26/10/2016, 12:46
Tomoe estaba como una puta cabra, ¿Es que no era capaz de sentir el peligro? Cuanta imprudencia por su parte provocar a alguien que se veia curtido tan a la ligera.
—No me gusta repetir las cosas, gordinflón. Así que me limitaré a hacer lo que más me gusta: Destrozar—
Está loca de atar, encima... ¿Lo acaba de llamar gordinflón?
No se que pasó pero los bandidos que tan cómodamente estaban cargando la carreta se pararon por un momento, fue algo que no pude evitar fijarme. Tenían cara de preocupación...¿Por qué? De todos modos, algo llamó mi atención nuevamente. Tomoe ya había tomado su decisión, quizás mucho antes de incluso venir hasta aquí, se puso en guardia y armada con sus kunais. Por otro lado el líder bandido, parecía que no le sentó bien las palabras de groseras de Tomoe, que comenzó a bufar como un toro, su piel comenzó a enrojecerse, sus venas se hincharon tanto que parecían algo antinatural, y su cuerpo comenzó a soltar un vaho de sudor.
-¡Solo eres un pedazo de carne putrefacto! pronto estarás donde debes ¡Criando malvas!
Tomoe fue en su busca, iba a plantar batalla contra él, pero la pregunta era ¿Debía ayudarla? ¿O sería capaz de vencer a la montaña ella sola?
—¡A partir de aquí, no hay vuelta atrás!—
No se, no se, Tomoe es fuerte pero veo tanta diferencia de tamaño...
Yo no me puse en guardia, no lo necesitaba, saqué mi makimono y mi inofensivo pincel y comencé a dibujar, apoyaría a Tomoe con mis invocaciones desde la retaguardia.
Tomoe corrió como una centella en busca de la montaña, como el mismo Mahoma. De repente, el líder bandido se desvaneció, como si fuera magia o, quizás no...
Al final la montaña fue a Mahoma...¿Sunshin no jutsu?
En un instante el bandido se colocó en el flanco derecho de Tomoe y...
Konoha... ¡¡Reppū!!
El líder bandido se apareció agachado y realizó una patada baja giratoria, un movimiento acrobático preciso, su pierna, que parecía como una guillotina fue directo en busca de Tomoe.
Por mi parte comencé con lo más grande que tenía, este tipo como intuí, sabía pelear...demasiado...
-¡Ninpou, Chōjū Giga Shishi! Y de nuevo del papel de Yoshimitsu, salió un león de tinta que en busca del líder bandido con gran ferocidad.
Como venga a por mí, me revienta de un golpe...
• PV:–
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—No me gusta repetir las cosas, gordinflón. Así que me limitaré a hacer lo que más me gusta: Destrozar—
Está loca de atar, encima... ¿Lo acaba de llamar gordinflón?
No se que pasó pero los bandidos que tan cómodamente estaban cargando la carreta se pararon por un momento, fue algo que no pude evitar fijarme. Tenían cara de preocupación...¿Por qué? De todos modos, algo llamó mi atención nuevamente. Tomoe ya había tomado su decisión, quizás mucho antes de incluso venir hasta aquí, se puso en guardia y armada con sus kunais. Por otro lado el líder bandido, parecía que no le sentó bien las palabras de groseras de Tomoe, que comenzó a bufar como un toro, su piel comenzó a enrojecerse, sus venas se hincharon tanto que parecían algo antinatural, y su cuerpo comenzó a soltar un vaho de sudor.
-¡Solo eres un pedazo de carne putrefacto! pronto estarás donde debes ¡Criando malvas!
Tomoe fue en su busca, iba a plantar batalla contra él, pero la pregunta era ¿Debía ayudarla? ¿O sería capaz de vencer a la montaña ella sola?
—¡A partir de aquí, no hay vuelta atrás!—
No se, no se, Tomoe es fuerte pero veo tanta diferencia de tamaño...
Yo no me puse en guardia, no lo necesitaba, saqué mi makimono y mi inofensivo pincel y comencé a dibujar, apoyaría a Tomoe con mis invocaciones desde la retaguardia.
Tomoe corrió como una centella en busca de la montaña, como el mismo Mahoma. De repente, el líder bandido se desvaneció, como si fuera magia o, quizás no...
Al final la montaña fue a Mahoma...¿Sunshin no jutsu?
En un instante el bandido se colocó en el flanco derecho de Tomoe y...
Konoha... ¡¡Reppū!!
El líder bandido se apareció agachado y realizó una patada baja giratoria, un movimiento acrobático preciso, su pierna, que parecía como una guillotina fue directo en busca de Tomoe.
Por mi parte comencé con lo más grande que tenía, este tipo como intuí, sabía pelear...demasiado...
-¡Ninpou, Chōjū Giga Shishi! Y de nuevo del papel de Yoshimitsu, salió un león de tinta que en busca del líder bandido con gran ferocidad.
Como venga a por mí, me revienta de un golpe...
Estado de Zaibatsu Yoshimitsu
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90/90
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84/120
Estado del líder bandido
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