28/04/2017, 18:30
Akame había tenido suficiente, se marchó de vuelta a los vestuarios. El muchacho no podía juzgarle. Por su parte, Ralexion dejó escapar un suspiro de la más sincera exhasperación.
—Mire, es cierto, esto podría ser una misión... pero hay una gran diferencia entre una misión oficial,
aprobada por la aldea, y jugar a los sicarios. Además, no estoy de acuerdo con este tipo de métodos, especialmente si me juego el tipo yo —explicó, esforzándose en tal de conseguir que entendiera.
»De verdad, no sea cabezota, arregle su negocio, contrate a guardias, ninjas o lo que prefiera como vigilantes, y verá como todo mejora. Yo también sé un poco de empresas.
—Mire, es cierto, esto podría ser una misión... pero hay una gran diferencia entre una misión oficial,
aprobada por la aldea, y jugar a los sicarios. Además, no estoy de acuerdo con este tipo de métodos, especialmente si me juego el tipo yo —explicó, esforzándose en tal de conseguir que entendiera.
»De verdad, no sea cabezota, arregle su negocio, contrate a guardias, ninjas o lo que prefiera como vigilantes, y verá como todo mejora. Yo también sé un poco de empresas.