14/05/2015, 12:03
Aquel muchacho me mando callar mientras se incorporaba, algo que me resultó un poco gracioso, pero después pensé que era sensato acusar de ladrones a desconocidos. Algún día podría llevarme un disgusto por provocar a gente equivocada, pero particularmente, en esta ocasión, me pareció que tenía toda la pinta.
"Soy así de bravucón, no lo puedo evitar"
El muchacho se acercó hacía mí, y cuando se puso de frente pude ver con total claridad un reluciente Hitai-ate en su frente al igual que yo. Era obviamente un shinobi de la Espiral, y su bandana era de un rojo sangre muy singular. Una vez descartado la posibilidad de que fuese un vulgar ladrón, posé en seco mi taza sobre la mesa y tras su respuesta de claro enfado, o por lo menos quedó claro que le disgustó el mal entendido, procedí a disculparme.
-Ostias discúlpame, espera un momento. Me he precipitado diciéndote eso. Permíteme enmendar mi error, déjame invitarte a una taza de té y unos dangos ¿Te parece?
Alcé mi brazo y señalé la silla vacía que había justo a mi lado, mostrándo mi palma abierta como símbolo de sinceridad, y en la boca que allí se encontraba, podría apreciar aquel muchacho que ofendí sin ningún tipo de fundamento una boca sonriente mostrando una imponente y envidiable dentadura perfecta.
-Me presentaré, soy Bakuhatsu Yoshimitsu, gennin de Kusagakure. Y si, a veces soy un poco gilipollas, no lo puedo evitar...
Estaba tan a gusto que no me di cuenta en donde me encontraba, tener una riña aquí siendo yo el extranjero, podría ocasionarme muchos problemas.
"Pero como dice el refrán, rectificar es de sabios"
"Soy así de bravucón, no lo puedo evitar"
El muchacho se acercó hacía mí, y cuando se puso de frente pude ver con total claridad un reluciente Hitai-ate en su frente al igual que yo. Era obviamente un shinobi de la Espiral, y su bandana era de un rojo sangre muy singular. Una vez descartado la posibilidad de que fuese un vulgar ladrón, posé en seco mi taza sobre la mesa y tras su respuesta de claro enfado, o por lo menos quedó claro que le disgustó el mal entendido, procedí a disculparme.
-Ostias discúlpame, espera un momento. Me he precipitado diciéndote eso. Permíteme enmendar mi error, déjame invitarte a una taza de té y unos dangos ¿Te parece?
Alcé mi brazo y señalé la silla vacía que había justo a mi lado, mostrándo mi palma abierta como símbolo de sinceridad, y en la boca que allí se encontraba, podría apreciar aquel muchacho que ofendí sin ningún tipo de fundamento una boca sonriente mostrando una imponente y envidiable dentadura perfecta.
-Me presentaré, soy Bakuhatsu Yoshimitsu, gennin de Kusagakure. Y si, a veces soy un poco gilipollas, no lo puedo evitar...
Estaba tan a gusto que no me di cuenta en donde me encontraba, tener una riña aquí siendo yo el extranjero, podría ocasionarme muchos problemas.
"Pero como dice el refrán, rectificar es de sabios"