16/03/2017, 23:56
A la peliverde comenzaba a agotarsele la paciencia, aquel tipo parecía haberse propuesto sacarla de sus casillas y comenzaba a conseguirlo a pesar de los esfuerzos de la joven por controlarse. Y es que con cada palabra que salía de la boca de aquel energúmeno sin pelo, disparaba exponencialmente las ganas de la joven de pegarle un puñetazo en toda la cara y mandarlo puente abajo.
"Dios... que hostia tiene..." la joven se contenía como buenamente podía, pero el shinobi de amegakure insistía en seguir con aquella sonrisilla que la ponía de los nervios "QUE HOSTIA TIENE..." encima tenía la cara de regodearse en su cara
¿No presentar disculpas? Muy bien, veamos. Tú sabes que tengo razón, que ambos andabamos distraídos. No lo quieres admitir por orgullo o lo que sea, muy bien guardalo en tu conciencia. Solo dime, ¿Cómo es eso de que no presenté disculpas debidamente? Enséñame, quiero disculparme debidamente
Izumi respiró hondo buscando en todo su ser hasta la última gota de paciencia, que ya no era mucha pues había desperdiciado la mayor parte en la reunión anterior y el resto en soportar aquella maldita conversación que la estaba conduciendo por rutas homicidas
"Es que encima tienes los cojones de reírse de mí en mi cara... si no estuviesemos en mitad de una puta ciudad rodeados de testigos lo mataba..." dejó escapar el aire visiblemente enojada
—Mira niñato, como sigas por este camino vamos a terminar mal— amenazó la joven sin cortarse un pelo —Puedo tolerar hasta cierto punto la presencia de los de tu tierra, pero no que se rían en mi cara— la joven dio un par de pasos para acercarse al chico de manera amenazante
"Dios... que hostia tiene..." la joven se contenía como buenamente podía, pero el shinobi de amegakure insistía en seguir con aquella sonrisilla que la ponía de los nervios "QUE HOSTIA TIENE..." encima tenía la cara de regodearse en su cara
¿No presentar disculpas? Muy bien, veamos. Tú sabes que tengo razón, que ambos andabamos distraídos. No lo quieres admitir por orgullo o lo que sea, muy bien guardalo en tu conciencia. Solo dime, ¿Cómo es eso de que no presenté disculpas debidamente? Enséñame, quiero disculparme debidamente
Izumi respiró hondo buscando en todo su ser hasta la última gota de paciencia, que ya no era mucha pues había desperdiciado la mayor parte en la reunión anterior y el resto en soportar aquella maldita conversación que la estaba conduciendo por rutas homicidas
"Es que encima tienes los cojones de reírse de mí en mi cara... si no estuviesemos en mitad de una puta ciudad rodeados de testigos lo mataba..." dejó escapar el aire visiblemente enojada
—Mira niñato, como sigas por este camino vamos a terminar mal— amenazó la joven sin cortarse un pelo —Puedo tolerar hasta cierto punto la presencia de los de tu tierra, pero no que se rían en mi cara— la joven dio un par de pasos para acercarse al chico de manera amenazante