16/01/2017, 20:51
Empezaba a notar lo fácil que se le hacía manipular a aquel Uchiha lo cual le generaba un inmenso placer ya que lo interpretaba como un cumplido a su belleza, pero le faltaba aun, le faltaba puesto que la respuesta que le dieron no fue exactamente lo que quería y hasta condiciones le pusieron.
«Se supone que las condiciones las pongo yo. »Pensaba la rubia que se aguantaba las ganas de morderle con saña.
—. ¿Lo harás? —Preguntó el Uchiha tratando de mantener el contacto visual aun teniéndola a ella casi pegada a él, hasta se dio el lujo de apoyar su mentón en el hombro ajeno para soplarle despacio en la cara, más que nada para quitarle un poco aquella seriedad con la que le miraba.
—No le diré a nadie, lo juro. —Dijo con un tonito agradable antes de empujarle la cara con la propia para mayor confort propio. —Nadie se enterará, no por mí. —Agregó intentando convencerle presionándose un poco más.
«¿En qué andarían metidos esos tipos? »Se preguntaba la Sakamoto cuya respuesta ignoraba completamente, aunque era sabido que esos shinobis se reunían de vez en cuando después de clase o durante algunas prácticas que terminaban por saltarse.
Pero mientras buscaba alguna posibilidad, la chica recordó un momento bochornoso que pasó junto a sus compañeras de clase, esa bendita clase… «No me habrán visto ahogándome en esa clase de natación, ¿verdad? »Pensó por un instante en que su mirada cambió completamente y su semblante empalideció notablemente. «No, se supone que los chicos no tenían acceso durante nuestra clase. »Inconscientemente a medida que su instinto asesino afloraba, la kunoichi comenzó a apretar ambas manos contra el vientre del Uchiha, ignorando completamente si comenzaba a hacerle daño o no.
«Se supone que las condiciones las pongo yo. »Pensaba la rubia que se aguantaba las ganas de morderle con saña.
—. ¿Lo harás? —Preguntó el Uchiha tratando de mantener el contacto visual aun teniéndola a ella casi pegada a él, hasta se dio el lujo de apoyar su mentón en el hombro ajeno para soplarle despacio en la cara, más que nada para quitarle un poco aquella seriedad con la que le miraba.
—No le diré a nadie, lo juro. —Dijo con un tonito agradable antes de empujarle la cara con la propia para mayor confort propio. —Nadie se enterará, no por mí. —Agregó intentando convencerle presionándose un poco más.
«¿En qué andarían metidos esos tipos? »Se preguntaba la Sakamoto cuya respuesta ignoraba completamente, aunque era sabido que esos shinobis se reunían de vez en cuando después de clase o durante algunas prácticas que terminaban por saltarse.
Pero mientras buscaba alguna posibilidad, la chica recordó un momento bochornoso que pasó junto a sus compañeras de clase, esa bendita clase… «No me habrán visto ahogándome en esa clase de natación, ¿verdad? »Pensó por un instante en que su mirada cambió completamente y su semblante empalideció notablemente. «No, se supone que los chicos no tenían acceso durante nuestra clase. »Inconscientemente a medida que su instinto asesino afloraba, la kunoichi comenzó a apretar ambas manos contra el vientre del Uchiha, ignorando completamente si comenzaba a hacerle daño o no.