Un encuentro explosivo - Versión para impresión +- NinjaWorld (https://ninjaworld.es) +-- Foro: País de la Tormenta (https://ninjaworld.es/foro-pais-de-la-tormenta) +--- Foro: Valle del Fin (https://ninjaworld.es/foro-valle-del-fin) +--- Tema: Un encuentro explosivo (/tema-un-encuentro-explosivo) |
Un encuentro explosivo - Sasagani Yota - 6/07/2021 Era uno de aquellos días como pocos durante el invierno en el País del Bosque. Un día de eprros como se suele decir o quizás deberíamos decir de no perros puesto que salir era exponerte al frío y a la nieve, la cual no era muy habitual por la zona, pero había dejado un manto a lo largo y ancho del país. Pero en días como aquel me gustaba salir, irme unos días para relajarme, pensar y meditar. Quizás también para reencontrarme conmigo mismo y desconectar de la vida del shinobi que tanto me embriagaba. Mis pasos me llevaron hasta uno de esos escenarios tan místicos de todo Ōnindo y en fechas como aquella cobraban todavía más ese componente místico. Nada más y nada menos que el valle del fin. Alcé la vista para ver la estatua que daba forma al primero de todos los Morikages. Los pensamientos nublaban mi mente mientras los copos inundaban mis orbes oculares. De alguna forma la imagen de Juro, con su particular inocencia y un aspecto risueño golpeaban mi mente. Sacudí la cabeza y aparte las manos de aquella túnica de viaje que usaba en aquellos días para protegerme del frío y escalé la estatua hasta la cabeza. Una vez allí posé mi culo sobre la piedra y crucé mis piernas manteniendo la mirada perdida en el horizonte. «Ah... bendita tranquilidad» RE: Un encuentro explosivo - Uchiha Datsue - 6/07/2021 —Menudo día de mierda —farfulló Datsue, probablemente por décima vez en aquella tarde. Volvía de una misión en un poblado cercano a las cordilleras del Valle de los Dojos. Uno de esos encargos de ninja de toda la vida. Espionaje, recopilación de pruebas, infiltración… Toda una historia para contar en una novela. Había sido jodida de realizar, desde luego, y se había visto en más de un aprieto. Resultaba que el solicitante de la misión sospechaba que su mujer le estaba poniendo los cuernos con el vecino. Y claro, quería salir de dudas. «Salir salió, de eso no cabe duda». Se detuvo un momento, apoyado en un árbol, para contemplar desde lo lejos las colosales estatuas del Valle del Fin. No le traían muy buenos recuerdos, precisamente. Ahora que se fijaba, ¿había alguien subido en la cabeza de una de las estatua? Escudriñó con la mirada, pero estaba demasiado lejos como para estar seguro. —Bah —dijo, sin darle importancia. Se dio media vuelta y se marchó en dirección a Uzushiogakure. Porque así es la vida: llena de casualidades, sí, pero también de encuentros que pudieron ser y no fueron. Quizá esta no sea una historia digna de contar. Dos protagonistas de este mundo que pasan cerca el uno del otro pero no se ven. Sin más intriga ni más miga que esa. Pero así es la vida, también: llena de decepciones. RE: Un encuentro explosivo - Sama-sama - 6/07/2021 Ah, bendita tranquilidad, pensaba Yota. El aire fresco soplaba en el Valle con la suavidad de una madre haciendo arrumacos a su bebé recién nacido, trayendo con él la fragancia de la hierba, de las gigantescas setas que había a su espalda y de la humedad. El río discurría con tranquilidad hasta caer abruptamente en la cascada que las otras dos estatuas custodiaban, y pequeñas gotitas empezaron a caer del cielo, no lo suficientemente grandes como para considerarlo lluvia. Desde luego, si se lo preguntaban a un amejin diría que como mucho chispeaba. Ah, bendita tranquilidad, debió seguir pensando Yota, cuando creyó ver a alguien junto al bosque marcharse por donde había venido en lugar de interrumpirle el momento. La piedra sobre la que reposaba estaba dura de cojones, eso tenía que admitirlo. Pero después de pasarse los días sentado intentando aprender el Modo Sabio, debía tener el culo más que curtido. Ah, ¡bendita tranquilidad! Tanta que cuando vio a alguien cayendo del cielo, debió pensarse que era un ángel que venía a observar. ¿O quizá una ensoñación? ¿Se habría quedado dormido de tan relajado que estaba? Ahora que se fijaba, ese tío —porque era un tío—, había saltado de las mismísimas nubes. Debía estar atado con un hilo a algo, porque su descenso había sido jodidamente lento hasta los metros finales. Cuando aterrizó, vio en su rostro una sonrisa, como si se estuviese cachondeando de haberle interrumpido el momento zen. Yota sabía quien era. Oh, sí, había visto su rostro en innumerables ocasiones. Sabía cada color de sus malditos ojos. Sabía su apellido. Sabía su jodido nombre. Era… RE: Un encuentro explosivo - Uchiha Zaide - 6/07/2021 Al aterrizar abrió los ojos: uno de ellos, de un carmesí intenso; el otro, gris y apagado. Su ojo sano fue a parar en la bandana metálica que portaba el muchacho, luego, en su rostro. Se le escapó una media sonrisa antes de decir, de manera tan anodina como la charla en uno de esos ascensores modernos que había en el País de la Tormenta: —Se ha quedado buen día, ¿huh? RE: Un encuentro explosivo - Sasagani Yota - 8/07/2021 Aquello debió de tratarse de la calma que anunciaba a los cuatro vientos toda una tormenta, pero una de esas con aparato eléctrico de aquellas realmente violentas. Pero yo no tenía ni puñetera idea, claro. En primera instancia por allí hizo su acto de presencia alguien a quien conocía bien su rostro. Sin embargo lo hacía de paso, se cruzó el valle y se fue, seguramente de camino a su tierra natal. Se trataba de Uchiha Datsue y, por un momento quise pararle para decirle algo, pero tuve que detenerme, por el bien de mi misión. Más tarde algo cayó del mismísimo cielo en dirección a la cabeza de la estatua en la que tenía clavado mi trasero. Aquello captó toda mi atención. «Qué cojones...» Mis manos se juntaron formando una cruz que dejarían un Kage Bunshin en la cabeza de otra de las estatuas, creo que era la del Uzukage, siguiendo con la meditación, solo que esta vez lo haría para recolectar todo el chakra natural que fuese posible. En cuanto el tipo me vio le devolví la mirada mientras me reincorporaba. —Se ha quedado buen día, ¿huh? Me tomé mi tiempo para responder, inspeccionando un poco más al tipo. — Oh, ya lo creo. Nada como un buen dia de fresquito invernal No le faltaba razón a la dichosa araña que había estado posada sobre mi cabeza en todo momento. — ¿De qué me suena tu cara? Es como si ya te conociera, pero... no caiga de qué podría conocerte RE: Un encuentro explosivo - Uchiha Zaide - 8/07/2021 Uchiha Zaide sujetó con las manos la solapa de su chaleco y dejó los codos colgando. Tenía la cabeza rapada a cuchilla, la barba espesa y desaliñada y cara de no haber dormido muy bien. En su cuello lucía su característico tatuaje de una bandana ninja rasgada de lado a lado, pero sin símbolo alguno. En la cintura, una atada a cada costado, poseía dos hachas viejas con el acero algo abollado. Su filo brillaba afilado, no obstante. —Para no conocerme, no has tardado en ponerte a la defensiva, ¿huh? —dijo, desviando la mirada brevemente hacia el clon que se había ido corriendo a la otra estatua. ¿Qué coño estaba haciendo?—. No voy a decirte mi nombre, porque ya lo sabes. Quizá ahora mismo no lo recuerdes, o quizá es que no te atreves a recordarlo —conjeturó—, pero lo has leído innumerables veces. En cada taberna, en cada posada, en cada calle. Junto a mi cara. Avisad a las autoridades de Kusagakure si disponéis información de su paradero, pone en líneas rojas. Alzó los brazos en perpendicular a su cuerpo. —¿Me buscabais? —bajó los brazos—. Pues aquí estoy. —Sus manos acariciaron la base del mango de sus hachas—. ¿Y ahora qué? RE: Un encuentro explosivo - Sasagani Yota - 9/07/2021 —Para no conocerme, no has tardado en ponerte a la defensiva, ¿huh?[ Sonreí. Tenía razón el tipo. Se le notaba que estaba curtido en esto de los ninjas y que atesoraba una gran experiencia en combate y fuera de él, solo había que ver su aspecto carcomido por el mero paso del tiempo. Pero... — Toda precaución es poca en estos tiempos de locos, ¿no crees? —. No voy a decirte mi nombre, porque ya lo sabes. Quizá ahora mismo no lo recuerdes, o quizá es que no te atreves a recordarlo —conjeturó—, pero lo has leído innumerables veces. En cada taberna, en cada posada, en cada calle. Junto a mi cara. Avisad a las autoridades de Kusagakure si disponéis información de su paradero, pone en líneas rojas. — Ahora que lo dices... Levanté mi mano con el dedo índice estirado, justo delante de Kumopansa para evitar que abriese el pico más de la cuenta. — Sí... ¿de qué me suena? me resultas jodidamente familiar, pero sigo sin caer... podrías ayudarme un poquito. No obstante... me parece que has sido tu el que nos has encontrado a nosotros y no al revés, porque yo no he estado buscandote, ¿qué buscas tu? Psicología inversa, aunque no descartaba que el tiro me saliese por la culata. Aunque... para eso es para lo que había creado el clon, por si las cosas se ponían feas. «Vamos, dime qué coño estás buscando por estas tierras» Turnos recolectando chakra natural: 2 turnos RE: Un encuentro explosivo - Uchiha Zaide - 9/07/2021 ¿Tanto se estaba desmejorando, que hasta un chaval que hacía dos veranos todavía mamaba de la teta de su madre le vacilaba? Eso, o el crío era un inconsciente. O quizá sí tenía motivos que le permitiesen adoptar esa postura. Quizá, el que estaba en apuros era el propio Zaide, y él todavía no se había dado cuenta. «Ese clon… Está en una pose parecida a cuando Ryū…» —¿Qué busco yo, huh? Hace tiempo, hubiese respondido que erradicar el mayor cáncer que asolaba a Ōnindo. Después de la particular quimioterapia que había practicado en el Torneo de los Dojos, sin embargo, ya no tenía tantos aires de grandeza. Ahora sus necesidades eran más aburridas. Más… terrenales. —Pronto lo descubrirás. Por el momento… Por el momento, y como no todos los días un Uchiha tenía la suerte de que le mirasen a los ojos, le introdujo en un Genjutsu. En un abrir y cerrar de ojos, el kusajin se sentiría paralizado, incapaz de mover uno solo de sus músculos. Zaide ni siquiera esperó a que la araña se diese cuenta del ardid. Un segundo después se encontraba abriendo un pergamino pequeño que llevaba en el portaobjetos. Al segundo después, una llamarada fue vomitada desde la superficie del papel que engulló al kusajin y, si esta no se apartaba a tiempo, a la propia araña. RE: Un encuentro explosivo - Tsukiyama Daigo - 10/07/2021 —Ah, qué buen día que hace. —Se dijo el chico, simplemente estimándose con calma. La verdad es que de buen día tenía más bien poco. Hacía mucho frío y nevaba, pero cuando llevas un tiempo en la cama de un hospital sin poder levantarte, cualquier clima es un buen clima. El muchacho simplemente estaba de paso en un viaje que poco importaba para esta ocasión. En una pequeña parada que tampoco debería importar demasiado. Un día tranquilo, sí. Un buen día. Hasta que de pronto, desde la parte baja del valle del fin, pudo ver una enorme bola de fuego siendo lanzada en la cabeza del primer Morikage. «Quizás se trate de un ninja entrenando» Pensó, pero algo le decía que no era tan simple como eso. No. No podía serlo, así que corrió para comprobarlo. RE: Un encuentro explosivo - Sasagani Yota - 13/07/2021 —¿Qué busco yo, huh? El muy desgraciado no se daba por satisfecho y seguía haciéndose el interesante. Estaba empezando a dudar... «¿Y si él también está esperando como lo estoy haciendo yo para atacar?» Daba igual. Nada podía superar al Sennin Mōdo. Se trataba de un estado temporal que me fortalecía en todos los aspectos e iba a ser capaz de vencer incluso a un Uchiha como él. Estaba convencido. Además, tenía a Kumopansa de mi lado. —Pronto lo descubrirás. Por el momento… Algo había salido mal, o mejor dicho, algo había salido bien para los intereses del tipo. Kumopansa se dio cuenta y decidió tomar cartas en el asunto, saltando hasta agarrarse a la pata del tipo mientras a mí me engullía una bola de fuego de un tamaño y un poder descomunal que me enviaría de regreso a la zona del agua. Kumopansa, sin embargo, había aprovechado que el tipo se había centrado completamente en mí para hincar sus quelíceros en la piel del Uchiha para inocular un generosa dosis de su veneno. TRas ello saltaría al vacío para reunirse de nuevo conmigo. — Mierda, ¿qué ha pasado? ¿estás bien? — Joder, yo qué sé, por si acaso evitemos cruzar miradas con ese cabrón. Por suerte, el clon sigue ahí — decía mientras miraba al tipo desde abajo — Pero hay que ir a proteger al clon, aún no tiene chakra suficiente... — ¡Eh, tú! ¿por qué no vienes a echarte un chapuzón? «Joder, no era lo que había pensado, pero bueno» Turnos recolectando chakra natural: 3 turnos Estado de Yotita
• PV: 120/220 -100 –• CK: 250/250 • PV Kumopansa: 60/60 • CK Kumopansa: 44/80 -36 –Daño recibido RE: Un encuentro explosivo - Uchiha Zaide - 14/07/2021 Sintió la picadura de una avispa acariciándole la pierna. Su ojo sano comprobó que se trataba de una araña, y trató de atizarle con una patada. Ella fue más rápida y saltó al vacío, acompañando a su invocador, que se había desplomado de lo alto de la estatua empujado por la esfera ígnea. Quiso seguirla, pero a mitad de camino se sintió extrañamente mareado. Un calor abrasivo le subía desde la pierna hasta la rodilla. Ahora a la cintura. Luego… —Veneno, ¿huh? Uchiha Zaide sabía lo que era ser envenenado. Uno de sus viejos camaradas, Katame, casi lo había matado con aquella sucia táctica. Apartó a aquel hijoputa de su mente —tenía importantes cosas de las que ocuparse, y debía centrarse—, y extrajo un frasquito de cristal de su portaobjetos. Se lo bebió más rápido que un chupito a medianoche. —¡Puaj! No sé qué sabe peor —se quejó, mientras se dejaba caer de la cabeza del Morikage. Cayó de cabeza durante un buen tramo, hasta que dio una voltereta en el aire y la planta de sus pies se afianzaron sobre la piedra para recorrer el resto corriendo. Al final, se propulsó de un salto y aterrizó frente al chico, a cinco metros de distancia—. ¿Estás seguro sobre el clon, chico? —le había leído los labios—. Y luego dicen que estoy medio ciego. Soltó una carcajada agria. Aquel chico era un novato, eso empezaba a tenerlo claro. Por mucho que llevase una placa de plata al hombro, desconocía los peligros de mirar a un Uchiha a los ojos, ni debía estar acostumbrado a recibir hostias mientras tenía un Kage Bunshin rondando. Hizo un rápido vistazo al campo de batalla: tenía la estatua a su derecha; diez metros separaban al chico de la tierra; unos treinta a él del terreno a su espalda; a su izquierda, las otras dos estatuas custodiando la cascada. ¿Sabría aquel chico usar el Suiton? De ser el caso, aquello le daba un punto de ventaja. —Voy a hacerte una oferta, chico. Una que caducará nada más que abras la boca. Así que piensa bien cuál va a ser tu primera palabra. —Sus manos reposaban sobre los mangos de sus hachas. Su ojo sano, clavado en él y su molesta criatura—. Ríndete ante mí, y los dos veréis la luz del alba. Lucha… »… y la araña sufrirá las consecuencias. RE: Un encuentro explosivo - Tsukiyama Daigo - 15/07/2021 «Ese que está cayendo es...» Yota, sí. «Ay, no». El chico se apresuró en acercarse a la escena, pero para cuando llegó no solo Yota ya había caído, sino que el agresor ya había saltado tras él. El chico no se lo pensó dos veces. De hecho, no se lo pensó ni una sola vez. Simplemente corrió y se lanzó al vacío en un salto de fé. Mientras caía, Daigo no tuvo demasiado tiempo de evaluar la situación y solo podía desear que a ninguno se les ocurriese mirar hacia arriba. «¿Y ese es Uchiha Zaide?» Tenía algo de miedo, sí, y estaba seguro de que sería imprudente pelear contra él, pero tenía a un compañero en peligro y, para qué mentir, tenía ganas de hacerle pagar lo que hizo. Además ya estaba cayendo. Tomó sus esposas con la zurda y, en plena caída, la lanzó con fuerza extrema directamente hacia la cabeza del Uchiha, dejando una esta de chakra tras suyo (20 PV, ¤ Kabutomushi) RE: Un encuentro explosivo - Sasagani Yota - 15/07/2021 El veneno de Kumopansa había empezado a surtir efecto. Se notaba que la zona en la que había mordido actuaba algo diferente, empezaba a notar aquel característico ardor que solían sentir las víctimas de la joven pero experta Kumopansa. Todo iba a pedir de boca hasta que sacó un frasco y se lo bebió de un trago mientras se quejaba de su sabor putrefacto. — Mierda, tenía un puto antidoto... — murmullé por lo bajo. Acto seguido saltó hasta el agua tal y como yo había hecho instantes antes. Bueno, no exactamente, a mi me obligó aquella gran esfera ígnea. Antes siquiera de que abriese la boca una cosa la tenía clara, no había que mirale a los ojos, si lo conseguía tendría mis oportunidades. O quizás solo tendría una de oportunidad, aquella ofensiva inicial había dejado mella en mi cuerpo. Pero eso no era impedimento para que mi mano zurda se introdujese en mi portaobjetos. —Voy a hacerte una oferta, chico. Una que caducará nada más que abras la boca. Así que piensa bien cuál va a ser tu primera palabra. Sonreí, y entonces al abrir mi mano desvelé el cascabel que rápidamente anudé a mi dedo índice. --. Ríndete ante mí, y los dos veréis la luz del alba. Lucha… »… y la araña sufrirá las consecuencias. Ahí fue donde las cosas tomaron un rumbo todavía más personal. Podía ser capaz de contenerme si me insultaba a mí, incluso soportaria humillaciones, pero la araña... Eso sí que no. aunque puede que ese fuese precisamente el efecto que buscaba. No obstante iba a luchar con todo además... Empecé a visualizar aquel proyectil que dejaba tras de si un reguero de chakra y que si nada lo impedía impactaría de lleno en el melón de aquel desgraciado. — Que te jodan, mamonazo Moví mi dedo índice y el tintineo del cascabel inundaría todo a su alrededor provocando unos efectos para nada habituales en un simple e inofensivo cascabel. — Yo no lo habría dicho mejor Un nuevo tintineo para formar un sello de manos poco común y que se asemeja al que se utiliza para los jutsus de clonación. — Ninpō: Sasagani no Hōyo — la trenza empezó a ganar longitud y tamaño. Estado de Yotita
• PV: 120/220 • CK: 222/250 -12 – -16 – Regeneración impedida –• PV Kumopansa: 60/60 • CK Kumopansa: 64/80 +20 –Daño recibido RE: Un encuentro explosivo - Uchiha Zaide - 15/07/2021 «¿Un cascabel? Como Kintsugi cuando…» Se interrumpió de pronto. Algo no iba bien. Su sharingan seguía la mirada del kusajin, y esta, en vez de mantenerse en sus pies, se dirigía por encima de él. Siguió su rastro justo para ver a un segundo crío cayendo en picado y lanzándole unas… … ¿esposas? No importaba. Un simple paso atrás bastaría para… …………........................«¡Ding!» Fue como si alguien le hubiese taladrado un tímpano. Sintió un pequeño mareo y que las piernas le fallaban. Cuando se quiso dar cuenta, el acero de las esposas colisionó contra su frente, abriéndole una brecha. …………………………………...........................................................................................«¡Ding!» Oyó de nuevo el sonido, pero no le volvió a afectar de la misma forma. El dolor era una herramienta ninja muy útil, bien usada. Despejaba la mente y reducía todas las minucias por las que normalmente uno se preocupa a meros mosquitos zumbando. Su ojo sano miraba al chico que caía sobre él. ¿Qué cara tendría Zaide ahora mismo? Hilos de sangre caían por sus cejas, alrededor de sus ojos, por su nariz y una de sus mejillas. Apostaba a que tenía la expresión de un sádico hijoputa. Siempre se le había dado bien asustar a la gente. El nuevo ninja caía hacia el agua; y él era el tiburón que aguardaba con ansia. Pero se apartó en el último momento. Un paso adelante, y no hacia atrás como tenía pensado. Su cuerpo se ladeó para no tener a ningún ninja a su espalda. El otro kusajin había hecho crecer su pelo; Zaide formó un sello. Solo uno. Su diestra entonces voló hacia el peliverde, como si quisiese darle una palmada. Al mismo tiempo, un torbellino silencioso surgía tras el rubio y taladraba su espalda con la misma violencia que el jodido sonido de sus cascabeles. Pero volvamos a lo de la palmada. Zaide había dado una palmada hacia el peliverde, sí. Esa palmada se encontró con la mano del chico. No la golpeó con violencia. En su lugar, la movió de tal forma que el chico se vio obligado a amoldarse a la figura del mono. Si se disponen de más de 40 puntos en Destreza que un adversario, un personaje puede utilizar una de sus manos para completar una serie de sellos en contra de su voluntad. (Destreza 80 vs 40)
Sí, Uchiha Zaide estaba formando sellos con la ayuda de su propio enemigo. Se echó hacia un lado y dejó que el torbellino de agua empujase al rubio contra el peliverde. Su ojo sano se cercioró de que así había sido, dando cuenta también de la araña, antes de enviar un rayo a través de sus dedo índice y corazón que zigzagueó en el torbellino, alimentándose del agua, y que descargó su furia contra el chico de cabellos esmeralda. Dio otros dos saltos rápidos hacia atrás, asegurándose de quedar a al menos cinco metros de distancia de los tres, y cogió aire. «Fiuuuuu... ¡Eso ha sido bonito!» —Creo que empiezo a entrar en calor. ¿Vosotros? RE: Un encuentro explosivo - Sasagani Yota - 16/07/2021 ¿Cuanto se podían llegar a complicar las cosas? Solo Rikudō lo sabía con exactitud y pronto seríamos participes de aquel particular capricho el par de kusajin que tratábamos de enfrentar una amenaza mundial. Todo Ōnindo estaba empapelado con su rostro y el clásico cartel de 'se busca'. Por alguna razón pensábamos que podíamos con él, aunque la realidad es que en el valle del Fin poca huida había. Aquel clonc fue el agente del cambio. El que nos había dejado sin opciones. Aquellas esposas, el as en la manga de Daigo era ahora nuestra condena, pues era el único genjutsu que iba a surtir efecto contra ese cabronazo. El mangod e la sartén lo manejaba Uchiha Zaide y él lo sabía. Arrojé el cascabel al agua mientras chasqueaba la lengua y veía como un simple movimiento bastó para que el peliverde no le saltase encima y entonces un sello. El del tigre para ser precisos y algo me golpeó la espalda con la fuerza de un ciclón encabronado. — Aaaaaaargh Joder, fue un solo momento pero dolió como mil demonios. Kumopansa había salido volando por los aires y ahora se posaba encima del agua. Terreno que había podido entender que era peligroso. «¿No se supone que los Uchiha dominan el Katon?» Estaba inmerso en mis pensamientos y le vi, dando saltitos hacia atrás mientras soltaba la tipica frase grandilocuente en la que tuvo que hacerse el macho alfa. Lo que realmente me jodía es que se lo podía permitir. Tragaba aire en bocanadas, tratando de recuperar el aliento. — ¿Qué cojones buscas? ¿Qué quieres? Hice una señal con la mano a Daigo mientras le miraba de reojo para que no atacase y se mantuviese atrás. Estado de Yotita
• PV: 30/220 -90 –• CK: 222/250 Sasagani no Hoyo activado –• PV Kumopansa: 60/60 • CK Kumopansa: 80/80 +20 –Daño recibido |