18/03/2017, 23:12
El chico respondió a su mirada con una provocación más, sin embargo Izumi ya había tomado la decisión de pasar de él por el resto del día. Por suerte, Juro haría de muro entre ambos y ella podría respirar tranquila.
"Paciencia... paciencia..." se repetía mientras trataba de poner toda su atención en la mujer que tenían justo frente a ella. Ahora que estaban todos sentados, había llegado el momento de que su sensei iniciase la conversación por la que todos se habían reunido aquella mañana
— Oye, tío, Jurete... ¿qué llevas ahí? —
—¿Es qué no puedes estar callado un minuto?— replicó la pelirosa molesta ya solo por la existencia de aquella criatura que algún médico cometió el error de catalogarlo como humano abriéndole así las puertas al mundo shinobi
— Yota, Yota... No seas impaciente, todo a su debido tiempo. No hemos venido aquí a saber que lleva Juro en ese fardo la mujer intervino rápidamente, para evitar que Yota desviase la conversación
Antes de volver a hablar, la mujer se acomodó en su asiento. Aunque a Izumi se le hacía bastante incómodo solo verla, la mujer parecía estar bastante cómoda y concentrada
—Pero dejémonos de estas bobadas, ¿Os parece? Primero me gustaría que nos conociéramos todos un poco. Imaginémonos que no nos conocemos de nada, o de muy poquito. Os voy a dar la palabra, uno por uno y os vais a presentar a los demás. Ya sabéis, vuestro nombre y esas cosas. contad lo que os parezca oportuno. O no, espera. Se me ha ocurrido algo mejor. Nos presentaremos y vamos a decir por qué quisimos ser ninjas. Venga, empiezas tu Izumi. Luego hablará Juro y por último Yota. ¡Qué emoción! ¿A que si, chicos?
La joven se sobresaltó un poco al ver que le tocaba a ella empezar, tragó un poco de saliva mientras trataba de encontrar las palabras para empezar. No tardó mucho en volver a su pose orgullosa, una vez que se había decidido
—Me llamo Izumi, heredera del clan Sanshōo— la joven decidió comenzar tal y como lo haría su abuela —Mis abuelos me inscribieron en la academia para que me convirtiese en una shinobi especialista en Iryō-Nin, al igual que el resto de los miembros de mi clan— prosiguió la joven con tranquilidad —Aunque no es algo en lo que destaque o disfrute— confesó la joven —Así que en la Academia me especialice en en Taijutsu y Kenjutsu, puesto que mi objetivo como kunoichi no es ser médico si no...— la joven se sonrojó un poco al recordar a Kenzou-sama —Me gustaría... ser guardaespaldas personal de Morikage-sama— no pudo ocultar el rubor
"Kenzou-sama..."