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Otoño-Invierno de 221

Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.
#31
—Entiendo— Dijo mientras tomaba la pesa.

Ella pudo ver como el jefa de la banda se disponía a acuchillar a su hermano, pero no podía permitirlo. Se acomodó pero vió además como se acercaban desde abajo los otros dos matones, lo cual le hizo dudar durante algunos instantes, mientras obsevaba las distancias estaba pensando seriamente si llegaría siquiera a tirarla tan lejos considerando lo pesado del objeto.

Entre tanto el Takanashi se quedó confundido ante las palabras de Nonoha.

"¿Quién es Leo?" Se preguntó mentalmente.

Para cuando Nonoha volteó la hermana decidió lanzar la pesa, pero se olvidó de agarrar la cuerda. El tiempo parecía haberse detenido en esos instantes, los copos de nieve afuera, los pasos de los dos matones, el chuchillo dirigiéndose hacia el moreno... Los latidos de Lea se aceleraron mientras veía a cámara lenta cómo la pesa impactó en el suelo, a unos cuantos metros del hombre que sujetaba el objeto punzocortante.

—¿Qué coño?— Dijo el maleante observando la pesa en el piso.

Era su momento, si las dos planeaban hacer algo tendían que aprovechar el momento de descuido del hombre. Mientras tanto Tatsuya seguía afuera, se molestó cuando Nonoha le dió la espalda, pero era más por la preocupación de no saber que era lo que estaba ocurriendo adentro.

"Se acabó, si ella no baja yo subiré"

Él no le había dicho a Nonoha que él también era ninja, pero se daría cuenta pronto. El Takanashi corrió hacia el muro del edificio y llevó chakra a sus pies para adherirse a la pared y subir corriendo en ella para llegar hasta laventana donde debían encontrarse ambas chicas según él.
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#32
Oh bueno, pudo ser peor –mascullo para sí misma en cuanto vio la pesa volar por los aires y tras ella la soga que ninguna de las dos logro sujetar. Pese a fallar, el objetivo principal de dicha acción se logró, consiguieron distraer al matón que se disponía a lastimar al muchacho.

Tomo una gran bocanada de aire para luego dejarlo escapar despacio, muy despacio. Tomo impulso y sin decir mucho, se lanzó hacia el frente, justo donde estaba uno de los hombres que tras recibir órdenes se disponían a atraparlas. Estiro sus piernas en cuanto creyó estar lo suficientemente cercal del sujeto, ambos pies se hundieron bruscamente en el pecho del mayor que tras dicha acción, cayó de espaldas al suelo con la pequeña castaña aun encima – listo~ - canturreo mientras se apartaba rápido de él y corría tan rápido, como sus piernas se lo permitían, a donde se encontraban Leo y Goru .

Solo esperaba que Lea pudiera encargarse del otro tipo, pues corrió sin pensar y no se detuvo a ver si el compañero del sujeto al que acaba de lanzar al suelo estaba tras suyo ahora “¿Qué voy a hacer una vez lo tenga en frente? “ se cuestionó mentalmente la jovencita mientras sostenía con firmeza el trozo de vidrio, en una de sus manos - el abuelo tiene razón, actuar sin pensar es un error –murmuro para sí, sonriendo torpemente. Pensó en que podría amenazarlo con aquel cristal roto pero…se arrepintió enseguida.

Se detuvo a pocos pasos de ambos, no estaba segura de nada justo ahora – Esa pesa iba a terminar justo ahí –comento la niña mientras señalaba el rostro de Goru– pero…hubo un pequeño error de cálculo[/color] –levanto los hombros mientras sonreía ¿Qué pretendía? ¿Estaba loca acaso? Ni ella lo sabía, quizás solo buscaba matar tiempo y distraer.

Mientras tanto a sus espaldas, allí en esa ventana donde antes había estado, asomaba Tatsuya , sin embargo ella en ningún momento se percató de que el joven estuviese allí, lo ignoraba por completo…

Lea?...

Llamo de pronto la konoichi , esperando recibir alguna respuesta de su parte, no escucharla le hizo pensar lo peor. No se atrevió a mirar atrás, sospechaba que el sujeto que antes había “pateado” ya se abría levantado y estaría molesto…

“Que descuidada” y sonrió un poco mas ante tal pensamiento, a ese punto cualquier cosa podría pasar.
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#33
—¡Espe...!— No pudo terminar de adevertirle.

Lea vió cómo la kunoichi saltó sobre uno de los matones y luego corrió directo al jefe armada con un vidrio roto, se quedo paralizada un rato viendo la escena. Por suerte el otro de los matones había decidido ayudar a levantarse al compañero que fue derribado por las patadas voladoras de la niña. Entre tanto la morena no sabía que hacer, miraba para adentro y hacia afuera hasta que se percató de la presencia del shinobi.

—¡Ayúd...!— Se volvió a cortar

—Shhhhhh— La silenció Tatsuya colocando su dedo en sus labios, indicando que no debía hablar

—Por favor, no se quién seas, pero ayúdanos a rescatar a mi hermano—

Tatsuya estaba adherido a la pared en la parte externa del edificio donde no lo pudieran ver. Supuso entonces que la muchacha se refería al tal Leo, no la conocía de nada, además según había escuchado los dos eran ladrones, pero estando Nonoha involucrada en esto decidió ayudarlos. Ya después le explicarían el asunto.

—Escucha, tengo un plan—

Tatsuya se acercó a la muchacha y le susurró algo al oído, al principio ella no parecía muy convencida, pero pocas opciones tenían ya por lo que asintió con la cabeza indicando que seguiría el plan del espadachín. Tras esto Lea saltó por la ventana y cayó rodando en la nieve, tras levantarse se echó a correr hacia alguna dirección mientras el Takanashi seguía escondido en la parte de afuera sin que le pudieran ver.

Entre tanto el jefe de los matones empezó a carcajearse.

—¡Niña tonta!— Se burló —¡No te hagas la graciosa!— Chasqueó los dedos.

El matón que sujetaba a Leo lo soltó al instante, sólo para luego desenvainar su katana al igual que los dos matones que cuidaban al jefe y los dos matones de atrás también hicieron lo mismo. Pronto empezaron a rodear a Nonoha dispuestos a rebanarla en trocitos y dejarla igual de destajada que su precioso kimono, se acercaban lentamente con miradas maliciosas cuando pronto algo los distrajo.

—¡Hey! ¡Ustedes!— Tatsuya se asomó en el marco de la ventana.

Todos los matones y su jefe voltearon a verlo, en esos momentos el espadachín se trepó por la pared interior. La banda se quedó boquiabierta viendo cómo corria en la estructura hasta que se posó justo arriba de ellos. Estando colgado de cabeza en el techo se lanzó en picado en dirección diagonal.

—¡Nonoha-chan no me mires!— Le advirtió.

Los matones planeaban interceptarlo en pleno vuelo pero el Takanashi logró desenvainar su espada en el momento justo, aprovechando la luz que entraba desde la ventana provocó un destello que cegaría todos los que estuvieran viéndolo directamente. Sin embargo Tatsuya se fue de largo y terminó cayendo en una pila de cajas de cartón que; aunque amortiguaron su caída se terminaron doblando, provocando que no fuera un muy buen aterrizaje.

"Esto no era parte del plan"
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#34
¿Graciosa? –la menor enarco una ceja mientras le observaba- Esa no era la idea, pero me alegra saber que le hice reír – comento la muchacha risueña. El chasquido le hizo ver de reojo hacia los lados, sabía que su imprudencia solo acarreaba problemas, los guardaespaldas de Goru comenzaron a rodearla de apoco y en cuestión de minutos estuvo sin escapatoria.

Sus orbes azules se pasearon sobre cada uno de los hombres y sobre sus armas, aquel trozo de cristal no era rival para tales objetos, era una batalla perdida. Paso saliva despacio y entonces, cuando creyó que se abalanzarían sobre ella, una voz bastante familiar inundo sus oídos - ¿Tatsuya? – la jovencita quiso girarse y mirar, pero eso implicaba bajar la guardia y no podía darse el lujo de distracciones.

No supo que sucedió, escucho ruidos y luego nuevamente la voz del muchacho, esta vez advirtiéndole que no debía observarlo ¿estaba sobre sus cabezas? Nonoha a penas y tuvo tiempo de pensar, simplemente hizo caso a lo que le decía y mantuvo la vista gacha, así, durante cortos segundos - … ¿uh? – escucho a los sujetos quejarse y luego, el ruido sobre las cajas que le hizo girar el rostro y ver hacia un costado. Allí sobre un montón de cajas dobladas y maltrechas vio a Tatsuya, que ante la maniobra cayo.

Volvió la vista inmediatamente a los hombres que la rodeaban y se encontró con que estos estaban distraídos ¡mejor aún, no podían ver nada! al menos por el momento. Aprovecho tan maravillosa oportunidad y escabulléndose entre ellos, se encamino a toda prisa hacia donde se encontraba el moreno – Leo –le susurro mientras le jalaba de un brazo – vamos, levántate es nuestra oportunidad…ese tipo no es nada sin sus matones – concluyo mientras le animaba a levantarse.

Luego busco con la mirada nuevamente al muchacho de melena oscura y esperando que el moreno pudiera levantarse, se encamino a paso rápido a donde se encontraba Tatsuya - ¿estás bien? – pregunto la castaña mientras retiraba algunas de las cajas e intentaba ayudarlo.

¡Esa fue una gran entrada! – Extendió los brazos con emoción- Una entrada digna de un shinobi – comento haciendo énfasis en aquello último – ¿porque no lo dijiste, porque no dijiste que eras un shinobi? – le cuestiono la menor, mientras le observaba fijamente.
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#35
—¡Porque nunca preguntaste!— Respondió mientras intentaba salir del montón de cajas —¡Atrás de tí!— Le advirtió mientras señalaba con el dedo al hombre armado que estaba atrás de ella.

Leo al notar el peligro decidió dejar de apoyarse en la kunoichi y la empujó a un lado para luego agacharse y meterle una zancadilla al matón, provocando que el monigote cayese encima del Takanashi que aún no se había levantado, clavando la wakizashi a escasos centímetros del rostro del genin de Taki.

—¡VOY A DESOLLARLOS A TODOS!— Amenazó mientras chirriaba sus dientes.

Los guardaespaldas ya se habían recuperado de su estado de ceguera temporal y ahora se disponían a trocear a los ahí presentes, Tatsuya usó su pierna para quitarse al matón que le estaba aplastando y sacó la espada de este para usarla en su contra, tenía la ventaja de ser más liviana que su ninjatou y así podría blandirla con una mano para tener libre la otra.

—No ando muy bien, pero aún puedo encargarme de un par de ratas— Presumió mientras se levantaba con dificultad.

—¡Me haré un adorno con sus cueros cabelludos!— Rugió para mostrar que no se dejaba intimidar.

—¡Me temo que no puedo dejarte hacer eso, me lo lavo con mucho cuidado para tenerlo así de bonito!— Apareció Lea por la puerta de la bodega, había rodeado todo el gimnasio para entrar por la puerta principal y ahora poseía en sus manos dos palos de escoba. —¡Toma!— Lanzó uno por lo alto y este caería cerca de Nonoha.

—Le pago una cena a quién me haga el favor de conseguir otra de estas— Dijo Tatsuya mientras empezaba a canalizar electricidad en el arma.

Eran 3 y un Leo medio herido contra cuatro matones, uno de ellos desarmado y luego el jefe que hasta ahora no se le había visto más que la navaja, pero aún así había mostrado ser hábil al vencer previamente al moreno de un sólo golpe. Aquello sería una pelea campal en un espacio reducido, pero el Takanashi confiaba en que podrían librarla si lograban trabajr en equipo.
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#36
Cierto, cierto –canturreo con una sonrisilla , la sonrisa en sus labios se mantuvo a pesar de la advertencia que minutos después el pelinegro le dio. Apenas y logro voltearse, el empujón del moreno le hizo caer hacia un lado, sentada. Se reincorporo rápidamente al ver la entrada “triunfal” de Lea, justo en el momento preciso, antes de que pasaran a ser historia.

¡Lo tengo! – Exclamo la menor mientras en un rápido movimiento lograba atrapar el palo de escoba que la joven acaba de lanzar no muy lejos de donde ella se encontraba. Pese a que ahora Tatsuya estaba con ellos, seguían estando en desventaja, ellos seguían siendo más…

Se dio cuenta de que era hora de tomarse las cosas enserio y dejar de jugar. Si bien, como ya había recalcado antes, no había sido la mejor de su clase y a duras penas había logrado graduarse…aun así, se sentía en la necesidad de demostrar que no era una insignificante mocosa. Aun manteniendo esa pequeña sonrisa en el rostro, la kunoichi maniobro un poco con el objeto, familiarizándose con el mismo- Es hora de entrar en acción~ - murmuro para sí, mientras sujetaba con ambas manos el pedazo de madera, sosteniéndolo frente suyo, tal y como si de una espada se tratase.

Tomo una bocanada de aire que lentamente libero, ya era una costumbre suya hacerlo siempre que estaba por realizar alguna acción, en la que necesitara de concentración. Sus orbes analizaron minuciosamente a quienes tenía en frente, llegando a la conclusión, después de cortos minutos, de que quizás lo mejor sería no enfrentar a aquel que no portaba armas y poseía ambas manos libres. Algo le decía que de enfrentarlo terminaría arrebatándole su arma con mucha facilidad, pues no había nada en sus manos que lo estorbaba. Su mejor opción según su pensar, era arriesgarse y enfrentar a aquellos que aun contaban con las espadas…

La castaña no contaba con mucho, su resistencia era nula y sus reflejos no eran nada fuera de lo común, aun así, confiaba en que podría conseguir derrotar a algunos cuentos si se concentraba lo suficiente.

Vio de reojo al shinobi y la técnica que usaba en su espada, le sorprendió bastante aunque en ese momento su rostro no lo reflejo, simplemente observo en silencio por cortos segundos y volvió la vista al frente.

No podemos tardar mucho, el abuelo debe estar preocupado~

Rio un poco y sostuvo aún más fuerte el arma improvisada que le habían proporcionado, esperando alguna señal de parte de sus compañeros que le indicara que ya estaban listos y que podrían comenzar en cualquier momento.
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#37
El ambiente estaba tan tenso que podría cortarse con un cuchillo, o con un espada en este caso. Tatsuya volteó durante un instante para hacer contacto visual con Nonoha, indicando que él iniciaria el ataque. Era muy riesgoso lanzarse de primero pero alguien tenía que hacerlo, curiosamente un chasquido por parte de Goru le hizo enfocarse de nuevo, ahora todos los bandidos, incluyendo al que estaba desarmado se lanzaron hacia ellos con rabia, casi dando gritos de guerra de no ser por el hecho de que carecían de lengua.

—¡Ahora!— Gritó mientra daba un salto hacia los matones.

Rapidamente atacó a uno de ellos pero este le bloqueó con su wakizashi, pero, aunque no había logrado conectar se dió el lujo de esbozar una sonrisa; su intención no era cortar al guardaespaldas sino a su arma. Sin embargo otro de los matones estaba por llegarle por detrás, blandió su espada y estaba por darle un tajo en el omoplato cuando el Takanashi levantó su brazo para bloquear y alejar el ataque. Aunque esa distracción de último minuto le impidió seccionar el arma del otro bandido que apartó su arma al percatarse de que algo andaba mal.

El espadachín chasqueó la lengua al ver que estuvo cerca, aún así se alegraba de que al emplear una wakizashi pudo defenderse de ambos, ahora sólo debía encontrar la manera de lidiar con el par de guardaespaldas.

A la vez que el pelinegro se las ingeniaba para luchar en desventaja la morena armada con un palo de escoba decidió encarar a otro de los hombres armados, el sujeto daba rapidos sablazos pero ella desviaba sus ataques al golpear con el palo de la escoba en los laterales de la espada. Harto de que sus ataques fueran interceptados decidió saltar y dar un corte con la espada en alto, pero Lea rodó hacia el frente esquivando la maniobra y con el extremo del palo golpeó la entrepierna del malhechor, quién inmediatamente soltó un quejido apenas audible por su condición.

—Perdón, jiji— Se rió sarcásticamente.

Poco le duró la diversión al ver cómo el tipo sin espada había ido por su hermano que se encontraba desprotegido, esta vez tratando de ahorcarlo con ambas manos, la bailarina no dudó ni un instante y se lanzó a por el sujeto. El moreno trataba de quitarse al sujeto de encima, al punto que para lograrlo tuvo que darle un escupitajo en la cara, el hombre se levantó y trató de limpiarse el rostro. Para cuando logró ver de nuevo lo único que sintió fue como algo alargado de madera golpeaba su nuca, pero antes de que terminara de caer el muchacho apoyó sus manos en el suelo y con un giro de sus piernas le dió una patada en la quijada, mandándolo en dirección contraria.

—¡Ja!— Rió la chica.

—Eso te pasa por meterte con nosotros— Dijo el hermano mientras se pasaba el dedo gordo por la nariz.

En medio de todo eso aún quedaba otro tipo armado, el cual se había dirigido hacía Nonoha con muy, muy pero muy malas intenciones. Goru no quería mancharse las manos por lo que no había entrado al ruedo, aún así se sentiría intimidado si las cosas seguían complicándose, sí los seguían acorralando era probable que intentase huir.

El matón que se dirigió hacia Nonoha saltó como pudo por encima de unas cajas blandiendo su arma en posición horizontal para darle un tajo desde la izquierda, por lo que se las tendría que ingeniar para esquivarlo en un espacio tan reducido como ese.


Perdón la tardanza en postear, no me sentía del todo bien, agradece este post a un Dungeonero que me echó la mano con esto x,D
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#38
La señal que tanto esperaba se dejó escuchar, la jovencita dio un par de pasos hacia el frente, distrayéndose por escasos minutos con las acciones de sus compañeros en contra de sus atacantes. Su atención pronto se vio atraída hacia un costado, al ver a uno de los matones saltar sobre algunas cajas, con la intención de hacerla tirones.

Aunque en un principio parecía saber qué hacer, justo cuando vio al hombre acercarse no supo que hacer realmente, actuó por mero impulso arriesgándose a que todo salir mal y terminara con la hoja de la espada encima suyo. La oji azul se agacho rápidamente y con el palo en manos lo movió de un lado otro de forma horizontal, para golpear los tobillos ajenos buscando que este perdiera el equilibrio y así deshacerse de él.

Aunque su plan funciono en un comienzo, mientras el hombre caía nunca dejo de blandir su espada por lo cual en uno de sus muchos movimientos logro alcanzar a la castaña–¡Arg! –se quejó la menor en cuanto sintió el frio acero lacerar una de sus mejillas. Se puso de pie rápidamente sin perder un minuto más y entonces con un movimiento rápido de sus manos golpeo con el palo al hombre, justo en medio de las cejas, dejándolo inconsciente al instante.

Dejará cicatriz –canturreo llevando su mano libre al rostro, ahí donde tenía el corte, presionando sin poner demasiada fuerza en la pequeña herida - ¿lo logramos? –observo a su alrededor, los oponentes estaban en su mayoría o inconscientes, o en el suelo y eso le hizo sonreír socarronamente- Genial! – no podía no comportarse de forma infantil a veces, seguía siendo una niña y evitar no serlo era difícil.

La jovencita giro en su propio eje hasta detenerse – Aún queda uno –estiro una de sus manos señalando a Goru- El peor de todos~

Off: Solo tengo por decir que nunca habia roleado una "batalla" soy noob, así que disculpa lo toche del post xDu y no te disculpes, yo tarde eones :') )
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#39
—Este... Caballeros, cre-creo que toooooooodoooooo a sido un malentendido— Balbúceo Goru.

Sus matones habían caído y ahora el gran jefe retrocedía paso a paso con las manos en alto, cómo si eso fuese a apaciguar a los tres muchachos.

—Podemos llegar a un acuerdo, hablaremos como la gente civilizada, es sólo de... ¡Hasta nunca idiotas!— Se burló antes de echarse a correr a una velocidad sorprendente para alguien de su complexión.

—¡NO LO HARÁS!— Amenazó Leo.

Tomó el palo de manos de su hermana por la fuerza y con fuerzas renovadas se dió a la tarea de perseguirlo, fue tan rápido que ni siquiera Tatsuya fue capaz de alcanzarle. Goru había salido de la bodega y estaba por escapar por la puerta principal cuando el moreno le propinó un palaso en la nuca, tumbándolo al suelo.

—He estado esperando mucho tiempo por esto, rata maldita— Su tono de voz se volvió un tanto sombrío.

Acto seguido azotó el palo contra el suelo con fuerza, rompiéndolo con el objetivo de rajarlo y hacerle una punta a manera de estaca. En cuanto tuvo su arma improvisada la alzó con ambas manos por lo alto y se dispuso a clavarla en la espalda de Goru, pero alguién estaba ahí para impedirlo.

—¡Detente!— El Takanashi le llegó por detrás, soltó la wakizashi y pasó sus brazos por debajo de las axilas de Leo para sujetarlo —¿Pero qué haces?

—¡Suéltame! ¡Tú no entiendes lo que nos ha hecho este desgraciado!

Entre tanto Goru parecía incorporarse y aprovechar la distracción de los muchachos para escabullirse de nuevo...
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#40
Su rostro se mostraba feliz, demasiado a decir verdad, el ardor de su mejilla pareció desaparecer a causa de la emoción que le había causado toda aquella situación. Después de todo el ajetreo se únicamente se dedicó a observar, mirar a sus “compañeros de batalla” y al líder de los matones intentando lavarse las manos con disculpas baratas que ni el mismo podía creer.

Por un momento creyó que el muchacho impondría justicia con mano propia, sin embargo Tatsuya no se lo permitió, Nonoha suspiro suavemente con alivio al ver que las cosas no habían pasado a mayores.

Mientras nadie le observaba Goru intento escapar de nuevo, la castaña poso sus grandes orbes azules sobre el hombre, sus
labios se curvaron dibujando una enorme sonrisa y tal como si se tratara de un juego fue tras el sujeto – jujujuju – le siguió a hurtadillas y antes de que este pudiera escapar se le lanzo encima haciéndolo caer de cara al suelo.

¿Señor, a donde cree que va? –pregunto de forma juguetona la muchacha mientras se encontraba sentada sobre la espalda del mayor, que a propósito se retorcía bruscamente intentando quitársela de encima.
¿Realmente cree que le vamos a dejar ir así no más? –sonrió sutilmente y puso más peso sobre el sujeto bajo su cuerpo.

No era como si pesara mucho, pero al menos había logrado evitar que escapara, por el momento. Espero a que alguno de los otros fuera y le ayudara, debían pensar que hacer con Goru, si bien no estaba de acuerdo con usar la violencia si creía que debían darle una lección.

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Off: lamento lo corto u.u
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#41
—¡Suéltame mocosa inútil— Bramaba iracundo el hombre de mala vida

Tatsuya soltó a Leo, avergonzado porque casi deja ir a Goru, pero manteniendo su postura de que la violencia no era la mejor forma de solucionar el asunto. El hermano por su parte se cruzó de brazos molesto y volteó la cara mientras chasqueaba la lengua. Lea por su parte fue la que reaccionó más rápida y de inmediato decidió ir a auxiliar a la castaña del kimono destajado. Se acercó al maleante con una de las cuerdas de saltar que había tomado de la bodega y con ella intentaría sujetarlo

—¡Bien hecho! Ahora ayúdame a atarlo— Le indicó a la kunoichi —Y ustedes dos— Desvió la mirada hasta los dos varones —Dejen de discutir entre ustedes y mejor piensen en que haremos con él.

Ante el regaño los muchachos suspiraron, en el caso de Tatsuya no estaba muy seguro de que hacer pues no conocía los detalles. Había ayudado pero porque Nonoha estaba involucrada, no iba a permitir que ella terminase lastimada.

—Óyeme tú— La voz del moreno le sacó de sus pensamientos —Esta sabandija es un terrible estafador, esclavizando a la gente que ha timado, por su culpa hemos sufrido mucho, nos han tachado de ladrones y vagos. ¡Tenemos que escarmentarlo!

—Jejejejjeje, aunque me lleven a las autoridades saldré en unos días, no tienen pruebas para acusarme y tengo dinero suficiente para pagar cualquier fianza. ¡No pueden tocarme! jajajajajaj— Carcajeó maquiavélicamente.

Era verdad, sin pruebas no podían actuar. Pero no por eso se iba a rendir con facilidad, él era un ninja y como tal debía.ser capaz de encontrar una solución.

"Tiene que tener algún fallo, alguna abertura en su plan...."

Mientras Lea le jaló la manga a Nonoha y se acercó a la kunoichi como si fuese a contarle una cosa supersecreta.

—Oye, ¿tú también eres ninja verdad?— Esa fue la primera incógnita, pero para la segunda miró a ambos lados, luego centró su vista en ella y soltó la bomba —Sí eres ninja... ¿Porqué no subiste caminando por la pared de la bodega?— Se le hacía raro pues la niña optó por usar una cuerda en vez de sus habilidades shinobi.


What?? Pero sí está tamaño normalito x,DDD. Por cherto, cambio de color en mis pensamientos.
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#42
En cuanto la morena acudió en su ayuda, tomo las cuerdas para amarrar al hombre tal y como ella se lo había pedido, apretando las sogas lo suficiente para que no pudiera desatarse luego. Mientras continuaba haciendo nudos escucho la conversación que mantenían Leo y Tatsuya, el primero alegaba que debían de darle una lección a Goru, pues sus crimines e injusticias no podían quedar impunes.

Hmmm

Murmuro apenas la jovencita mientras pensaba en dichas palabras, ella también estaba de acuerdo, pero no sabía que debían hacer. Las carcajadas del matón le sacaron de sus pensamientos – me alegro que aun mantenga su sentido del humor –comento la menor sentándose nuevamente en la espalda ajena.

El tirón en su ropa le hizo desviar la mirada a la joven, ante su primera pregunta no respondió nada, sin embargo ante la siguiente no pudo más que reír – Pfff– por un momento pareció que se burlara de la chic aunque no era ese el caso. Nonoha se llevó una mano a los labios evitando que algunas carcajadas más escaparan, la razón por la cual reía era tonta, pues justo en ese momento ella también noto aquel detalle, quizas la emoción del momento le hizo actuar de esa forma y optar por la soga y no por subir por la pared o tal vez simplemente lo olvido…si, así de despistada podía ser.

Llamarme ninja es demasiado –sonrió apenas- mi resistencia es nula, subir por la pared aun si no era demasiado alta demandaba gastar cierta cantidad de chakra que seguramente hubiera necesitado después – bien podría ser una mala excusa, para no admitir que había olvidado que podía subir por las paredes, que las largas tardes que había pasado entrenando habían sido un completo desperdicio. La cuestión era que nunca se sabría realmente cual había sido el motivo para no haber uso de dicha habilidad.

La ojiazul le sonrió a Lea y volvió a posar su vista sobre el “anciano” que usaba como asiento, una vez termino de hablar – Señor Goru, usted es una persona muy confiada….eso no es bueno ¿Qué le hace pensar que no tenemos pruebas para inculparlo? –la kunoichi sonrió ampliamente aunque no tuviera ningún prueba en su contra, tenían que hacerlo hablar de alguna forma, buscar que el propio Goru se hundiera con sus palabras.

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Off: es que se me hizo corto el anterior, tenia pensado escribir algo mas pero no se me ocurrió mucho x'D
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#43
—¿Ehhhhhhh?---- Respondió extrañada —Hmmmmmm— La muchacha entonces también colocó sus posaderas sobre la espalda de Goru para sentarse a la par de Nonoha con los brazos cruzados.

La respuesta no muy le convencía, infló sus cachetes con aire y luego bufó para sacarlo, pero fue el resto del discurso de Nonoha lo que hizo que todos los presentes se quedasen confusos.

—Señor Goru, usted es una persona muy confiada….eso no es bueno ¿Qué le hace pensar que no tenemos pruebas para inculparlo?— Dijo con una amplia sonrisa.

—¿Ah?

—¿Qué?

—¿Las tenemos?— El Takanashi tardó unos dos segundos en reaccionar —Ohhhhhh si sí, claro que las tenemos, tenemos pruebas suficientes para entregarlo a las autoridades— Intentó seguirle a la corriente a la kunoichi.

Le verdad es que cuando cayó en cuenta se puso nerviso, era obvio que necesitaban sacarle información y la jugarreta de Nonoha le pareció excelente, quizás la prueba más contundente sería mostrar el lugar donde tiene retenidos a los cautivos. Ninguna autoridad podría pasar por alto un recinto clandestino de semejante calibre. El espadachín entonces caminó y se paró frente a Goru con los brazos cruzados, mirándolo acusadoramente.

—Sabemos donde está su guarida— Afirmó con tanta confianza que casi se la cree el mismo.

—¿¡Qué!? ¡Imposible! ¿¡Cómo encontraron la entrada en la fábrica abandonada!?— Les inquirió Goru sin saber que él mismo les había dado el secreto.
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#44
Aun sentada sobre el hombre Nonoha dejo escapar algunas risillas en cuanto vio como Tatsuya le seguía la corriente y sin mucho esfuerzo lograba sacarle la información que necesitaban para corroborar que en efecto, Goru , era una mala persona y merecía estar tras las rejas. La niña celebro en silencio, muestra de ello fue la amplia sonrisa juguetona que se le dibujo en los labios al escuchar al propio sujeto confesar.

Listo~ -canturreo la despeinada castaña mientras se levantaba de su improvisado asiento y rodeaba al matón para pararse frente a él, justo al lado del shinobi, apenas e inclinándose un poco hacia el frente – Eso es información clasificada~ –comento entre risillas sin ganas de querer revelarle la verdad aun.

Le dio un par de palmaditas en la espalda al peli negro, felicitándolo por su actuación - ¡estuviste genial! – levanto un pulgar mientras sonreía y luego observo a los dos hermanos que también se encontraban allí - Deberíamos ir a la fábrica – señalo a Goru y prosiguió – debemos llevarlo con nosotros y amarrar a sus guarda espaldas si no deseamos encontrarnos con ellos una vez más – la konoichi se alejó de Tatsuya dando saltitos y fue por el resto de sogas que antes habían visto y que habían usado para subir por la pared.

Mientras tomaba algunas sogas pensó en que buena excusa dar a su abuelo en cuanto lo vieran – podría decirle al abuelo que rodamos por una colina o … -callo por unos minutos mientras desenredaba una de las cuerdas –Podría contarle que atrapamos a un criminal, que hubieron espadas golpes y ¡muchas cosas volando! – comento dejándose llevar por la emoción al final.

¿Qué crees que deberíamos decirle, Tatsuya?
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#45
—Ahhh, jeje, gracias, creo— No estaba muy seguro de cómo reaccionar ante las animadas gracias de Nonoha.

Ahora que ya sabían la ubicación de la cueva del lobo su trabajo sería liberar a los "prisioneros" de la opresión de Goru. Sin embargo Tatsuya pensaba que no sería tan fácil entrar, era probable que necesitasen forzar la entrada y para ello el espadachí necesitaría alguna herramienta extra.

—Yo te ayudo— Dijo a la kunoichi mientras la seguía para buscar las sogas —Nonoha-chan, no creo que sea conveniente llevarnos a ese tal Goru, digo, no es como que sea muy normal andar por la calle con un hombre atado en plena capital de la Espiral...

A menos que llevar rehenes por ahí fuese alguna clase de tradición local no era lo mas aconsejable. Sin embargo tenían otro problema, alguien debía buscar a las autoridades mientras ellos iban a la fábrica; Sin mencionar que aunque supieran que era una fábrica no sabían cual de todas, y por lo que había notado Nonoha no era muy conocedora de la ciudad de Yamiria. El Takanashi se limitó a atar como pudo a los matones mientras escuchaba a una despreocupada Nonoha feliz de la vida.

—¿¡No te preocupa que te regañen!?— El estaba mucho más alterado que ella.

"Yo mejor debería ir pensando que le voy a decir a mamá..."

Mientras ataba a los sujetos decidió revisar los bolsillos de estos para despojarlos de cualquier cosa que pudieran usar para safarse, se notaba que eran bandidos; manoplas, navajas, dinero falso, etc... Todo lo necesario para el bandido moderno.

—Tomaré prestado esto— Dijo mientras se embolsaba una ganzúa que le quitó a uno de los maleantes —Creo que así está listo, ahora vayamos a buscar la fábrica— Dijo mientras se levantaba y se sacudía el hakama.

Caminó hasta la entrada y decidió hablar con los hermanos.

—Cuiden de este tipo en lo que vamos a su guarida,

—No se preocupen— Dijo la morena.

—No lo dejaremos ir— Complementó su hermano.
[Imagen: 7FT8VMk.gif]

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~Ausente los fines de semana~
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