18/05/2015, 10:39
El shinobi de Kusagakure rió levemente cuando Riko le advirtió que tuviera cuidado, ya que, si aquel bicho hacía acto de presencia, no se dejaría cazar fácilmente, desde luego. Entonces el muchacho explicó el por qué de su risa, al parecer se le daba bien acechar y atacar a distancia.
« Vaya, vaya, vaya, parece que vamos a tener en común más de lo que pensaba, veamos si es cierto que se te da tan bien como dices... »
Ambos siguieron su camino, hasta que Yoshimitsu planteó una duda acerca de lo que tenía pensado hacer con el bicho cuando lo encontraran.
— Bueno, realmente no me importa qué hacer con ella cuando la encontremos, matarla, cazarla con vida o simplemente usarla para divertirnos un rato, me da igual. — Respondió Riko al planteamiento del chico mostrando cierta indiferencia.
Era cierto que el de Uzushio tenía un instinto cazador, y muchas veces cazaba simplemente por diversión y acababa soltando a su presa, pero, en otras ocasiones, prefería matarlas, aunque, hasta ahora sus presas siempre habían sido animales de tamaño medio-pequeño, por lo que no sabía a ciencia cierta cómo actuaría si encontraba un animal tan grande como el que estaban buscando.
Ambos se adentraron en el bosque, avanzando a una velocidad considerable, aunque el Shokkou se percató de la diferencia de velocidad entre su acompañante y él, aunque el Bakuhatsu dejó que fuera el pelinegro el que guiara la búsqueda, cosa que agradeció un poco.
De repente, un estruendo se escuchó entre el silencio del bosque, un ruido como el que hace un árbol al caer al suelo.
— ¿Lo has oído, no? ¿Se ha caído un árbol? Vamos a mirar, creo que ha sido por ahí. — Y dicho esto desvió su trayectoria un ángulo de 54 grados a la derecha, en dirección hacia donde se había producido aquel ruido, esperando excitado que hubiera sido provocado por lo que ellos dos andaban buscando.
« Vaya, vaya, vaya, parece que vamos a tener en común más de lo que pensaba, veamos si es cierto que se te da tan bien como dices... »
Ambos siguieron su camino, hasta que Yoshimitsu planteó una duda acerca de lo que tenía pensado hacer con el bicho cuando lo encontraran.
— Bueno, realmente no me importa qué hacer con ella cuando la encontremos, matarla, cazarla con vida o simplemente usarla para divertirnos un rato, me da igual. — Respondió Riko al planteamiento del chico mostrando cierta indiferencia.
Era cierto que el de Uzushio tenía un instinto cazador, y muchas veces cazaba simplemente por diversión y acababa soltando a su presa, pero, en otras ocasiones, prefería matarlas, aunque, hasta ahora sus presas siempre habían sido animales de tamaño medio-pequeño, por lo que no sabía a ciencia cierta cómo actuaría si encontraba un animal tan grande como el que estaban buscando.
Ambos se adentraron en el bosque, avanzando a una velocidad considerable, aunque el Shokkou se percató de la diferencia de velocidad entre su acompañante y él, aunque el Bakuhatsu dejó que fuera el pelinegro el que guiara la búsqueda, cosa que agradeció un poco.
De repente, un estruendo se escuchó entre el silencio del bosque, un ruido como el que hace un árbol al caer al suelo.
— ¿Lo has oído, no? ¿Se ha caído un árbol? Vamos a mirar, creo que ha sido por ahí. — Y dicho esto desvió su trayectoria un ángulo de 54 grados a la derecha, en dirección hacia donde se había producido aquel ruido, esperando excitado que hubiera sido provocado por lo que ellos dos andaban buscando.
![[Imagen: tumblr_n4fzpkaZST1rmi71zo1_500.gif]](https://78.media.tumblr.com/ef716a7a224d02d15153150120153d79/tumblr_n4fzpkaZST1rmi71zo1_500.gif)
~ Narro ~ Hablo ~ «Pienso»