3/07/2016, 00:27
Sus palabras parecían haber hecho recapacitar a la gente, al menos ya no parecían estar apunto de abalanzarse sobre la anciana. Ahora más bien parecían confusos y avergonzados por su manera de proceder
—Niña, ¿crees que los dioses me perdonarán?—
La peliblanca se había dado la vuelta para observar los ojos de la mujer una vez más, parecía que de verdad estaba arrepentida.
—Eso solo lo saben los dioses, lo único que puedes hacer es intentarlo— Sintió como la mano de Tatsuya se apoyaba sobre su hombro, a la vez que le escuchó decir su nombre —Quizás algún día te perdonen... Sí los humanos podemos perdonarte, ¿por qué no habrían de hacerlo los dioses?— perdonar a alguien como ella... era algo muy duro, pero no era una situación fácil de juzgar. Cualquiera podría haber tomado el mismo camino, además los aldeanos eran tan culpables como ella
—Vayánse, por favor—
—Si, será lo mejor— respondió la peliblanca — Te deseo que el camino que recorres ahora sea mejor que el que dejas atrás...— Mitsuki giró sobre si misma suavemente para encontrarse con Tatsuya a su lado —Me temo que aquí nos separamos— sonrió levemente —Muchas gracias por tu ayuda— hizo una reverencia en señal de agradecimiento —y también a usted, padre de Tatsuya— lo dijo aproposito de esa manera, para señalar que ni siquiera se había presentado
—Niña, ¿crees que los dioses me perdonarán?—
La peliblanca se había dado la vuelta para observar los ojos de la mujer una vez más, parecía que de verdad estaba arrepentida.
—Eso solo lo saben los dioses, lo único que puedes hacer es intentarlo— Sintió como la mano de Tatsuya se apoyaba sobre su hombro, a la vez que le escuchó decir su nombre —Quizás algún día te perdonen... Sí los humanos podemos perdonarte, ¿por qué no habrían de hacerlo los dioses?— perdonar a alguien como ella... era algo muy duro, pero no era una situación fácil de juzgar. Cualquiera podría haber tomado el mismo camino, además los aldeanos eran tan culpables como ella
—Vayánse, por favor—
—Si, será lo mejor— respondió la peliblanca — Te deseo que el camino que recorres ahora sea mejor que el que dejas atrás...— Mitsuki giró sobre si misma suavemente para encontrarse con Tatsuya a su lado —Me temo que aquí nos separamos— sonrió levemente —Muchas gracias por tu ayuda— hizo una reverencia en señal de agradecimiento —y también a usted, padre de Tatsuya— lo dijo aproposito de esa manera, para señalar que ni siquiera se había presentado