1/07/2016, 15:07
—No tienes que excusarte por él, kunoichi de Uzushiogakure— Le respondió con una voz firme —Yo lamento que mi hijo te pudiese haber causado algún problema— Con gran solemnidad y a pesar del dolor el jounin reverenció.
A pesar de que Tenma suele actuar serio y orgulloso, sabe valorar la actitud de las personas. Aprecia la disciplina y la cortesía, por lo que se sintió un tanto complacido con el actuar de la Hyuga y se mostraba más condescendiente con ella. El jounin echó rodilla al suelo y se agachó para poder hablarle de cerca a la peliblanca.
—Estuve observando la pelea un rato, esperando a que bajara la guardia para poder intervenir. Fue gracias a tí, que lograste distraerlo, eso me ayudó mucho— Le elogió.
Tatsuya recién se estaba levantando y observaba atónito la escena, pero un escalofrío pasó por su toda su espalda cuando la mirada fulminante de Tenma se posó sobre él.
—En cuanto a tí...— Sonaba molesto —Me decepcionas. Te quedaste parado como un imbécil cuando podías haber reaccionado, cuando el hombre tiró la lanza pudiste haberla desviado, pero en vez de eso tuve que intervenir— Le soltó cómo un cubetazo de agua fría.
Tatsuya no respondió, bajó la cabeza y aceptó el regaño sin más. Sabía que la kunoichi había hecho la mayor parte, por lo que no se quejó al respecto.
— Lo siento otōsama— Se disculpó —Por cierto, ¿porqué me dijiste que fuera a ese pueblo? ¿dónde estabas?— Cambió de tema.
—Originalmente mi plan era dejarte sólo para ver cómo te las ingeniabas sin mí, pero no pensé que ocurriría algo como esto. Cuando me estaba llendo sentí una presencia fuerte, por lo que regresé a investigar y de pura casualidad me topé con ustedes porque sus chakritas son tan débiles que ni siquiera me di cuenta de que estaban ahí.
—Ese tipo nos tendió una tramp... Alto... ¿¡Planeabas abandonarme a mi suerte!?— Tenía sentimientos encontrados.
Toda esta situación, el viaje, el conocer a Mitsuki, el pueblo, lo del yokai, todo porque su padre quería darle una lección. El de ojos dispares se frustró ante ello y se quedó cabizbajo mirando al suelo mientras los rayos del sol poco a poco iban alumbrando el lugar transformando el lago otra vez en un hermoso paisaje.
A pesar de que Tenma suele actuar serio y orgulloso, sabe valorar la actitud de las personas. Aprecia la disciplina y la cortesía, por lo que se sintió un tanto complacido con el actuar de la Hyuga y se mostraba más condescendiente con ella. El jounin echó rodilla al suelo y se agachó para poder hablarle de cerca a la peliblanca.
—Estuve observando la pelea un rato, esperando a que bajara la guardia para poder intervenir. Fue gracias a tí, que lograste distraerlo, eso me ayudó mucho— Le elogió.
Tatsuya recién se estaba levantando y observaba atónito la escena, pero un escalofrío pasó por su toda su espalda cuando la mirada fulminante de Tenma se posó sobre él.
—En cuanto a tí...— Sonaba molesto —Me decepcionas. Te quedaste parado como un imbécil cuando podías haber reaccionado, cuando el hombre tiró la lanza pudiste haberla desviado, pero en vez de eso tuve que intervenir— Le soltó cómo un cubetazo de agua fría.
Tatsuya no respondió, bajó la cabeza y aceptó el regaño sin más. Sabía que la kunoichi había hecho la mayor parte, por lo que no se quejó al respecto.
— Lo siento otōsama— Se disculpó —Por cierto, ¿porqué me dijiste que fuera a ese pueblo? ¿dónde estabas?— Cambió de tema.
—Originalmente mi plan era dejarte sólo para ver cómo te las ingeniabas sin mí, pero no pensé que ocurriría algo como esto. Cuando me estaba llendo sentí una presencia fuerte, por lo que regresé a investigar y de pura casualidad me topé con ustedes porque sus chakritas son tan débiles que ni siquiera me di cuenta de que estaban ahí.
—Ese tipo nos tendió una tramp... Alto... ¿¡Planeabas abandonarme a mi suerte!?— Tenía sentimientos encontrados.
Toda esta situación, el viaje, el conocer a Mitsuki, el pueblo, lo del yokai, todo porque su padre quería darle una lección. El de ojos dispares se frustró ante ello y se quedó cabizbajo mirando al suelo mientras los rayos del sol poco a poco iban alumbrando el lugar transformando el lago otra vez en un hermoso paisaje.