Este foro utiliza cookies
Este foro utiliza cookies para guardar tu información de inicio de sesión si estás registrado, y tu última visita si no lo estás. Las cookies son pequeños documentos de texto guardados en tu ordenador; las cookies establecidas por este foro sólo pueden ser utilizadas en este mismo sitio y no poseen riesgos de seguridad. Las cookies de este foro también llevan un registro de los temas que has leído y cuándo fue la última vez que los leíste. Los administradores NO tienen acceso a esta información, sólo TU NAVEGADOR. Por favor confirma si aceptas el establecimiento de estas cookies.

Se guardará una cookie en tu navegador sea cual sea tu elección para no tener que hacerte esta pregunta otra vez. Podrás cambiar tus ajustes sobre cookies en cualquier momento usando el link en el pie de página.
Otoño-Invierno de 221

Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.
#49
Se movió un poco y un quejido acompañó a una ola de dolor le cruzó todo el cuerpo. Abrió los ojos y entonces su desorientación comenzó a disiparse. El jabalí le había embestido y arrojado contra aquel árbol, ahora que veía la niebla carmesí y el suelo por debajo de él lo recordaba.

«Parece que perdí la conciencia por un instante.» —Aquello tenía sentido dada la magnitud del golpe.

Observo los alrededores y no pudo distinguir ninguna silueta. Trato de moverse, pero su cuerpo entumecido le dificultaba aquella simple tarea. Se arrojó del lugar donde había quedado y aunque aterrizó con un leve golpe, sintió como iba recuperando un poco de movilidad.

«¿Qué habrá pasado con Tatsuya?» —Resultaba en extremo preocupante el pensar que pasaría con su compañero si recibía un ataque igual a ese.

A Kazuma lo había salvado la gran resistencia de Bohimei, sin embargo su compañero no tenía aquella ventaja. Un golpe directo podría matarle en lugar de solo mandarle a volar. Quería ayudarle pero su estado y la densa neblina le impedían ir a buscarle. Se levantó tembloroso y trato de dar algunos pasos hacia alguna parte. Pero entonces escuchó el inconfundible sonido del envite del jabalí, seguido por aquel sonido chisporroteante del flujo de chakra de Tatsuya.

«Por allá están... —se dijo mientras seguía el sonido a tropezones—, debo acercarme más si quiero atacar.»

El sonido le llamaba a través de la nube roja. Cada vez podía sentir más cerca el chillido de dolor de la bestia con la cual su compañero estaba peleando. Su estado tembloroso no le permitiría acercarse mucho, pero ya de por si necesitaba a estar a cierta distancia para realizar su ataque. Su oportunidad llegó en cuanto escuchó como el jabalí se daba a la fuga, superado por el ataque del Takanashi.

«Kibaku Fuda: Kassei-ka —Y entonces la etiqueta que había puesto en su kunai estalló—. Fue buena idea preparar un plan b.»

Luego de la explosión lo único que se escuchó fue el sonoro golpe de una masa de carne contra el suelo y unos cuantos resoplidos más. Después de eso todo fue silencio absoluto… Los jóvenes habían acabado con aquella bestia y por ahora la lucha había terminado.

«Cielos, al fin —pensó mientras se dejaba caer sentado, pues para él aquello era el último aliento del animal—. Que ser tan aterrador, no me extraña que los aldeanos lo consideraran un peligro extremo.»

Mientras yacía descansando pudo percibir como la niebla se iba dispersando con lentitud.
[Imagen: aab687219fe81b12d60db220de0dd17c.gif]
Responder


Mensajes en este tema
RE: Un jabalí con guarnición de hongos y espadas. - por Hanamura Kazuma - 30/03/2016, 15:53


This forum uses Lukasz Tkacz MyBB addons.