![]() |
Una entrega especial - Versión para impresión +- NinjaWorld (https://ninjaworld.es) +-- Foro: Base de datos del rol (https://ninjaworld.es/foro-base-de-datos-del-rol) +--- Foro: Historia, acontecimientos y ambientación (https://ninjaworld.es/foro-historia-acontecimientos-y-ambientacion) +---- Foro: Tramas pre-reset 2017 (https://ninjaworld.es/foro-tramas-pre-reset-2017) +---- Tema: Una entrega especial (/tema-una-entrega-especial) Páginas:
1
2
|
Una entrega especial - Sasaki Reiji - 21/10/2015 Refunfuñar ya no servia de nada, Reiji había sido enviado por su madre al pueblo de Yachi a realizar una entrega especial y su madre no se le podia decir que no. A veces su madre vendía sus joyas a otras joyerías de fuera de la aldea, pues al estar oculta para el resto del mundo en general solo sus habitantes podían comprar en la joyería. Por ello era necesario comerciar con el mundo exterior y enviar sus creaciones a pueblos que se encontraban por los alrededores de la villa o incluso en otros país Normalmente se enviaban en caravanas comerciales, pero cuando se trataba de productos muy caros o especiales, la madre de Reiji contrataba los servicios de un Shinobi. Pero aquel día, el hombre que se encargaba de hacer esas entregas se había puesto enfermo, y a ella le costaba confiar en las personas. Así que como el padre de Reiji se encontraba en una misión, le habían encasquetado a él ese trabajo. Y una cosa era ayudar en la joyería pero otra bien distinta viajar unos cuantos kilómetros de distancia. Tenia que transportar una pequeña bolsa que contenía unos cuantos diamantes. Era un mineral bastante raro, popular y caro. Claro que no para la madre de Reiji, que era capaz de fabricarlos gracias a su herencia genética. Era difícil de entender por que querían comerciar con diamantes en un pueblo en el que se dedicaban a cultivar calabazas. Aunque era cierto que su gran cañón era popular turisticamente, pero aquellas diminutas joyas no se verían desde lo alto del cañón. Hasta el momento había viajado sin ningun inconveniente, ni un solo bandido ni ladrón, ni un solo conflicto ni molestia. No solo había sido un viaje tranquilo, sino que ademas había sido aburridisimo para él. Por suerte, le quedaban a penas treinta minutos para alcanzar el pueblo si continuaba andando a paso ligero y nadie le interrumpía. –Ya casi estamos, por fin terminare esto y podré hacer algo mas divertido, como no se… el cubo ese de las caras de colores, por ejemplo, ya sabes a que me refiero. Habló mirándose en un pequeño espejo de mano circular que se había sacado de su bolsillo. Si alguien le viere podría pensar que estaba algo grillado. RE: Una entrega especial - Ritsuko - 28/10/2015 - ¿Es que no recuerdas que hoy ibas a comprar arcilla...? - Preguntaba una y otra vez la fémina inexistente que acompañaba a la joven kunoichi mientras caminaba por aquellos senderos por las afueras de la aldea. - ¡Claro que me acuerdo! Pero no tenía ganas... - Se quejaba la animada kunoichi. La chica había decidido ir a comprar arcilla para seguir jugando y tal vez hacer una que otra máscara extra por si se rompía la que lucía en ese mismo instante. Pero la caprichosa resultó ser lo suficientemente brillante para ir a hacerlo a una ciudad fuera del mismo país. ~ Y... ¿Dónde quedaba...? ~ Se preguntó la pelirroja justo al llegar a una intersección en aquellos senderos habitualmente concurridos por caravanas de comerciantes. - ¿Por qué no pedimos indicaciones? - Preguntó la mujer justo al momento en que la idea cruzó la cabeza de la kunoichi. Así que si, Ritsuko estaba dispuesta a pedir algún tipo de indicación para llegar a algún lugar donde vendieran arcilla, pero tenía el problema de que no había nadie por la zona. - Y... ¿A quién le pregunto? Dudo que la piedra sepa decirme... - Decía la pelirroja mientras se desviaba por el camino de la derecha, sin motivo aparente. Caminar sin parar en dirección fija, siguiendo el sendero con la esperanza de algún día llegar a algún pueblo antes de morir de hambre. ¡Esa era la motivación de la kunoichi! ¡Ese era su camino ninja! Derechito y por la sombra de ser posible. - Mamá... ¿Falta mucho...? - Pero la cosa no fue tan sencilla ¿O si? Bueno, la cuestión es que Ritsuko a la distancia pudo ver una silueta en movimiento. ~ ¿Algún mercader...? ~ Se preguntó a si misma mientras aceleraba el paso para encontrarse con la persona. Desde atrás supuso que sería una mujer puesto que poseía una larga cabellera, tan roja como la propia pero algo más corta. Aunque la cosa no quedó en solo 'verla', sino que prefirió acelerar más luego de ponerse la capucha de su gabardina y acercarse aún más a la persona para de paso llevarse la sorpresa de la bandana que traía en el brazo izquierdo y de paso que se trataba (tal vez) de un chico. - ¡Shinobi! - Chilló la kunoichi a los cuatro vientos, al mismo tiempo que daba un saltito para alejarse del shinobi y le apuntaba con el dedo anular (si, el anular) de una forma un tanto 'acusadora'. - ¿Eres chico o chica...? - Agregó al rato, SOLO para asegurarse de que estaba hablando con un chico. RE: Una entrega especial - Sasaki Reiji - 7/11/2015 —Soy... Pero su conciencia le dijo algo así como: Ie, tate quieto amigo. Y es que, toda la paz de su viaje había sido perturbada exactamente por eso, por una perturbada mental. O un, el tampoco sabia de que sexo era su interlocutor aunque por la voz podria haber dicho que era una chica, claro que en la academia también conocía a algunos chicos con voz afeminada. —Esperad un momento, deberíais ser vos quien se descubriera primero, pues tenéis una pinta bastante sospechosa Y es que su interlocutor o interlocutora llevaba su rostro cubierto por una extraña mascara en forma de cráneo humano. Un tanto grotesco para el gusto de Reiji. Pero no solo eso, sino que ademas llevaba su cabeza cubierta por la capucha de una larga gabardina. Lo único que quedaba a la vista eran sus ojos, tan rojos como el cabello de la madre de Reiji. era bastante sospecho, y con el cargamento que llevaba encima, Reiji no podía bajar la guardia ni un solo segundo. —Sois altamente sospecho o sospechosa y si no descubrís vuestro rostro no tendré mas remedio que tomaros por un vil rufián RE: Una entrega especial - Ritsuko - 8/11/2015 Muy atenta, Ritsuko estaba preparada para escuchar la respuesta que la iluminaría para así lograr reconocer el género de la persona que tenía delante. Estaba con los ojos bien abiertos y casi que temblando a la espera, pero el suspenso que le daba el chico o chica fue a peor, no solo se tomó su tiempo para responder, sino que terminó devolviéndole la pregunta. —Esperad un momento, deberíais ser vos quien se descubriera primero, pues tenéis una pinta bastante sospechosa Efectivamente, tenía buenos argumentos a su favor y la mente de la pelirroja no lograba dar con una respuesta lo suficientemente absurda para ser creíble o desviar lo suficiente la conversación, por lo que terminó por sacarse la capucha tras lo cual suspiró pesadamente y más tarde se quitó la máscara dejando a la vista su cara pintada. - Ritsuko, kunoichi de Takigakure, soy una chica aunque medio plana... - Se presentó la chica con una mano sobre la bandana que traía atada a su cintura en un intento por darle prueba de que lo que decía era cierto, por lo menos respecto a su procedencia, lo de ser chica no tenía mucho para demostrarle, o mejor dicho no estaba dispuesta a hacerlo. Ahora en cierta manera, el pelirrojo no tenía muchas otras excusas para evitar la pregunta de Ritsuko, por lo que la repitió. - ¿Entonces? ¿Chico o chica...? - Preguntó pero esta vez mirándole con los ojos entrecerrados como si comenzara a sospechar de él, aunque claro, no pretendía ponerse hostil con él. RE: Una entrega especial - Sasaki Reiji - 18/11/2015 —Reiji, Shinobi de Amegakure, soy un chico mas mi cabello es largo Respondió algo muy similar a lo que ella había dicho, aunque contesto a duras penas. Cuando ella se había quitado la capucha y la mascara Reiji había recibido una especie de shock visual. La larga cabellera roja de la muchacha había dejado al joven sin aliento. Por alguna especie de motivo que el muchacho desconocía se sentía extrañamente atraído hacia las mujeres cuyo cabello era de color rojo. No sabia si estaba en su sangre o en su mente, si era algo normal o alguna especie de fetiche. En amgakure no abundaban las mujeres así, por no decir que a parte de su madre no conocía ninguna y no sentenia ninguna atracción por su madre. —Perdonadme si os he ofendido hermosa dama, pues no era mi intención —Se apresuro a decir el joven —Me hallo sumamente avergonzado por ofender vuestros sentimientos El joven shinobi de Amegakure metió la mano en el interior del bolsillo de su gabardina y genero un pequeño rubí con forma de llama. Aquello tenia su explicación, pues lo que sentía por aquella joven ardía con fuerza en su corazón y quemaba su alma, pero no dolía, todo lo contrario, era un sentimiento placentero. —Seria un honor para mi que aceptarais este presente de mi parte —El joven le mostró la joya a la muchacha, esta tenia un pequeño agujero para que pudiera usarse como colgante —Se que su brillo no es comparable a la belleza de vuestros ojos, y que un pequeño e insignificante rubí no debe tener ningún valor para una diosa como vos, mas os lo entrego con todo mi corazón y mi alma, y tenéis que saber que saber que una mujer no necesita un busto grande para ser bella, solo tenéis que miraros al espejo y veréis a la mujer mas hermosa que jamas he conocido Aquella muchacha bien podría ser su enemiga o una ladrona profesional disfrazada de ladrón, pero el cerebro del joven de amegakure hacia tiempo que se había derretido y lo que le movía no era mas que su corazón y un extraño sentimiento que no sabia lo que era. RE: Una entrega especial - Ritsuko - 19/11/2015 Luego de haberse sacado la capucha y presentado, Ritsuko pudo notar que el pelirrojo que tenía delante se había quedado en silencio y algo inmóvil. ~ ¿Será mejor si me pongo la máscara...? ~ Pensó la kunoichi que ya había bajado la mirada al objeto mencionado que traía en su mano. Para su suerte no fue necesario, el chico respondió presentándose del mismo modo que ella había hecho y segundos más tarde se disculpó posiblemente a causa de ese momento de silencio que en cierta manera la había incomodado. —Me hallo sumamente avergonzado por ofender vuestros sentimientos Fueron las palabras del pelirrojo aunque Ritsuko no las había terminado de entender, pues era casi una costumbre para ella que le dedicaran esos silencios a causa ya sea de la máscara o del maquillaje que adornaba su rostro. - ¿Ofender...? - Preguntó un tanto perdida por la reacción que el shinobi había tenido. La kunoichi ya estaba un tanto descolocada, pero lo que vendría luego terminaría de quemarle las neuronas. El chico sacó de su bolsillo una piedra rojiza y brillante, una piedra que cualquiera con dos dedos de frente sabría reconocer. - ¿Eh...? - Fue lo único que pudo entonar la chica que nunca en su vida estuvo frente a una situación semejante. Además, las palabras de Reiji no la ayudaban en lo más mínimo ya que tampoco estaba acostumbrada a recibir cumplidos. El rubor en las mejillas de la kunoichi no tardó en hacerse presente, era bastante notorio pese al maquillaje que traía y para colmo había cambiado completamente la postura por una un tanto más femenina. Las piernas bien pegadas la una a la otra, los brazos contra el cuerpo y las manos mostrándose frente a su vientre con cierta timidez. - De casualidad... ¿Estás ciego...? - Atinó a preguntar la kunoichi que con una mano temblorosa tomó esa joya para observarla mejor. ~ Que bonita... ~ Fue lo único que pudo pensar acerca del regalo que le acababan de hacer. Pero enseguida terminó de mirar la piedra recordó que esas cosas solían ser bastante valiosas por lo que enseguida se reincorporó con la pregunta. - ¿Estás seguro de esto...? - Dijo con un tono bastante nervioso y sin poder hacer nada contra el rubor de sus mejillas. RE: Una entrega especial - Sasaki Reiji - 19/11/2015 —De casualidad... ¿Estás ciego...? —Ciego he estado hasta el día que mis ojos se cruzaron con vos, toda la oscuridad que los cubría se marcho a la luz de vuestra belleza El muchacho no tardo ni siquiera un momento en responder a esa pregunta, como si hubiera tenido la respuesta preparada, aunque no era así, las palabras habían salido solas de sus labios, ni siquiera había tenido tiempo de pararse a pensarlas. Era muy posible que el joven genin hubiese terminado de perder la poca cordura que le quedaba, o era posible que hubiese caído bajo algún tipo de técnica secreta que le obligaba a hacer esas cosas, pero pese a todo, el joven muchacho no pensaba poner resistencia. —¿Estás seguro de esto...? —Por supuesto, podría haberos entregado un diamante o una esmeralda, mas ese pequeño rubí representa toda vuestra belleza, el rojo es vuestro color, y el fuego es lo que siento en estos instantes quemando mi alma y mi corazón Sin pensarlo si quiere y sin cortarse un pelo, Reiji tomo la mano de la muchacha, con la que había cogido la joya, y la cerro entorno a esta, mientras le dedicaba esas palabras a la joven, que debía estar desconcertada, pues era la primera vez que se encontraban, y el comportamiento de Reiji era algo así como si se hubiese cruzado con la mujer de su vida, sin tan siquiera saber nada de ella, aunque su cerebro no estaba apagado del todo y ya había pensado en eso. —¿Seria mucho pediros que me acompañéis hasta el pueblo mientras me contáis mas sobre vos? Mi alma y mi corazón están ansiosos por conocer mejor a la mujer mas hermosa que el hombre a podido concebir, y para mi seria un honor, que digo, seria un regalo divino, que me obsequiarais con vuestra compañía RE: Una entrega especial - Ritsuko - 19/11/2015 ~ ¿Esto es un genjutsu...? ~ Se preguntaba a si misma la kunoichi que no terminaba de entender lo que estaba pasando. Era la primera vez en toda su vida que alguien le dedicaba cumplidos, aunque algunos no los terminaba de entender pero sabía bien que se refería a algo positivo. La cabeza de la chica estaba que explotaba, su rostro se ruborizaba más y más y estaba empezando a temblar a causa de esto. En eso, su mano fue tomada y no de una manera brusca, sino más bien con delicadeza para hacer que se cerrase con la joya en el centro de la palma indicando claramente las intenciones que tenía el chico respecto de aquel objeto. Ritsuko estaba a punto de tener un ataque de pánico, esperaba que la insultasen, intentasen sacársela de encima o que la ignorasen pero nunca que la empezaran a halagar, le hicieran un regalo y para rematar ese pedido que le habían hecho. ~ ¿Qué está pasando...? ~ Se cuestionó una vez más la chica que siquiera sabía que responder pero mantenía la gema aprisionada en su mano con firmeza. Mientras la chica seguía en shock pudo escuchar una voz retumbando en su cabeza, era la inconfundible voz de su madre que decía. - Acepta... - Seguida de un eco de lo más molesto puesto que no hacía más que retumbar en la cabeza de la chica como si se tratase de un salón inmenso y vacío. La voz de su madre seguía repitiendo esa misma palabra una y otra vez haciendo que a la pelirroja comenzase a darle un leve dolor de cabeza, por lo que no le quedó de otra que intentar seguir la conversación con el shinobi de Amegakure. - ¿Es en serio...? - Preguntó con cierta timidez al chico que seguía delante suyo. - Digo... Soy un bicho raro, no tiene mucho sentido lo que dices... - Se apresuró a agregar en un intento por no darle a entender que rechazaría la propuesta que en el fondo de su ser quería aceptar y de ahí que su teórica madre estuviese tan insistente con el asunto. RE: Una entrega especial - Sasaki Reiji - 20/11/2015 —¿Es en serio...? Digo... Soy un bicho raro, no tiene mucho sentido lo que dices... El muchacho de Amegakure no soltó la mano la mano de la muchacha mientras la escuchaba. Era suave y cálida, le gustaba el tacto de aquella piel, o tal vez había terminado de volverse loco, pues hacia tiempo que había perdido su cordura y ahora mismo su capacidad de pensar con claridad y frialdad. Y aunque intentara enfriar sus pensamientos su ser estaba tan alterado y su corazón ardía tan fuerte que ni el mas frió hielo podría aguantar sin derretirse. —Os escondéis bajo una capa de pintura y una mascara, incluso de vos misma, y no sois capaz de veros como realmente sois, a mi que me habéis dejado ver detrás de la mascara, puedo ver mas allá de la pintura y contemplar vuestro rostro tan hermoso como realmente es, no sois un bicho raro, como ya os he dicho y os repetiré tantas veces como sea necesario, sois la mujer mas hermosa que jamas he visto, que digo una mujer, sois una diosa, y que me perdonen las demás, pero estoy seguro de sois también la mas hermosa de todo el panteón Ni si quiera el joven mismo era consciente de las palabras que salían de su boca, por que eso no salia de su cabeza. Hablaba sin pensar en las consecuencias, hablaba sin ningún tapujo, y ni siquiera estaba considerando lo que pudiera estar sintiendo la pobre chica, que estaba prácticamente temblando y hablaba con timidez. A Reiji todo eso parecía darle igual, pues hablaba sin vergüenza ninguna, ni aun atisbo de timidez en su monologo. —No me creeis? mirad —Reiji acerco la mano de la muchacha que aun no había soltado hacia su pecho, donde se encontraba su corazón —Mi corazón late a la velocidad a la que galopa un corcel, y no es por nadie sino por vos —Cada vez estaba mas cerca de la pobre muchacha, y cada vez el corazón del shinobi latía mas rápido. —Si todavía no me creéis, decidme, que he de hacer para que lo hagáis? RE: Una entrega especial - Ritsuko - 20/11/2015 La chica ya no sabía qué decir, como reaccionar, no entendía nada de lo que pasaba y tampoco se esperó que alguna vez en su vida alguien la trataría como a una persona normal, estaba bastante convencida de que lo que había dicho el tal Blame iba a ser realidad en poco tiempo o mejor dicho, pensaba que en gran medida aquello se había cumplido. Pero justo cuando supuso que estaba completamente sola en el mundo se aparece Reiji, relatando perfectamente la realidad. Efectivamente como había dicho, Ritsuko optó por ocultar su rostro con maquillaje y una máscara que para ella simbolizaba lo que ella era, un bicho raro próximo a morir y que claro, nadie recordaría al no saber exactamente qué era lo que se escondía debajo de la máscara. - Acepta... Acepta Ritsuko... - Seguía repitiendo su propia madre con un eco ensordecedor que no hacía más que molestarla. Reiji no se quedó quieto, en ningún momento le había soltado la mano y la había guiado hasta el pecho ajeno para así sentir lo agitado de ese corazón, en primera instancia Ritsuko no entendió por qué estaba así si no había estado corriendo ni nada por el estilo, pero luego recordó una de las cosas que su madre le había enseñado y eso era, uno de los motivos por el que un corazón se aceleraría. La kunoichi seguía temblando, ruborizada y muy nerviosa, pero al final logró articular palabra. - Puedo... ¿Abrazarte...? - Dijo con un tono tembloroso y lleno de miedo, prefirió mantenerse cabizbaja al momento de decir aquello, por el simple hecho de que un par de lágrimas ennegrecidas por culpa del maquillaje se habían deslizado por cada mejilla. Puede que cualquier otra simplemente hubiese actuado en lugar de preguntar, pero la pelirroja llevaba en claro que muchas personas preferían evitar el contacto físico en especial con lo que ella llamaba 'bichos raros'. Incluso es posible que el chico se arrepintiese de todo lo que había dicho si simplemente iba y lo hacía así que prefería evitar 'espantarlo' a toda costa. RE: Una entrega especial - Sasaki Reiji - 21/11/2015 — Puedo... ¿Abrazarte...? La chica pregunto temblorosa y asustada. Acaso temía al contacto físico? pero entonces por que lo pedía? Y aunque así fuera, ella no había opuesto resistencia cuando Reiji había tomado su mano y la había guiado hasta su corazon. Y pese a todo ella temblaba, y había agachado la cabeza para intentar ocultar unas lagrimas que no habían logrado escapar a los ojos del muchacho de Amegakure. No sabia por que la joven lloraba, no sabia por que temblaba como si algo malo fuese a pasarle, tampoco tenia mucha idea sobre mujeres, pero no podía quedarse quieto ante tal situación, no era ese tipo de persona. Así que actuó, soltó la mano que sostenía de la muchacha, pero no dio tiempo a la joven a pensar que iba a alejarse de ella, no, Reiji dio un rápido paso hacia delante y rodeo a la chica con sus brazos para finalmente atraerla hacia si mismo en un apasionado y gentil abrazo. Reiji disfruto del momento. Hacia rato que algo muy dentro de él le estaba pidiendo a gritos eso que acababa de hacer, y ese algo dentro de el ahora mismo estaba en el paraíso, como Reiji. Disfruto del delicado roce la piel de la muchacha, disfruto del suave tacto de sus hermosos cabellos carmesí, disfruto del dulce y agradable aroma que desprendía la joven y disfruto de la calidez de aquel deseado abrazo. —Disculpad mi osadía, mas cuando he visto esas lagrimas escaparse de tus hermosos ojos no he podido evitar sentir la necesidad de ser yo mismo quien os abrace, mas reconozco que llevo buen rato queriendo arrojarme en vuestros brazos, no he podido, o mejor dicho, no he querido evitarlo desde el mismo momento en que mi mano saboreo el suave tacto de vuestra hermosa piel Tal vez aquello era una muestra definitiva de que el muchacho había perdido todos los papeles y no solo eso, hacia rato que había olvidado por que estaba en aquel lugar y que era lo que tenia que hacer, pero en esos mismos instantes, ninguna de esas dos cosas le importaban. No le importaba la entrega, ni mucho menos le importaba su propia cordura, en esos momentos solo podía centrarse en la joven kunoichi que tenia delante. —Decidme que es lo que causa vuestras lagrimas, para que si me lo permitís, pueda cambiarlas por una hermosa sonrisa RE: Una entrega especial - Ritsuko - 22/11/2015 Lo primero que pasó fue que su mano fue liberada al fin, pero incluso antes de que Ritsuko llegase a pensar en nada o alcanzase a tomar aire para articular palabra el chico había dado un paso hacia adelante y la había atrapado en un abrazo. No uno brusco y carente de emoción, era uno cálido que logró aliviar en gran medida los nervios de la kunoichi que había dejado de temblar al cabo de unos segundos. En primera instancia, los brazos de la chica habían sido aprisionados entre el cuerpo de ambos pero logró deslizarlos a cada lado para poder corresponder al abrazo. En esa posición permaneció durante buen rato, algunas lágrimas más habían brotado de sus ojos y habían corrido más el maquillaje, pero no era una pintura a base de agua por lo que un lavado simple sacaría cualquier tipo de mancha que pudiera llegar a dejarle al chico. Esta vez Reiji indudablemente sentiría la rigidez metálica de las diversas válvulas que tenía Ritsuko por todo su cuerpo, hasta el momento la que tenía en su mano había sido escondida con el rubí que tenía en la mano, pero la de la otra mano estaba perfectamente apoyada en la espalda ajena. Ante las disculpas y los cumplidos no pudo decir absolutamente nada, ni siquiera sabía expresar lo que aquello le hacía sentir pero no importaba porque probablemente el pelirrojo estaría igual a juzgar por el latido acelerado de su corazón que le comenzaba a contagiar a ella. - Sonará estúpido pero es la primera vez en la vida que alguien me abraza o halaga... - Sentenció la kunoichi que ahora esbozaba una sonrisa que él probablemente no alcanzaría a ver. - La gente suele evitarme hasta cuando no traigo maquillaje ni máscara... - Agregó la chica que aumentó un poco la presión que ejercía con sus brazos pero sin lastimar, simplemente quería seguir sintiendo el calor del cuerpo de Reiji, además del latido del corazón. Era algo que le estaba sirviendo como una especie de 'sedante' y de paso lograba acallar el eco de su cabeza. RE: Una entrega especial - Sasaki Reiji - 23/11/2015 La chica no opuso resistencia alguna cuando Reiji la atrajo hacia si con un abrazo, y no solo eso, si no que ella había liberado sus brazos que habían quedado entre ambos y también había rodeado al joven de Amegakure. Fue cuando la muchacha puso su mano sobre la espalda cuando Reiji noto algo extraño, metálico. La verdad es que en esos momentos su cerebro no pensaba, no le dio importancia, tal y como estaba, si la chica hubiese querido apuñalarlo, lo habría echo hace tiempo. Cuando Reiji se disculpo la joven de Takigakure no dijo ni una sola palabra, pero tampoco soltó a Reiji, ni lo empujo lejos de ella. Con todo el descaro del mundo Reiji aprovecho el momento para acariciar el cabello de la joven suavemente sin soltar el abrazo. Si fuera por él no iba a soltarla por el resto de su vida, quería poder detener el tiempo justo en aquel instante, peto por el momento no tenia aquel poder. — Sonará estúpido pero es la primera vez en la vida que alguien me abraza o halaga... —¿Ni siquiera vuestros padres? pues yo no quiero dejar de abrazaros, y mucho menos quiero dejar de halagar vuestra belleza —La gente suele evitarme hasta cuando no traigo maquillaje ni máscara... La chica abrazo todavía mas fuerte a Reiji. El joven pensaba en como la gente podía estar tan ciega y ser tan estúpida, en como se atrevían a dejar a una mujer tan maravillosa de lado. Y ademas, ya estaba conociéndola un poco mas. Solitaria, pero fuerte, había aguantado sin un ápice de cariño hasta ese mismo momento, la gente la evitaba. Y Reiji quería saber mas y mas, no quería soltarla, quería seguir abrazándola también. —Es por que son ciegos, no son capaces de apreciar vuestra belleza, peor para ellos, no saben cuanto se pierden al evitaros —Reiji movió la mano que acariciaba el pelo de la joven hasta su mejilla, alzo la cara de la joven para mirarla a los ojos, mientras la acariciaba con el pulgar —Quiero saber mas de vos, quiero conoceros mejor, me lo pide mi alma, pero sobretodo me lo pide mi corazón, que esta a punto de salir de mi pecho para arrojarse a vuestros brazos RE: Una entrega especial - Ritsuko - 27/11/2015 A la kunoichi no se le había ocurrido la posibilidad de que el chico dejase que su imaginación lo llevase a pensar que lo metálico de la palma de su mano podría ser algún tipo de arma, pero por suerte él no le dio ninguna importancia y siguió tan pegado a ella como al principio. Es más, el chico comenzó a dedicarle unas suaves caricias en la rojiza cabellera que si bien, a simple vista está muy descuidada, es extremadamente suave y sedosa, además que ese rojo vivaz no es normal en cabello descuidado. Ritsuko normalmente haría algún comentario acerca de lo suave que es su cabello casi como si fuese su más grande orgullo, pero esta vez prefirió guardar silencio para disfrutar del calor del cuerpo ajeno. —¿Ni siquiera vuestros padres? pues yo no quiero dejar de abrazaros, y mucho menos quiero dejar de halagar vuestra belleza Preguntó el chico a lo que ella primeramente había pensado en no responder pero al cabo de unos segundos terminó por hacerlo. - Eran muy distantes, rara vez hacíamos contacto físico... - Respondió la chica mientras mantenía su rostro pegado al pecho de Reiji, de forma que pudiese sentir mejor el latido de su corazón que indudablemente parecía estar dispuesto a salirse de su lugar. Parecía ser que ambos shinobis habían olvidado por completo que estaban haciendo antes de encontrarse y si bien, Ritsuko no tenía ningún tipo de obligación aparte que la obligase a seguir adelante, Reiji si la tenía. Pero de todas maneras, ella no tenía ni la más mínima idea de que así fuesen las cosas por lo que no se preocupaba en lo más mínimo. En el momento en que la pelirroja iba a responder a los nuevos comentarios que él hizo, una mano la obligó a alzar la mirada y hacer finalmente contacto visual con aquellos ojos verdosos que casi le decían que nada malo le pasaría siempre y cuando pudiesen verla. - Reiji... - Fue lo único que respondió la joven con los ojos bien abiertos. La chica estaba perdida y su corazón casi que quería hacer lo mismo que el de Reiji, aunque la velocidad de los latidos casi podría decirse que la había igualado aunque ella desconocía completamente ese tipo de sensación. - Podríamos... Ir al pueblo para estar más cómodos. Digo, estamos parados en el medio de la nada. - Respondió Ritsuko un tanto nerviosa mietras rezaba a cuanto dios se le ocurriese para que la respuesta del shinobi fuese afirmativa. RE: Una entrega especial - Sasaki Reiji - 1/12/2015 —Eran muy distantes, rara vez hacíamos contacto físico... Cuanto mas sabia Reiji de la joven, mas curiosidad sentía por ella. Al parecer ni siquiera era cercana a sus padres, todo lo contrario que había pasado con Reiji, de hecho el joven pensaba que a veces sus padres eran demasiado pesados. Estaba feliz, y los quería, aunque sabia que le ocultaban algo, y que algo raro pasaba él. Sin embargo no se preocupaba, ya se lo contarían llegado el momento, o se enteraría el cuando tuviera que enterarse. — Reiji... El joven gennin tubo que tirar de toda su fuerza de voluntad para retener su corazón en el pecho y aguantar el impulso de conquistar los labios de la joven con un beso. No sabia por que se sentía de esa manera, su cerebro no pensaba, su alma actuaba por impulsos, pero al mismo tiempo temía que la joven se asustara, pues apenas se conocían el uno al otro. Su voluntad no era muy fuerte, sin embargo pudo aguantar hasta que la joven, por suerte para él, habló. — Podríamos... Ir al pueblo para estar más cómodos. Digo, estamos parados en el medio de la nada. —"En medio de la nada" parece un buen lugar si vos estáis conmigo —Reiji no la había soltado, es mas, no tenia ganas de hacerlo, y todavia la miraba a los ojos —Mas si me lo pedís soy capaz de acompañaros hasta mismo infierno, así que por supuesto, si así lo queréis iremos hasta el pueblo Una ultima caricia al pelo de la joven, y con gran esfuerzo contra si mismo se aparto suavemente de ella, pero rápidamente tomaría gentilmente una de las manos de la joven cuando esta también se separara de el. Quería tomarla de la mano para ir hasta el pueblo, y entonces vería la válvula que la joven tenia en la palma. Lejos de asustarse, el joven que todavía seguía fascinado con la muchacha acariciaría los bordes del pequeño tubo mientras preguntaba con curiosidad. —¿Puedo preguntaros que es?¿Os duele o os dolió? Bueno, si no queréis no respondáis, pero ¿me permitís tomar vuestra mano durante el camino? |