28/04/2017, 16:58
Ralexion comenzaba a sentirse hastiado de las incensante insistencia del desfigurado caballero. Ninguno de los dos shinobi iba a ser tan estúpido como para aceptar su propuesta, ¿por qué no se rendía ya? «Macho, sí que debe de estar desesperado...», razonó en la privacidad de su interior, molesto.
—Mire... ¿por qué en lugar de intentar devolvérsela a su hermano no se gasta ese dinero en alguien que sea capaz de defender su negocio? Eso es legal, y moralmente aceptable —volvió a acomodarse como antes— Puede hacer unas reformas, dejar a un guardia o dos montando guardia por la noche, y se terminó el asunto. Si siguen jodiéndose el uno al otro esta espiral nunca se terminará. Por otro lado, si fastidia los planes de su hermano un par de veces, es posible que termine desistiendo.
»Y todos felices. Usted puede centrarse en volver a levantar su negocio, que no está nada mal si ignoramos los destrozos.
Estiró las piernas bajo el agua, desentumecióndolas. Acto seguido esperó una respuesta del cara-hiena con sus orbes avellana posados sobre la horrible imagen que era su faz.
—Mire... ¿por qué en lugar de intentar devolvérsela a su hermano no se gasta ese dinero en alguien que sea capaz de defender su negocio? Eso es legal, y moralmente aceptable —volvió a acomodarse como antes— Puede hacer unas reformas, dejar a un guardia o dos montando guardia por la noche, y se terminó el asunto. Si siguen jodiéndose el uno al otro esta espiral nunca se terminará. Por otro lado, si fastidia los planes de su hermano un par de veces, es posible que termine desistiendo.
»Y todos felices. Usted puede centrarse en volver a levantar su negocio, que no está nada mal si ignoramos los destrozos.
Estiró las piernas bajo el agua, desentumecióndolas. Acto seguido esperó una respuesta del cara-hiena con sus orbes avellana posados sobre la horrible imagen que era su faz.