9/09/2016, 20:50
"Para una vez que quiero ver al viejo..." se lamentaba la pequeña que seguía sin levantar la cabeza de la barra "Maldito, maldito, maldito... encima que te hago el trabajo sucio... ¿por qué me ha tocado el instructor más tonto de toda Amegakure..." Tomoe lanzó un bufido "Mitsuki me gustaba más, no hablaba más de la cuenta y solo entrenábamos en serio... ahora no hago nada más que dar vueltas estúpidas... en sitios estúpidos... con un estúpido..."
-Un mal día ¿eh?...— alguien que acababa de sentarse a su lado le estaba.
"Y ahora me hablan..." giró la cabeza de manera que su moflete derecho quedo sobre la madera, pudiendo así observar al chico que se había dirigido a ella "Vaya cara me tiene..." durante un instante el muchacho castaño que tenía frente a ella, le pareció practicamente igual que su senpai "De hecho... tienen la misma cara de tontos... pero este es más raro... o el otro es tan raro que este me parece raro..." escudriño con la mirada al chico de cabellos largos que tenía frente así "De todas formas... ¿que hago? no quiero hablar con él... pero senpai me ha dicho que tengo que intentarlo... por mucho que no me guste una orden es una orden..." analizó la peculiar vestimente del chico, deteniendose en la bandana que tenía en el cuello un instante —¿No crees que vistes demasiado ridiculo para ser un shinobi?— lanzó la cuestión a modo de dardo
"Vaya... ya lo he soltado... creo que no es del todo correcto... un segundo" se incorporó mientras sacaba el libro de modales que le había dado Sasaki "Estaba por aquí...." paso unas cuantas páginas "Aquí.... de acuerdo, no debo nunca decir la verdad sobre algo si es mal... ajam... a la gente no le gusta la verdad..." volvió la mirada hacia el chico "Seguramente le habré ofendido... como a aquella señora que le pregunte si estaba embarazada... odio a las personas"
—Siento haber dicho la verdad, disculpa— trató de arreglarlo antes de volver a guardar el manual y dejar caer de nuevo la cabeza como si fuese un ladrillo sobre la barra "He sido amable, así que ya he cumplido con las órdenes de Koji-senapi"
"En cuanto llegué lo primero que haré será ver al viejo, si hubiese tenido eso el lobo no se habría escapado la primera vez" así que la mente de Tomoe volvió a sus menesteres, ignorando al chico
-Un mal día ¿eh?...— alguien que acababa de sentarse a su lado le estaba.
"Y ahora me hablan..." giró la cabeza de manera que su moflete derecho quedo sobre la madera, pudiendo así observar al chico que se había dirigido a ella "Vaya cara me tiene..." durante un instante el muchacho castaño que tenía frente a ella, le pareció practicamente igual que su senpai "De hecho... tienen la misma cara de tontos... pero este es más raro... o el otro es tan raro que este me parece raro..." escudriño con la mirada al chico de cabellos largos que tenía frente así "De todas formas... ¿que hago? no quiero hablar con él... pero senpai me ha dicho que tengo que intentarlo... por mucho que no me guste una orden es una orden..." analizó la peculiar vestimente del chico, deteniendose en la bandana que tenía en el cuello un instante —¿No crees que vistes demasiado ridiculo para ser un shinobi?— lanzó la cuestión a modo de dardo
"Vaya... ya lo he soltado... creo que no es del todo correcto... un segundo" se incorporó mientras sacaba el libro de modales que le había dado Sasaki "Estaba por aquí...." paso unas cuantas páginas "Aquí.... de acuerdo, no debo nunca decir la verdad sobre algo si es mal... ajam... a la gente no le gusta la verdad..." volvió la mirada hacia el chico "Seguramente le habré ofendido... como a aquella señora que le pregunte si estaba embarazada... odio a las personas"
—Siento haber dicho la verdad, disculpa— trató de arreglarlo antes de volver a guardar el manual y dejar caer de nuevo la cabeza como si fuese un ladrillo sobre la barra "He sido amable, así que ya he cumplido con las órdenes de Koji-senapi"
"En cuanto llegué lo primero que haré será ver al viejo, si hubiese tenido eso el lobo no se habría escapado la primera vez" así que la mente de Tomoe volvió a sus menesteres, ignorando al chico