23/05/2016, 02:26
Estaba cerca, el animal no podría ir a ningún lado y sólo faltaba tomarlo, sólo esperaba que el osezno no lo mordiese. "Vamos, sólo un poco más" Pero cuando estaba a punto de poner sus manos sobre su premio un grito le hizo desconcentrarse.
—¡TATSUYA! —empezó a gritar, furioso—. ¿¡Dónde estás, maldito!?
"¿Quién me está llamando de esa manera?" Ahí en medio de la nada, el grito hizó sobresaltarse al panda, resbalándose en el acto. Para su suerte el animal había logrado colgarse del bambú pero no aguantaría mucho tiempo. Tatsuya se acercó rápidamente pero mientras lo hacía el bambú iba doblándose más y más hasta que...
—¡NOOOO!— Gritó del horror.
La caña se había partido y el panda se cayó, por puro instinto Tatsuya se lanzó para interceptarlo en el aire y como pudo giró para abrazarlo y caer de espaldas al suelo, evitando así que el osezno se lastimase por el impacto. El sonido del golpetazo hizo eco entre el silencio de aquellos árboles simétricos, tuvo suerte de que al haberse doblado el bambú no fue una caída de mucha altura, siendo un estrellón leve, pero era imposible negar el hecho de que ahora tenía un dolor de espalda terrible.
—¿Estás bien amiguito?— Preguntó cómo si le fuera a responder.
Estaba adolorido y tardaría en reponerse de la caída, el panda ahora chillaba y trataba de escaparase dándole pequeños zarpazos mientras el Takanashi hacía lo imposible para sujetarlo. "¿Quién habrá sido el que me llamó? ¿Datsue?" Esperaba que en verdad fuera él, después de la tardanza esperaba que tuviera un buen pretexto y que de paso lo ayudase con el recién capturado osezno. "¿Además porque tenía que gritarme de forma tan desagradable?"
—¿¡DATSUE!?— Gritó esperando respuesta de su compañero.
—¡TATSUYA! —empezó a gritar, furioso—. ¿¡Dónde estás, maldito!?
"¿Quién me está llamando de esa manera?" Ahí en medio de la nada, el grito hizó sobresaltarse al panda, resbalándose en el acto. Para su suerte el animal había logrado colgarse del bambú pero no aguantaría mucho tiempo. Tatsuya se acercó rápidamente pero mientras lo hacía el bambú iba doblándose más y más hasta que...
—¡NOOOO!— Gritó del horror.
La caña se había partido y el panda se cayó, por puro instinto Tatsuya se lanzó para interceptarlo en el aire y como pudo giró para abrazarlo y caer de espaldas al suelo, evitando así que el osezno se lastimase por el impacto. El sonido del golpetazo hizo eco entre el silencio de aquellos árboles simétricos, tuvo suerte de que al haberse doblado el bambú no fue una caída de mucha altura, siendo un estrellón leve, pero era imposible negar el hecho de que ahora tenía un dolor de espalda terrible.
—¿Estás bien amiguito?— Preguntó cómo si le fuera a responder.
Estaba adolorido y tardaría en reponerse de la caída, el panda ahora chillaba y trataba de escaparase dándole pequeños zarpazos mientras el Takanashi hacía lo imposible para sujetarlo. "¿Quién habrá sido el que me llamó? ¿Datsue?" Esperaba que en verdad fuera él, después de la tardanza esperaba que tuviera un buen pretexto y que de paso lo ayudase con el recién capturado osezno. "¿Además porque tenía que gritarme de forma tan desagradable?"
—¿¡DATSUE!?— Gritó esperando respuesta de su compañero.