3/04/2017, 01:08
Muchas veces uno puede llegar a moverse de su hogar por diferentes motivos, por temas de negocio, por buscar conocer cierta parte del país que se supone ha jurado proteger con su vida o a lo mejor simplemente por diversión, por la aventura. La situación de Manase Mogura no distaba mucho de alguna de todas esas, cumpliendo con un recado de su anciano pariente había dejado la comodidad de la urbe que era Amegakure y se había dispuesto a recorrer los caminos hasta llegar a Yukio.
Yukio era uno de esos lugares que te interesaba visitar si estabas a punto de hacer un viaje, viaje que podía ser tranquilamente cruzar la cordillera hacía el país de la Tierra. Mogura no iba a hacer tal cosa, pero si iba a asistir los viajes de algunos aventureros que estuviesen dispuesto a hacerlo. ¿Cómo? Abasteciendo una pequeña tienda de suplementos médicos con productos a precios bastante interesantes.
Aprovechando que ya estaba en aquel sitio, se tomó la libertad de extender un par de días más su visita. Hospedándose en una posada tenía la intención de recorrer un poco de aquella tan interesante ubicación. Ahora, el objetivo del joven médico no era hacer simple turismo por la zona linda del lugar, sino que deseaba conocerlo a fondo, familiarizarse con el pueblo.
Aplastando la nieve con sus botas caminaba por una parte levemente alejada de las últimas edificaciones, a unos varios minutos de camino de donde dormía. Una de sus manos iba metida dentro de su sobretodo, no era la época más fría del año pero no había necesidad de hacerse el macho en un lugar como ese. Como era costumbre en él, marchaba prácticamente siempre con un paraguas, no había nevado ese día pero si el día anterior.
Yukio era uno de esos lugares que te interesaba visitar si estabas a punto de hacer un viaje, viaje que podía ser tranquilamente cruzar la cordillera hacía el país de la Tierra. Mogura no iba a hacer tal cosa, pero si iba a asistir los viajes de algunos aventureros que estuviesen dispuesto a hacerlo. ¿Cómo? Abasteciendo una pequeña tienda de suplementos médicos con productos a precios bastante interesantes.
Aprovechando que ya estaba en aquel sitio, se tomó la libertad de extender un par de días más su visita. Hospedándose en una posada tenía la intención de recorrer un poco de aquella tan interesante ubicación. Ahora, el objetivo del joven médico no era hacer simple turismo por la zona linda del lugar, sino que deseaba conocerlo a fondo, familiarizarse con el pueblo.
Aplastando la nieve con sus botas caminaba por una parte levemente alejada de las últimas edificaciones, a unos varios minutos de camino de donde dormía. Una de sus manos iba metida dentro de su sobretodo, no era la época más fría del año pero no había necesidad de hacerse el macho en un lugar como ese. Como era costumbre en él, marchaba prácticamente siempre con un paraguas, no había nevado ese día pero si el día anterior.
Hablo - Pienso