11/10/2016, 13:21
—Este malandro intentó robarle sus cosas a alguien y cuando lo terminé arrinconando allá afuera, esa niña va y le tira con todos los kunai a los que pudo echarle mano—
El anciano bedel le echó una rápida mirada a la chica que seguía frotándose la cabeza como una loca tratando de alejar el dolor del golpe recibido —Me sorprende que siga vivo, nunca he visto a esa mocosa fallar disparo— observó mientras ayudaba al médico a acomodar al chico sobre una fila de sillas
—¿Podría tenerlo aquí hasta qué busque a alguien para que se lo lleve?—
Mientras el joven médico lanzaba su pregunta, el hombre revisaba la herida del chico cuidadosamente
—Veo que te has ocupado de la atención primaria— sacó un kunai y rompió la camiseta del herido por detrás para descubrir mejor la herida —No está nada mal, nada mal— palpó con cuidado la zona —No tienes que preocuparte más, me ocuparé yo de llevarlo directamente al hospital—
Tomoe observaba la escena aún sin poder quitarse su mano derecha de la coronilla, el golpe había sido tremendo "Preocuparse tanto por un maldito delincuente..." aún así permanecería en silencio, no quería recibir otro golpe por el momento
—Ha tenido bastante suerte este ladronzuelo, si el kunai hubiese golpeado un poco más arriba, se habría quedado inválido...— el anciano se incorporo
"Siempre fallo cuando intento ese golpe..." se lamentó la pequeñaja que una vez más había vuelto a errar el disparo entre vertebras
—Voy a guardar mis aperos de trabajo, vuelvo en un minuto— pidió el anciano bedel, que antes de marcharse recogería su cubo y el trozo de fregona que había rodado por el suelo
El anciano bedel le echó una rápida mirada a la chica que seguía frotándose la cabeza como una loca tratando de alejar el dolor del golpe recibido —Me sorprende que siga vivo, nunca he visto a esa mocosa fallar disparo— observó mientras ayudaba al médico a acomodar al chico sobre una fila de sillas
—¿Podría tenerlo aquí hasta qué busque a alguien para que se lo lleve?—
Mientras el joven médico lanzaba su pregunta, el hombre revisaba la herida del chico cuidadosamente
—Veo que te has ocupado de la atención primaria— sacó un kunai y rompió la camiseta del herido por detrás para descubrir mejor la herida —No está nada mal, nada mal— palpó con cuidado la zona —No tienes que preocuparte más, me ocuparé yo de llevarlo directamente al hospital—
Tomoe observaba la escena aún sin poder quitarse su mano derecha de la coronilla, el golpe había sido tremendo "Preocuparse tanto por un maldito delincuente..." aún así permanecería en silencio, no quería recibir otro golpe por el momento
—Ha tenido bastante suerte este ladronzuelo, si el kunai hubiese golpeado un poco más arriba, se habría quedado inválido...— el anciano se incorporo
"Siempre fallo cuando intento ese golpe..." se lamentó la pequeñaja que una vez más había vuelto a errar el disparo entre vertebras
—Voy a guardar mis aperos de trabajo, vuelvo en un minuto— pidió el anciano bedel, que antes de marcharse recogería su cubo y el trozo de fregona que había rodado por el suelo