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RE: Arde - Tsukiyama Daigo - 28/02/2021
Los civiles, que definitivamente no iban a llevarle la contraria a una jōnin de su País, le hicieron caso a la kunoichi y decidieron no acercarse a los canes mientras ella revisaba el perímetro.
Sin problemas, Eri cogió a la mujer y la apartó del camino para esperar a que despertase.
—Hay una mujer desmayada que he encontrado por mi camino, voy a esperar a...
— ¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAGH!
— ¿¡Eri!?
De pronto, la mujer empezó a gritar y retorcerse de dolor, sufriendo de sobremanera en el suelo durante un par de segundos durante los que su cuerpo empezó a cambiar.
Sus colmillos se alargaron de sobremanera, sus ojos cambiaron a amarillos con las pupilas rasgadas, su piel se volvió escamosa y verdosa, y un denso velo de energía verdosa cubría todo su cuerpo, pero lo peor era que además...
Una cola completamente hecha de chakra verdoso empezó a emerger del final de su espalda.
¡Zas! Pocos segundos después, fuera de sí, la mujer se abalanzó hacia Eri para... ¿¡morderle el cuello!? (20 PV + veneno común).
RE: Arde - Uzumaki Eri - 28/02/2021
Un grito la sobresaltó de tal manera, que se vio forzada a alejarse de la víctima o... ¿Acaso era el monstruo? Volvió a ponerse en posición defensiva aunque se sentía un poco mareada aún por el gasto de chakra de la técnica anterior. «Y pensar que yo solo venía por algo tranquilo...»
Chillidos de dolor, aquello fue lo que primero vio Eri antes de que aquella mujer se comenzara a transformar en una bestia de ojos amarillos, piel de escamas verdes y un haz de energía a juego con su piel. Una cola coronó su parte trasera.
«¡Pero qué coño!»
—¡Daigo, ayuda!
Entonces, asustada por el repentino movimiento, saltó hacia atrás rápidamente mientras sacaba de nuevo su Gin evitando que la mujer llegara a donde se proponía atacarla. Luego arremetió contra ella para atizarla con el lado sin hoja de su arma (25 PV)
RE: Arde - Tsukiyama Daigo - 28/02/2021
— ¡Voy para allá. Aguarda! —Respondió Daigo, quien dejó lo que estaba haciendo para echarse a correr para socorrer a Eri.
Cuando la kunoichi esquivó y contraatacó a la mujer con su arma, esta dio un paso hacia adelante sin pensárselo y antepuso su antebrazo para bloquear el ataque, soltando un desgarrador grito de dolor como si en realidad le hubiese partido el brazo por la mitad antes de lanzar un puñetazo que se detendría a escasos centímetros del rostro de la kunoichi, enviando una potentísima onda de chakra diréctamente a su rostro si no conseguía apartarse a tiempo (35 PV).
RE: Arde - Uzumaki Eri - 2/03/2021
Cuando escuchó la voz de Daigo se relajó lo suficiente para que, tras su golpe, se viera en la tesitura de no poder contrarrestar aquel puñetazo de la humana-serpiente a la que se enfrentaba. Cerró los ojos, esperando por el impacto mientras movía las manos para sujetar fuerte su Gin cuando sintió la potente onda de chakra golpearla directamente.
«¡No!»
—¡Ngh! —exclamó cuando cayó al suelo, a unos metros del monstruo. Se ayudó de su Naginata para volver a levantarse a la par que se llevaba una mano al portaobjetos, lanzando un shuriken (8 PV/corte superficial, 12 PV/corte e impacto directo) hacia ella.
No buscaba dañarla, pero sí entretenerla. No debía dejarla escapar.
RE: Arde - Tsukiyama Daigo - 25/03/2021
La onda de chakra impactó con fuerza en la kunoichi, que salió volando unos pocos metros antes de caer al suelo completamente a merced de la mujer monstruo, que se preparó para volver a abalanzarse sobre ella con la intención de morderla, pero fue detenida por una shuriken que se clavó en su estómago.
La mujer apretó los dientes, llevándose las manos al estómago. Claramente estaba sufriendo, pero al menos había dejado de gritar de dolor, permitiéndole a Eri escuchar los rápidos y ligeros pasos de una persona acercarse con velocidad hacia ellas.
De un salto hacia atrás, la mujer esquivó una enorme Fūma Shuriken que estuvo a punto de impactarle directamente en las costillas.
— ¿A qué esperas? ¡Debemos debilitarla rápido o será demasiado tarde.
Quien hablaba era una chica más baja que Eri, que iba tapada por una larga túnica negra con capucha y las mangas tan largas que apenas se veían las puntas de los dedos de su mano derecha, mientras que la manga izquierda permanecía atada, dando entender que bajo ella no debía haber nada.
Viéndose rodeada y amenazada, la mujer retrocedió un pasos, siseando.
RE: Arde - Uzumaki Eri - 26/03/2021
Logró recomponerse gracias al shuriken que había lanzado, y pronto se vio acompañada de una mujer más baja que ella y con peores humos. «Solo intentaba no dañarla.» Protestó en su interior, pero se lo ahorró.
Se llevó la Naginata a la espalda, donde la colgó para poder dejar sus manos libres. Comenzó a cargar chakra eléctrico en su mano izquierda, la cual parecía formar una especie de Chidori que, a mitad de su creación, fue lanzado en dirección a la mujer-serpiente con la forma de numerosos senbon eléctricos (30PV).
RE: Arde - Tsukiyama Daigo - 27/05/2021
—¡Allá voy! —Anunció la chiquilla al ver a Eri preparando su técnica, antes de salir corriendo tras los senbon.
La mujer antepuso ambos brazos en cruz frente a su cuerpo en un intento por defenderse de las decenas de agujas, que en su mayoría terminaron clavándose en ellos, arrancándole un grito de dolor y rabia.
Aprovechando la oportunidad que le había brindado Eri, la recién llegada se lanzó a propinarle un golpe en la nariz con la palma de la mano, pero fue interceptada por una patada en el estómago por parte de la mujer-bestia que la dejó sin respiración y la mandó a volar de vuelta a los pies de la Uzujin.
No parecía que se fuese a recuperar pronto, lo que significaba que la kunoichi tendría que valerse por sí misma durante un rato más.
O eso parecía, hasta que a su izquierda Eri pudo ver a Daigo, brillando en verde y corriendo el doble de rápido que antes directamente hacia la escena para intentar propinarle un puñetazo a la mujer, que saltó unos pocos metros en el aire para esquivarlo, antes lanzarle una onda de chakra desde arriba con un puñetazo.
El joven kusajin evitó el ataque rondando por el suelo, quedando cerca de su compañera.
—¡Siento la tardanza, Eri-san! Espero no haberte hecho esperar mucho. —Dijo—. ¿Qué está pasando?
RE: Arde - Uzumaki Eri - 31/05/2021
Eri vio como la nueva incorporación se lanzaba tras su senbon para atacar al enemigo, la cual, tras recibir el daño de sus agujas, chilló de dolor y le propinó una patada en el estómago a la pequeña, quien voló hasta sus pies.
—¿¡Estás bien!? —Eri corrió a comprobar su estado, Naginata en mano, y al ver que no se podía mover, se interpuso entre la mujer-serpiente y el cuerpecillo de la kunoichi.
Antes de poder actuar, sin embargo, una nueva persona se unió. Daigo llegaba dejando una estela verde tras de él.
—¡Daigo! —exclamó—. Estaba ayudando a una mujer cuando, de repente, se convirtió en eso —explicó, señalando al enemigo----. Hay que noquearla cuanto antes, pero esta kunoichi ha resultado herida —ahora señaló a su espalda, donde el cuerpo de la joven estaba—. Vamos a ello.
Sujetando la Naginata doblando su brazo, Eri formuló dos sellos para, posteriormente, extender su mano izquierda hacia delante, haciendo que de él saliera un rayo zigzagueante hacia la mujer rápidamente para hincar sus colmillos eléctricos en ella. (40PV)
RE: Arde - Tsukiyama Daigo - 4/06/2021
—¿¡Noquearla!? —No lo entendía. Si esa era la mujer a la que Eri estaba socorriendo... ¿cómo había acabado así exactamente?—. De acuerdo, hagámoslo.
Daigo se puso en guardia al lado de Eri mientras ella realizaba dos sellos para lanzarle un rayo de electricidad zigzagueante a la mujer, que respondió lanzando un puñetazo al aire, que chocó con la técnica de Eri y...
Choque de técnicas
¤ Raiton: Hebi Mikazuchi: 40PV + 60 Poder = 100
Onda de chakra: 35PV + 72 Poder = 107
¤ Raiton: Hebi Mikazuchi: 40PV + 60 Poder = 100
Onda de chakra: 35PV + 72 Poder = 107
La desestabilizó, provocando que el rayo se esfumara en el aire mientras la onda de chakra continuaba avanzando, aunque muy debilitada. Sin dudarlo, el boxeador avanzó, recibiendo el ataque con su guardia por su compañera sin dejar de acercarse corriendo hacia la mujer.
Al llegar a su distancia de golpeo, el kusajin levantó su puño para cargar un fuerte puñetazo, que... detuvo en el último momento, dejando que una especie de espectro de chakra terminase el movimiento, mientras él aprovechaba la confusión de la mujer para cargar chakra.
De un momento a otro sus brazos y piernas empezaron a arder aún más, permitiéndole lanzarle un puñetazo en el abdomen a gran velocidad (8PV), antes de rodearla completamente y lanzarle otro puñetazo a la nuca(8PV).
Desequilibrada por los golpes, la mujer avanzó un par de pasos sin control en dirección a Eri. Aquello podía ser en parte peligroso, pues se estaba acercando demasiado, pero también podría tratarse de una valiosa oportunidad para propinarle un golpe del que no podría defenderse.
RE: Arde - Uzumaki Eri - 7/06/2021
Su ataque terminó por chocar con el de la mujer poseída, logrando que la de su contrincante se dirigiera hacia ella. Preparada para recibir la onda, Daigo se interpuso y recibió el daño quedando ilesa.
—¡Daigo! —exclamó mientras él se dirigía a arremeter contra la mujer-serpiente. Ella sopesó sus opciones, pensando qué poder hacer sin herirla completamente.
Dos golpes después, la mujer arremetió contra ella aquella vez, más enfurecida que antes incluso. Eri agarró fuertemente su arma, dando paso a los cuerpos para seguir con la batalla para poder aguantar un poco más su poco chakra que sentía tener. Por lo cual, corrió con la intención de darle con el extremo no cortante en plena boca del estómago (25PV).
RE: Arde - Tsukiyama Daigo - 11/06/2021
¡BAM! El golpe de Eri acertó de pleno en la mujer, que se detuvo de golpe y se dobló momentáneamente de dolor, antes de agarrar el mango de su arma y rugirle directamente en la cara a la chica.
Antes de que la serpiente pudiese contraatacar, salió volando varios metros por una patada en el costado de la cabeza por parte de Daigo, que se había lanzado con ambos pies por delante.
El chico sonrió, seguro de que mientras tuvieran la ventaja numérica serían invencibles.
Mientras tanto, la mujer empezó a levantarse poco a poco, aunque muy cambiada. La cola en su espalda ya había acabado de formarse y el chakra verdoso en su cuerpo se volvió aún más denso, asemejándose más a alguna especia de líquido en ebullición que a una capa de chakra.
Con manos y pies en el suelo, ella rugió llena de ira antes de empezar a formar una esfera negra de chakra en su boca, una tan pesada que el suelo bajo sus pies empezó a hundirse de la presión.
—Mierda... esto es malo. —Dijo la chiquilla, que poco a poco se volvía a poner de pie.
—No podemos esquivarlo. —Dijo Daigo, empezando a tener muy malos recuerdos—. Si lo hacemos el ataque irá directamente al pueblo.
—No lo digo por eso, tonto. —Replicó ella—. Si ya está así... significa que nos queda poco tiempo.
El chico tragó saliva y miró a su compañera.
—¿Crees que podamos detenerlo, Eri?
RE: Arde - Uzumaki Eri - 13/06/2021
Eri acertó el golpe, no sin recibir un grito a la cara de la mujer-serpiente, claramente adolorida y enfadada por lo sucedido. No pasó de ahí, pues Daigo le dedicó una patada en la cara que la hizo volar unos cuantos metros.
—¡Vamos!
Pero todo pareció girar a favor de la enemiga pues, a pesar de los golpes, la mujer había comenzado a cargar una gran esfera de chakra ennegrecida en su boca. «¡No!»
Recuerdos empezaban a nublar su mente cuando Daigo y la chica comenzaron a hablar entre ellos. ¿Qué opciones tenía? No le quedaba mucho chakra, lo notaba, pero no podía fallar lo siguiente, no... Si no, muchas vidas se podrían perder por su culpa.
«Rata, Buey, Perro, Perro, Palmada, Jabalí...»Formuló los sellos tan rápido como pudo, antes de apoyar las manos en el suelo para dibujar una rista de fórmulas de sellado que intentarían recorrer lo poco que le separaba de la mujer-serpiente para sellarla contra el suelo y evitar la explosión.
Tosió. Demasiado gasto de chakra.
Todo comenzaba a nublarse a su alrededor...
RE: Arde - Tsukiyama Daigo - 14/06/2021
Mientras la Uzumaki empezaba a realizar una larga secuencia de sellos y la chica se preparaba para recibir la técnica de la mujer, Daigo se empezaba a dar cuenta de que en un choque de técnicas a distancia él tenía bastante poco que aportar.
«Aún así, tengo que hacer algo. ¡No puedo dejárselo todo a ellas!»
A partir de ese momento, todo se resolvió en un instante. La Gebijūdama de la mujer fue lanzada, a la vez que Eri apoyaba las manos en el suelo y creaba unas complicadas fórmulas de sellado que se dirigían a toda velocidad hacia su objetivo, y la chiquilla realizaba tres rápidos sellos con su única mano para lanzar una enorme bola de fuego...
Katon: Gōkakyū no Jutsu: 100PV + 40 Poder = 140PV
Gebijūdama: 200PV + 80 Poder = 230PV
Gebijūdama gana con 140PV
Gebijūdama: 200PV + 80 Poder = 230PV
Gebijūdama gana con 140PV
Que fue completamente arrasada por la esfera, pero justo entonces apareció el boxeador brillando y chisporroteando una gran cantidad de electricidad que parecía estar a punto de reventar.
—¡No dejaré que hieras a nadie!
¤ Chidori Nagashi: 100PV + 40 Poder = 140PV
Gebijūdama: 140PV + 80 Poder = 220PV
Gebijūdama gana con 80PV
Gebijūdama: 140PV + 80 Poder = 220PV
Gebijūdama gana con 80PV
Lo último que vio Eri antes de quedar inconsciente fue luz, seguida de una enorme explosión.
. . .
Varios minutos más tarde, Eri se despertaría muy débil con la cabeza recostada en una bolsa de viaje marrón. De un vistazo pudo comprobar que Daigo, aunque estaba muy herido, estaba todo lo bien que podía estar, sentado cerca de una complicada fórmula de sellado que estaba en el suelo.
—Por fin despiertas. —Dijo la chica, que estaba sentada a su lado—. ¿Cómo te encuentras? Nunca me imaginé que la sellarías en el suelo...
Todavía no se había bajado la capucha, pero ahora que estaban tan cerca, Eri pudo comprobar que la chica parecía ser algo más joven que ella. Tenía la piel extremadamente el pálida, el pelo blanco y un solo ojo rojo con un sharingan de tres aspas activado.
—¿Dónde aprendiste eso? No he conseguido romper el sello de ninguna manera. —Dijo—. Tu amigo dice que tiene unas esposas. Si se las ponemos podríamos hacerla volver a la normalidad.
RE: Arde - Uzumaki Eri - 16/06/2021
La inminente llegada de la bola de energía se acercaba, pero ella tenía que continuar, tenía que terminar su sellado, tenía que hacer eso en lo que destacaba. Plantó sus manos, la joven se lanzó en su ayuda, Daigo fue después.
Y lo último que vio fue luz, una luz antes de caer inconsciente.
• • •
—Por fin despiertas. —Eri abrió los ojos con una lentitud ajena a ella. Enfocó lo suficiente para discernir el rostro de la chica—. ¿Cómo te encuentras? Nunca me imaginé que la sellarías en el suelo...
—Me duele la cabeza —murmuró en un gruñido, luego se giró para comprobar si realmente Daigo estaba bien, y la mujer-serpiente estaba sellada de verdad—. Menos mal...
—¿Dónde aprendiste eso? No he conseguido romper el sello de ninguna manera. —Dijo—. Tu amigo dice que tiene unas esposas. Si se las ponemos podríamos hacerla volver a la normalidad.
—Digamos que las técnicas de sellado son mi especialidad —explicó de forma escueta. Tampoco quería revelarle los secretos Uzumaki a una chica que acababa de conocer—. Antes de hacer el contrasellado, necesito reponer un poco mi chakra, si no os importa —pidió, sabiendo que estaba todavía baja—. Luego podemos quitar el sello y ponerla las esposas.
Se llevó una mano a la cara y la restregó, intentando serenarse un poco.
—¿Y tú quién eres? —preguntó sin tapujos a la recién-no tan recién llegada, puesto que por fin que la veía de cerca, ahora podía interesarse por ella: más joven que la Uzumaki, con el cabello claro y un sharingan. Sin duda era, cuanto menos, pintoresca.
RE: Arde - Tsukiyama Daigo - 16/06/2021
—Nadie importante. —Respondió—. Me llamo Lei ¿y vosotros?
Daigo, que había estado escuchando la conversación a unos metros de distancia, se levantó y se acercó caminando a las chicas.
—Yo soy Tsukiyama Daigo, de Kusagakure. —Dijo, antes de girarse a Eri y sonreír, aunque estaba hecho polvo—. Qué gusto ver que estás bien.
Después de que el chico se sentase y Eri respondiese —o no—, Lei continuó hablando.
—Sé quien hizo esto y había venido a comprobar qué tramaba... aunque supongo que ya se habrá ido. —Se encogió de hombros, haciendo como si no le importara mucho, aunque podía ver fácilmente lo frustrada que estaba en realidad—. Es un alivio que hayáis estado aquí. No sé lo que habría pasado de lo contrario.