Alguien para molestar - Versión para impresión +- NinjaWorld (https://ninjaworld.es) +-- Foro: Inicio (https://ninjaworld.es/foro-inicio) +--- Foro: Tramas antiguas (https://ninjaworld.es/foro-tramas-antiguas) +--- Tema: Alguien para molestar (/tema-alguien-para-molestar) |
Alguien para molestar - Ritsuko - 7/06/2015 - ¿Tamaki...? - Preguntó la pelirroja apenas asomándose por un callejón bastante oscuro. Tal parece que la peliceleste la estubo acompañando durante buen tramo pero en algún momento las gemelas terminaron por separarse, cosa que no le preocupaba en lo más mínimo a Tatsuko puesto que este era un problema de lo más normal en esos viajes que emprendían. Con o sin su hermana, la pelirroja seguiría su vida normal, es decir, deambularía por las calles de aquella ciudad en la que se encontraba sin rumbo fijo, mirando de un lado a otro, molestando personas escogidas de forma completamente aleatoria, y de encontrarse con algún animal, jugaría con este a menos que sea alguna bestia salvaje, dicho caso simplemente 'jugaría' con este corriendo hasta que uno de los dos se canse. "No... Ese viejo da penita..." Pensaba la joven kunoichi mientras veía a un anciano encorvado y caminando muy lentamente por la calle con la ayuda de un bastonsito de madera que parecía que fuese a ceder en cualquier momento. Puesto que el ancianito no fue escogido por la kunoichi, la búsqueda por alguien a quien molestar se reanudaría, alguien más joven que no tenga tantos inconvenientes con el asunto de la lluvia como la gran mayoría de las personas que caminaban por aquellas calles. "¿Quién podrá ser...?" Preguntó en su cabeza la chica mientras seguía caminando ignorando el agua que no paraba de caerle encima. Tatsuko pasó mucho tiempo dando vueltas por aquella ciudad en busca de alguien que parezca 'digno' de su atención, pero sin éxito alguno. Nadie interesante, nadie llamativo, encima eran todos muy parecidos entre si, cosa que hacía que la kunoichi se pensara dos veces el hacer acto de presencia. Casi resignada, Tatsuko no tuvo mejor idea que subirse al techo de lo que parecía ser una taberna, allí arriba se sentó mirando gente entrar y salir a la espera de alguien interesante, alguien que se vería obligado a soportarla durante quién sabe cuanto tiempo. Considerando que la luna ya había salido y que la taberna estaba bastante bien iluminada, ella podía ver con lujo de detalle las personas que entraban y salían, no así aquellos que la veían desde la calle pues la luna estaba ubicada por detrás de la joven, mostrándola como una simple silueta negra. - Lindo lugar para que Tamaki haga algo... - Susurró para si misma mientras se abrazaba a sus piernas. RE: Alguien para molestar - Sasaki Reiji - 22/06/2015 Aprovechando que mis padres habían decidido largarse a saber donde y que no iban a volver en un tiempo, decidí aprovechar para viajar yo también. Tenia la necesidad de ver mundo mas allá de la aldea de la lluvia. Tampoco me fui muy lejos, vaya, solo me acerque a la ciudad de Shinogi-to. Vale que no tenia muy buena fama, y se decía que estaba llena de mafiosos y delincuentes, y que el señor feudal de las tormentas era quien manejaba todo. Pero para alguien como yo, era bastante sencillo pasar desapercibido por las calles de la ciudad. Podía transformarme en gato, en perro, incluso en rata. De hecho, la mejor opción hubiese sido transformarme en rata y enseñarle ninjutsu a un grupo de tortugas, sin embargo preferí usar la forma de un gato. Aunque evidentemente había llegado a la ciudad volando. Era la forma mas rápida, cómoda y divertida de viajar. Básicamente la ciudad era un lugar un tanto oscuro y amenazante en cada una de sus calles, y no solo por la constante lluvia que no dejaba ver el sol. En general las casas y edifico del lugar mantenían una especia de aspecto medieval, ya que estaba todo construido con piedra, sin embargo había luces de neon y otros tipos de tecnología a la vista, haciendo el contraste. Y pese a todo, las calles de la ciudad estaban a rebosar. Llegada la tarde noche ya me había recorrido casi toda la ciudad, o al menos no mostraba interés por nada mas, el sitio en si era bastante aburrido. Tenia que encontrar algún gennin de amegakure como yo o algunos chavales de mi edad de por allí para asustarlos, o al menos para molestarlos. Era eso o largarme del lugar, por que mi interés por la ciudad en si había disminuido por debajo de cero. Subí al tejado de una de las casas de por allí. Las alturas era y sera siempre el mejor lugar para encontrar algo que se busca, la posibilidad de volar me lo había mostrado una cuantas veces. Pero en aquella ciudad, un gato negro paseando por los tejados no llamaba tanto la atención. O al menos eso creía yo. De cualquier modo, no tarde demasiado en localizar a mi victima. Sentada sobre el tejado de un edificio, observando a las personas que pasaban por la calle, había una muchacha que tendría mas o menos mi edad de cabellos rojos y largos, con la piel pálida como la luna y que vestía con ropas negras. Me acerque a ella como un gato callejero, con el pelo tan empapadisimo, pero en vez de maullar como lo haria un gato... —Oye, tu eres ninja no? tienes pinta de ser ninja, pero si no lo eres te puedo enseñar ninjutsu, sabes, soy un gato un ninja, de la familia de los gatos ninjas, si eres ninja, podemos firmar un pacto RE: Alguien para molestar - Ritsuko - 2/07/2015 Pasaba todo tipo de persona por aquel lugar, iban y venían, algunos salían unos minutos a tomar un poco de aire relativamente fresco y volver luego dentro a seguir bebiendo posiblemente. "Ninguno parece divertido..." Pensaba la kunoichi tratando de imaginar posibles bromas que pudiera llegar a jugarle a alguno de los que habían pasado. Al estar tanto tiempo sin moverse demasiado, Tatsuko empezaba a aburrirse y de paso a dormirse, además que empezaba a sentir algo de frío estando bajo la lluvia y sin abrigo alguno por lo que no duraría demasiado tiempo más en aquel techo, por lo menos no sola. Justo cuando la chica se había cansado de esperar y se dispuso a retirarse, escuchó una voz bastante clara que al instante dedujo que le estaba hablando a ella, pero al momento de voltearse en la dirección de la que provenía la misteriosa voz no pudo ver a ninguna persona, solo a un gato empapado y de pelaje negro al cual la pelirroja miró fijamente en silencio por unos instantes. "¿Me habló el gato...?" Pensaba ella sin terminar de entender lo que acababa de pasar. - ¿Fuiste tú señor gato...? - Preguntó ladeando la cabeza aun perdida. - Gato... ¿Gato...? - Seguía observando al animal que tenía ahora en frente, de a poco el ceño de la chica empezó a fruncirse y su cabeza se fue ladeando al lado contrario al que la había inclinado previamente, hasta que finalmente recordó lo que los gatos le traían. - ¡GATO! - Llegó a chillar Tatsuko antes de dar un salto hacia atrás completamente horrorizada de recordar lo que el pelo de esos animales le producía. - No no no, no te me acerques... Pórtate bien y quédate ahí. ¿Si? Eres un animalito lindo y me entiendes así que me harás caso ¿verdad? Dime que si... No te me acerques... - Ahora mismo Tatsuko estaba hablando con un tonito nervioso. Además de la cara y el tono, la chica había empezado a hablar bastante rápido, aún no llegaba a lo inentendible pero era lo suficientemente rápido como para no dar tiempo a responder, por lo menos hasta que se callase por completo. |