No vayas a tropezar - Versión para impresión +- NinjaWorld (https://ninjaworld.es) +-- Foro: Base de datos del rol (https://ninjaworld.es/foro-base-de-datos-del-rol) +--- Foro: Historia, acontecimientos y ambientación (https://ninjaworld.es/foro-historia-acontecimientos-y-ambientacion) +---- Foro: Tramas pre-reset 2017 (https://ninjaworld.es/foro-tramas-pre-reset-2017) +---- Tema: No vayas a tropezar (/tema-no-vayas-a-tropezar) |
RE: No vayas a tropezar - Uchiha Datsue - 3/11/2015 20.000 ryos. Ese era el dinero que Datsue tenía que conseguir para pagar la deuda de sus padres. Una cifra astronómica, inalcanzable para la mayoría de gennins. Harían falta 40 misiones de rango D, o 20 de rango C, y eso sin contar con los gastos del alquiler del piso, luz, agua, comida… Pasaría un año, siendo generosos, hasta que ahorrase lo suficiente. “Pero un año es demasiado” Por eso había decidido viajar a Shinogi-to. Allí conseguiría lo que necesitaba para sacarse un pequeño complemento a su precario salario como shinobi de Takigakure. Pero antes de partir hacia la aventura, tenía que hacer una cosa. Algo ineludible. Datsue caminaba por las raíces del gran Árbol Sagrado, buscando una zona tranquila. Encontrar algo así era tarea difícil, pues raro era el día en que aquel lugar no estuviese invadido por el sonido de los gritos y el entrechocar de aceros. A lo lejos, dos jóvenes parecían charlar amistosamente, como si todo aquello de entrenar no fuese con ellos. Datsue se acercó, no porque les interesase, sino porque no parecía haber nadie más cerca. “Menuda pareja más rara” pensó Datsue al verlos de cerca. Y se quedaba corto. Aquellos chicos eran la definición hecha persona de lo excéntrico. El muchacho, algo mayor que él, tenía la cabellera más larga que había visto en su vida, toda trenzada. Pero la chica no se quedaba atrás, con unas extrañas pinturas dibujadas en el rostro que le hacía parecer un mapache. “En fin, mientras no me molesten…” se dijo Datsue, subiendo por las raíces y llegando hasta el tronco del árbol. Una vez allí, posó su frente sobre la corteza y respiró profundamente. —Ha pasado tiempo, eh… —dijo en voz baja—. He venido a despedirme. RE: No vayas a tropezar - Ritsuko - 15/11/2015 Allí estaba la kunoichi mapache entablando conversación con bastante seriedad con su compañero de aldea hasta que pudo observar a un lado del mismo una figura observándolos y esta vez no se trataba de su madre, sino de otra persona cuya cabellera también la hacía dudar un tanto de su género pese a que no era tan larga como la del hombre con el que estaba hablando actualmente. La atención de la pelirroja al instante se desvió por completo hasta el punto de olvidar por completo de qué estaba hablando, por lo que luego de una despedida rápida se acercó a la persona que se había subido a una de las raíces del árbol sagrado para luego a la vista de la chica, darle un cabezazo al tronco. ~ ¿Será una técnica...? ~ Se preguntó al mismo tiempo que subía por la raíz como él lo había hecho previamente. La chica no dijo nada, tampoco lo haría por lo menos hasta sacarse la duda de si eso que hacía era algún tipo de entrenamiento o simplemente le gustaba darle cabezazos a las cosas por muy 'indestructibles' que fuesen. ~ Pero también me dijeron que a golpes se pueden acomodar las neuronas... ~ Decía en su cabeza la chica mapache que se había llevado una mano al mentón mientras analizaba la situación. Sin éxito alguno y al ver que el chico no hacía más nada que eso, la kunoichi se arriesgó a romperle la concentración y tal vez destrozar un intento por realizar alguna técnica de alto nivel. - ¿Qué haces...? - Preguntó con inocencia la kunoichi que le observaba a una distancia prudente. Más que nada para prevenir algún tipo de accidente por si algo llegaba a explotar al romperle la concentración. RE: No vayas a tropezar - Uchiha Datsue - 18/11/2015 Y ahí estaba él, ante el Árbol Sagrado, el árbol que, según decían sus padres, le había librado de su extraña enfermedad. Datsue no recordaba la noche en que lo habían abandonado sobre aquellas raíces, sin más amparo que el que le proporcionaba las gruesas ramas que se extendían en lo alto, como si de un improvisado techo se tratase. Había tenido muchos sueños acerca de ello, y muchas más noches las había pasado desvelado por preguntarse qué habría ocurrido exactamente. Era especial, de eso no había duda. O, si no, no habría sido bendecido por la madre naturaleza para no sólo curarse, sino salir reforzado de la extrema debilidad con la que había nacido su cuerpo. Todavía sentía un cierto hormigueo en el estómago cada vez que posaba la frente en el tronco, pues el recuerdo olvidado de aquella noche parecía revivir con aquel simple acto durante un mínimo instante, el suficiente para verlo fugazmente, como un destello, pero demasiado rápido como para que la imagen cobrase sentido. —Parto hacia Shinogi-to —confesó en susurros, con los ojos cerrados—. Allí encontraré lo que necesito para ayudar a mis padres con su deuda… Escucha, no sé porque me ayudaste, ni si lo hiciste para algún propósito que me tengas encomendado… Pero, si es así, házmelo saber, eh… Una señal, un… - ¿Qué haces...? Datsue se sobresaltó por la sorpresa. La kunoichi que momentos antes hablaba con otra persona era la responsable, y le dedicó una de sus expresiones más ceñudas. —¿A ti que te importa? —replicó, con más mala leche de la que pretendía. RE: No vayas a tropezar - Ritsuko - 18/11/2015 No era ninguna sorpresa que aquél desconocido tuviese semejante reacción teniendo en cuenta que le habían destrozado la concentración, aunque Ritsuko no había sido tan brusca como ya había hecho alguna que otra vez con otras personas por lo que el chico la tomó por sorpresa con esa respuesta. La mirada llena de inocencia de la pelirroja se borró al instante mostrándose así como una chica seria, si es que eso era posible considerando el maquillaje que traía en toda la cara. - Considerando que estamos frente al árbol sagrado... Mucho. - Respondió a secas. A ella no le gustaba la idea de que se algo grave pasara al árbol, por ello era que prefería practicar sus técnicas con la lava lejos de la aldea a ser posible para evitar accidentes. ~ Se pasó el paso de intentar ignorarme... ~ Decía en su cabeza la kunoichi que no parecía muy dispuesta a moverse de su lugar mientras esperaba una respuesta medianamente creíble. Además que al chico no lo conocía de nada y no tenía recuerdos de haberle visto alguna otra vez por la aldea, o por lo menos no le había llamado la atención si realmente lo cruzó. - ¿Y bien...? - Agregó al cabo de unos segundos mientras esperaba cruzada de brazos y con un pie encima del otro, dejando todo su peso en su pierna derecha que permanecía completamente estirada a diferencia de la izquierda que estaba ligeramente flexionada hacia adelante. RE: No vayas a tropezar - Uchiha Datsue - 19/11/2015 Datsue pensó que su respuesta había dejado bastante claro a la kunoichi que su presencia no era bien recibida. Por lo visto, se equivocó. - Considerando que estamos frente al árbol sagrado... Mucho. - Respondió a secas. “¿Pero qué cojones dice?” Datsue se quedó a medio camino entre responder y no hacerlo, con la boca abierta, pues la situación lo había pillado desprevenido. No era muy común que una desconocida se parase a preguntarle qué hacía, y menos con tanta insistencia. - ¿Y bien...? “¿Y bien? ¿Pero cómo que y bien? ¿Aún por encima con exigencias? Pero esta de qué va…” Notó como el fuego de la indignación inundaba sus venas y abrasaba sus entrañas. Aquello era demasiado. No iba a consentir que una niñita le hablase de aquel modo. —No me gustas —le soltó de golpe—. No me gusta tu cara pintada, no me gusta tu voz estridente y mucho menos me gustan las palabras que forman. ¿Cómo que y bien? —le preguntó encarándola—. ¿Pero quién te crees que eres para exigirme a mí nada? Estaba furioso, quizá más de lo que la situación ameritaba, pero aquella chica había conseguido sacarle de quicio en tiempo récord, con sus aires de superioridad y exigencias. RE: No vayas a tropezar - Ritsuko - 19/11/2015 Más allá de la costumbre, este chico se estaba pasando de largo todos los rituales previos para mandar a Ritsuko al diablo y aquello definitivamente no le agradaba, no porque la hiciera sentir mal si en realidad aquello le da igual, si no que si todos empiezan a adoptar ese tipo de postura la chica se pasará la vida aburrida. - ¿Y a mi me importa que no te guste? - Respondió con el mismo tono que había utilizado previamente luego de escuchar aquellas palabras que para ella no eran más que estupideces que no vienen a cuento, pues su pregunta había sido bastante clara y no tenía relación alguna con su propio aspecto físico. Pero igual, no se sintió intimidada en lo más mínimo, permaneció en esa postura como si no corriese peligro alguno a sabiendas de que a causa de su deficiencia con las técnicas shinobis estaba en desventaja. ~ Tampoco eres un rey de belleza como para venir a criticarme. ~ Pensaba la kunoichi que siguió un momento más a la espera de una respuesta a su pregunta. De cualquier manera, todo eso que le habían soltado duró poco en la cabeza de la pelirroja, entre todo el palabrerio y la expresión en el rostro del chico tenía algo en claro. ~ Uno peor que yo... ~ Dijo para si misma para luego suspirar pesadamente y simplemente voltearse dándole la espalda al chico. - Tú sabrás lo que haces... - Dijo en un tono normal de voz que posiblemente él no habría llegado a escuchar para luego retirarse caminando en la dirección por la que había ido junto a Satoru. - Parecía muy joven... - Comentó el ente ficticio que había vuelto a hacerse presente al lado de la kunoichi. - Se quedará solo antes que yo seguramente... - Respondió con bastante alegría como era natural en ella. RE: No vayas a tropezar - Uchiha Datsue - 21/11/2015 Al fin. La chica se iba. Había costado, eso sí. Había tenido que sacar su parte más borde y arisca de su personalidad, y su parte más gilipollas, porque no decirlo. Vio como la chica le daba la espalda y entonces ocurrió algo que no estaba previsto. De pronto, sintió una leve presión en el pecho. Datsue arrugó el ceño. ¿Acaso aquella sensación era lo que llamaban culpabilidad? ¿O más bien remordimientos? Miró de nuevo hacia el árbol y las arrugas de la madera parecieron formar un rostro. Un rostro cuya expresión era de clara recriminación. —¿Qué? —murmuró, crispado—. No me mires así. Te pedí una señal, no una chica loca… Las líneas que formaban el rostro en el tronco siguieron mirándole con los mismos ojos reprobatorios. Datsue echó un paso atrás y exhaló un suspiro. Sí, quizá se había pasado un poquito. Y, ahora que lo pensaba, quizá ella fuese la señal que había estado pidiendo… ¿Pero para qué? De pronto en su mente sonó un chasquido y las piezas encajaron. Había sido un necio: necesitaba a esa chica. —¡Espera! —exclamó, trotando hacia la joven antes de que desapareciese entre las raíces. Entonces se colocó a un par de metros—. Oye, puede que me haya pasado un poco... Me has pillado en un mal momento. Datsue esbozó una tímida sonrisa y se rascó la nuca. Esperaba que aquello sirviese como disculpa, porque pedir perdón no se le daba nada bien. —Responderé a tu pregunta, si todavía quieres —añadió—. Te contaré un secreto sobre el Árbol Sagrado que muy pocos de esta aldea conocen. RE: No vayas a tropezar - Ritsuko - 22/11/2015 - Y eso ya es decir... - Respondió la madre de Ritsuko respecto a su último comentario puesto que la chica ya estaba prácticamente sola incluso dentro de la aldea, aunque prefería aparentar que poco le importaba, más que nada para no darle la satisfacción a cierta gente. El dialogo con el ente inexistente no duró demasiado puesto que la pelirroja no estaba con el mejor estado de ánimo en ese mismo instante como para tener aquellos monólogos suyos, además que poco después de que llegase al puente la voz del chico la hizo detenerse. Con suma seriedad, la kunoichi se volteó y miró al chico con una mirada inexpresiva. Respecto a lo que él le dijera, daba igual, lo hecho hecho estaba por ende no sería tan sencillo que su ánimo volviese de forma tan espontánea. —Responderé a tu pregunta, si todavía quieres Fue lo primero que dijo luego de haberse disculpado, a lo que Ritsuko con frialdad respondió. - Ya quedó claro que no le harías nada al árbol. - Ahora sería ella quien tratase con desprecio, más que nada para intentar enseñarle lo molesto y deprimente que puede llegar a ser que un completo desconocido lo hiciera. Te contaré un secreto sobre el Árbol Sagrado que muy pocos de esta aldea conocen. Agregó el chico como si estuviese desesperado por retener a la pelirroja allí. - ¿Qué será? ¿La historia de la fundación de la aldea o de como creció el árbol? - Preguntó ella escondiendo que en el fondo de su ser sentía suma curiosidad por aquel relato. ~ Pero él no tiene por qué saberlo... ~ Se decía a si misma mientras intentaba mantener su postura de 'chica ofendida'. RE: No vayas a tropezar - Uchiha Datsue - 22/11/2015 La joven kunoichi parecía seguir ofendida, cosa que no era de extrañar, pero probablemente la curiosidad que sentía por el secreto que decía tener Datsue sobre el Árbol Sagrado la hizo quedarse. El Uchiha había dado con las palabras adecuadas. —El Árbol Sagrado tiene un poder —empezó diciendo—. Un poder que pocos conocen. Justo en ese momento, una ráfaga de viento empujó hacia adelante el pelo de la kunoichi y sacudió las ropas de Datsue. El Uchiha se pasó la lengua por el labio superior y continuó: —Esta historia empieza en mi nacimiento. Por difícil que resulte de creer —“teniendo en cuenta que ahora mi piel es como el acero y mis huesos como la roca más dura” —, yo nací enfermo. Mis piernas tenían unas tibias tan delgadas que parecían de gelatina, y mis huesos eran tan frágiles que con cualquier movimiento podían romperse. Es más, sufría fracturas por el simple hecho de crecer. Me pasé dos años así, sin apenas poder dormir por el dolor constante. Mis padres pensaban que iba a morir —Datsue realizó una breve pausa dramática—. Y entonces me trajeron aquí —dijo, desviando la vista hacia el tronco—. Me dejaron junto al Árbol Sagrado durante una noche entera… —Datsue se miró las manos y arrugó el ceño—. No recuerdo qué pasó esa noche. A veces sueño con ello, me aparecen imágenes… Pero al despertar se me olvida casi todo. Datsue cambió el peso de una pierna a otra. Era la primera vez que le contaba su pasado a un extraño. Pero necesitaba hacerlo. Necesitaba ganarse su confianza para lo que le iba a pedir. Alzó la mirada y la miró a los ojos. —Lo que sí sé es que al día siguiente, yo estaba curado. El árbol me había curado. “Y me brindó una fortaleza física fuera de lo normal, pero eso no tienes porqué saberlo… todavía” Datsue colocó las manos sobre la nuca y entrelazó los dedos, en una pose relajada. —Así que, básicamente, cuando me interrumpiste le estaba preguntando al Árbol Sagrado la razón por la que me había salvado. Quería saber si esperaba de mí algo a cambio, alguna tarea o propósito y, que si era así, que me mandase alguna señal para poder saberlo. RE: No vayas a tropezar - Ritsuko - 25/11/2015 El único motivo que retenía a Ritsuko frente a este chico que la había tratado peor que cualquier otro desconocido era la curiosidad, ese supuesto poder que el árbol sagrado poseía y que nada le aseguraba que el relato que fuese a escuchar fuese falso, aunque tampoco podía estarse segura de que fuese verdad. En cualquier caso, la pelirroja quería escuchar el cuento, ya luego se encargaría de hacer el juicio de valor vía mental para evitar que el tipo tenga otra rabieta como había tenido antes. —. No recuerdo qué pasó esa noche. A veces sueño con ello, me aparecen imágenes… Pero al despertar se me olvida casi todo. Fueron las oraciones que dieron fin al relato, del chico. Lo único que la kunoichi pudo hacer al respecto fue mirarle estupefacta como si se acabase de inventar que montó un unicornio morado y se fue a recoger jamón estelar. - ¿En serio...? - Fue lo único que logró a decir la chica que no terminaba de captar la historia de ese milagro. Es decir, ¿Qué padre deja a su hijo a la sombra de un árbol durante una noche? Por mucho que sea en el centro de una aldea shinobi es un tanto chocante, ni siquiera el padre de ella había hecho tal cosa. Pero bien, lo mejor era no decir nada al respecto y dejar que la conversación se desviase a lo que él mencionó más tarde, eso del motivo del árbol para haberle salvado. - Lo más probable es que el milagro haya pasado por algún motivo particular, y también es posible que no sepamos para que nacimos hasta el momento de morir... - Decía la pelirroja que pasó a rascarse la nuca con una mueca de confusión en el rostro. Luego de unos instantes tratando de razonar alguna posible respuesta lógica a lo dicho, suspiró y bajó su mano dejándola en su posición natural a un lado de su cuerpo. - Lo que yo creo es que uno muere, no importa cómo, significa que cumplió su objetivo en este mundo y por eso no tiene nada más que hacer. - Si bien, Ritsuko estaba hablando con seriedad y además estaba dando datos acerca de su propia forma de tomarse la vida, el maquillaje de su rostro seguramente le estaría quitando algo de credibilidad, aunque no saldría de la costumbre. RE: No vayas a tropezar - Uchiha Datsue - 3/12/2015 Datsue, como había previsto, consiguió atraer la curiosidad de la kunoichi con la promesa de revelarle un secreto sobre el Árbol Sagrado. La joven no tardó en mostrar su opinión: - Lo más probable es que el milagro haya pasado por algún motivo particular, y también es posible que no sepamos para que nacimos hasta el momento de morir... “Así que cree en el destino” Pese a que estaba de acuerdo con aquellas palabras, al menos con la primera frase, le costaba tomársela en serio al mismo tiempo que le miraba a la cara, con aquel maquillaje tan estrambótico que se movía con cada gesticulación suya. De hecho, lo que le pedía el cuerpo en aquellos momentos era reír. Se mordió la lengua con disimulo y contrarrestó el súbito ataque de risa irracional que luchaba por dominarle con dolor. “¿Pero por qué me entraron de golpe tantas ganas por reírme? Venga, aguanta o la perderás para siempre. Ella puede ser la kunoichi que estaba buscando, no puedo malgastar esta oportunidad…” - Lo que yo creo es que uno muere, no importa cómo, significa que cumplió su objetivo en este mundo y por eso no tiene nada más que hacer. Datsue tardó un poco en captar aquellas palabras. No porque fuesen complicadas, sino por el remolino de pensamientos que tenía en la cabeza. Entonces alzó una ceja. —Hmm… Me estás diciendo que si ahora, por poner un ejemplo, tienes la tan mala suerte como para que un kunai mal lanzado por alguien que esté entrenando aquí cerca se desvíe hasta aquí y te corta el cuello… ¿Habrás cumplido tu objetivo en este mundo? ¿Tan pronto? —inquirió—. Y no sería tan descabellado… Quiero decir, estoy convencido de que en nuestro oficio se han visto muertes mucho más estúpidas y ridículas que esa. RE: No vayas a tropezar - Ritsuko - 23/12/2015 Por algún motivo a la pelirroja le llamaba bastante la atención que el chico se dedicase a escucharla sin interrumpirla, es más, parecía que le prestaba atención hasta cierto punto y hasta se mostraba cordial, a diferencia de unos momentos antes en que casi le salta a la yugular. De cualquier manera, le resultaba ciertamente interesante el tener una conversación medianamente seria con desconocidos, y más si tenían cambios de actitud tan notorios. Según la respuesta del chico, ella podría morir allí mismo y era cierto, tan cierto como que su corazón simplemente se parase o que algo como un bijuu le cayera en la cabeza, algo simple e inevitable sin importar lo atenta que estuviese. - Si, algo así. - Respondió con bastante tranquilidad pese al ridículo ejemplo que bueno, podría cumplirse. - Supongamos que eso pasa, un kunai me corta el cuello y muero aquí mismo. Significaría que habría cumplido mi tarea. - Explicó la kunoichi mientras miraba a cada lado por si llegaba a ver algo similar a un objeto cortante acercándose a gran velocidad o algo que pueda llegar a matarla. - Podría ser que mi objetivo en el mundo era simplemente decirte estas cosas y ya, tómalo o déjalo tú decides, pero yo cumplí con lo mío. - Agregó al rato pero esta vez mirándole a él. El último agregado ni necesitaba respuesta, era acerca de la posibilidad de que ocurriese el mencionado accidente y efectivamente, podía ocurrir o incluso algo más estúpido que eso. - Yo en tu lugar me tomaría las cosas con calma, el momento de morir te llegará como a todos al igual que el de completar tu cometido. - Comentó al rato ya que mucho más no tenía para acotar, había expresado su ideología de una forma tan resumida que seguramente le haría dudar de si iba en serio o se lo acababa de inventar. La realidad era esa, por lo menos para la pelirroja que toda su vida ha vivido sin darle importancia a los que tenga a su alrededor al igual que a los demás poco les importa lo que ella haga de su vida, mientras ambas partes se mantengan al margen la una de la otra a ella le da lo mismo todo. - ¿Me entiendes...? - Consultó ahora inclinándose levemente de la cintura para arriba a un lado, dejando sus brazos completamente relajados haciendo peso muerto al estar 'colgando'. RE: No vayas a tropezar - Uchiha Datsue - 23/12/2015 Ritsuko arrancó una sonrisa a Datsue cuando ésta miró a un lado y a otro de forma cómica por si el ejemplo del Uchiha se cumplía. Tenía que reconocer que no era tan mala chica como le había parecido en un primer momento, y hasta se le veía más cuerda de lo que aparentaba. La kunoichi siguió hablando bajo la atención de Datsue, que asintió en varias ocasiones mostrando su conformidad ante los argumentos expuestos. Sí, esta es la chica que estaba buscando. - ¿Me entiendes...? —preguntó la kunoichi, sacándole de su ensimismamiento. —Creo que lo pillo, sí —respondió sonriendo, con un leve tono irónico. Al fin y al cabo, no le parecía tan complicado de entender—. Hablando de cometidos —prosiguió, cambiando de tema—. Estoy buscando Gennins para formar un equipo ninja y solicitar una misión de rango C. Datsue necesitaba el dinero como el sediento necesita el agua en un desierto, y nada mejor que una misión de rango C para obtenerlo, pues no se podía permitir perder el tiempo con una de menor categoría. Sin embargo, y por lo que había escuchado a su padre, se necesitaba cierta experiencia para hacerlas. Experiencia que no tenía. Por eso había pensado que, formando el grupo apropiado, pudiese suplir su inexperiencia con el apoyo de un par de compañeros y convencer así al Kage de que podían asumir el riesgo. —Yo aún soy un Gennin recién ascendido —confesó—, pero formando un buen grupo de tres quizá pudiésemos aventurarnos con una… y dicen que pagan bien. ¿Qué me dices? ¿Te interesaría participar? RE: No vayas a tropezar - Ritsuko - 24/12/2015 Luego de verificar que nada le venía encima la pelirroja alcanzó a verle sonreír cosa que no terminaba de captar y por la cual simplemente ladeó la cabeza mientras mantenía una ceja en alto. ~ ¿Dije algo tonto? ~ Se preguntó mas no pronunció palabra alguna relacionada con aquella sonrisa. De cualquier manera, el chico afirmó que si, había entendido o por lo menos parcialmente cosa que le era más que suficiente, es más, tenía ganas de volverse a casa a ver si tenía comida o si le tocaba salir a buscar más por ahí pero de nuevo le dijeron algo que le llamó bastante la atención. ~ Una misión. De las complicadas. ~ Pensó Ritsuko que ahora si se mantenía con una expresión completamente serena, ya ni siquiera aquella miradita de niña inocente, estaba completamente seria mientras analizaba el asunto. La idea de ir en una misión con algo más de emoción que una de rango D le resultaba tentadora pero claro, ella también era una genin casi sin experiencia salvo la personal en cuanto a la lucha por la supervivencia. - ¿De cuántos genins estamos hablando? - Consultó la chica que aun seguía pensativa ante la oferta. Si terminaban siendo ellos dos no aceptaría, no le gustaba la idea de matarse en su primera misión y mientras más sean menos probabilidades habría de que aquello pasara. ~ Con uno más aparte de nosotros estaríamos bien creo. ~ Seguía pensando la kunoichi para hacerse medianamente una idea de lo que podría responderle. —¿Qué me dices? ¿Te interesaría participar? Consultó el Uchiha a lo que Ritsuko ya sabía como contestar. - Mínimo tres ninjas, tú, yo y alguien más. Así tendremos garantía de volver vivos. - Dijo la kunoichi que se había tomado las molestias de acercarse hasta el joven solo para tender una mano con una sonrisa algo perturbadora. - Kazama Ritsuko, un placer. - Sentenció a la espera de la respuesta, después de todo si trabajaban juntos como mínimo tendrían que saberse el nombre de sus compañeros. RE: No vayas a tropezar - Uchiha Datsue - 24/12/2015 —Mínimo tres —confirmó el Uchiha, que era de la misma idea de la kunoichi, estrechándole la mano—. Uchiha Datsue —se presentó a su vez. Presentaciones hechas, poco más quedaba por hacer, salvo buscar a un tercer integrante para el equipo. Era algo en el que Datsue emplearía su tiempo y dedicación, pero antes… Tenía que ir a Shinogi-to. Tenía que resolver aquel otro asunto. —Pues poco más queda por decir, hasta que encontremos a ese tercer compañero. Yo me voy de viaje, pero estaré de vuelta el mes que viene… —calculó el Uchiha, de manera aproximada—. Espero que para entonces ya lo hayamos encontrado. ¿Dónde podría encontrarte a mi vuelta? |