas: 22/24 Habilidades: ¤ Shinobi Buki Kumite Técnicas: ¤ Katon: Gōkakyū no Jutsu ¤ Katon: Hōsenka no Jutsu ¤ Katon: Hōsenka Tsumabeni ¤ San Tomoe no Sharingan ¤ Saimingan Habilidades: ¤ Escalada Vertical ¤ Andar sobre el Agua ¤ Kuchiyose no Jutsu Técnicas: ¤ Bunshin no Jutsu ¤ Nawanuke no Jutsu ¤ Henge no Jutsu ¤ Kawarimi no Jutsu ¤ Shunshin no Jutsu [b]Técnicas: ¤ Suiton: Mizurappa ¤ Suiton: Mizugakure no Jutsu ¤ Suiton: Mizuame Nabara ¤ Suiton: Teppōdama ¤ Suiton: Suikōdan no Jutsu ¤ Mizu Bunshin no Jutsu ¤ Suiton: Suigadan ¤ Suiton: Suishōha ¤ Suiton: Suijinheki Técnicas: ¤ Kage Shuriken no Jutsu Habilidades: ¤ Shinobi Kumite Técnicas: ¤ Rasengan |
Evolutivas
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Mérito diseñador
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Técnicas alteradas
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Primer alterador (1-5)
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Reacciones |
Reacciones más recibidas |
2
2
1
1
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Reacciones más dadas |
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