10/06/2015, 20:25
Mantuvo el silencio, observando al muchacho mientras este se perdía casi del mismo modo que él mismo lo había hecho. Parecía perdido e incluso lo había mencionado. Resultaba gracioso de alguna forma, pero no pudo ser expresado de otra manera que con un rostro insípido de su parte... Si bien Kyou no era un muchacho frío y perturbado, tampoco era el más emotivo o expresivo que en aquel bosque o incluso país podrían encontrar.
— Si, te perdiste. — mencionó, mirando por encima de su hombro un par de veces.
Fue entonces cuando se dio cuenta de dos cosas, de que no sabía exactamente hacia donde quedaba el lugar hacia donde quería ir el muchacho, y de que este se había presentado pero él no. — Ah, lo siento. Mi nombre es Aburame Kyou... — se detuvo algo pensativo. — ... mucho gusto. — terminó diciendo, creyendo que eso era lo más educado para el momento. La interacción social resultaba algo compleja de vez en cuando...
Una vez presentado, la diestra de Kyou fue a envolver su mentón y frotarlo un par de veces. Ceño fruncido en plan pensativo, mientras de su ser emergía un característico sonido relacionado con la meditación «omh».
— No recuerdo exactamente hacia donde... Pero préstame el mapa, tal vez pueda reconocerlo. — sugirió, pensando que tal vez leyendo aquello podría también ubicarse mejor. No es que no supiera donde estaban parados, solo que entre vuelta y vuelta, desde aquel lugar en el que se encontraban ahora ellos no sabía llegar.
— Si, te perdiste. — mencionó, mirando por encima de su hombro un par de veces.
Fue entonces cuando se dio cuenta de dos cosas, de que no sabía exactamente hacia donde quedaba el lugar hacia donde quería ir el muchacho, y de que este se había presentado pero él no. — Ah, lo siento. Mi nombre es Aburame Kyou... — se detuvo algo pensativo. — ... mucho gusto. — terminó diciendo, creyendo que eso era lo más educado para el momento. La interacción social resultaba algo compleja de vez en cuando...
Una vez presentado, la diestra de Kyou fue a envolver su mentón y frotarlo un par de veces. Ceño fruncido en plan pensativo, mientras de su ser emergía un característico sonido relacionado con la meditación «omh».
— No recuerdo exactamente hacia donde... Pero préstame el mapa, tal vez pueda reconocerlo. — sugirió, pensando que tal vez leyendo aquello podría también ubicarse mejor. No es que no supiera donde estaban parados, solo que entre vuelta y vuelta, desde aquel lugar en el que se encontraban ahora ellos no sabía llegar.