2/06/2017, 18:27
La teoría conspiracional de Taeko acerca de la relación de Ayame con los Kages se vino abajo. Al parecer solo era muy estudiosa del asunto, y quería investigar más.
”¿Pero qué podría encontrar aquí? Esa batalla pasó hace bastaaante tiempo. Ya todo lo que debió descubrirse se descubrió. ¿No?” pensó, con un dedo en el mentón.
Se alegró entonces cuando Ayame, sonrojada, accedió a dibujarle algo. La morena tomó la libretita y el carboncillo y, después de pensarlo un momento, comenzó a trazar. Se inclinó levemente en su dirección, intentando no impedirle la vista o el movimiento. Después de varios minutos, Ayame le mostró el producto final: los tres Antiguos Kages. Se quejó de que no había salido tan bien, pero Taeko abrió la boca asombrada.
”¡Está súper genial!”
La peliplateada podía dibujar cosas simples, y sus garabatos eran bastante sencillos. Pero en Ayame la práctica. Su técnica de trazado y su estilo denotaban a una buena artista, a pesar de ser, en sus palabras, un hobby.
Taeko tomó la libretita y pasó la hoja con cuidado para escribir una nota. Luego se la mostró, acompañándola con una expresión de ánimo y ojos brillantes.
≫¡Está increíble, Ayame-san! ¿Puedo quedármelo, por favor? ¡Te daré algo bonito a cambio también!
Taeko había movido el pliego de papel con el primer kanji escrito y había sacado uno nuevo en blanco. Lo extendió mientras visualizaba los kanjis para iris en su superficie. Su mano agitaba el pincel para mantener la tinta en movimiento. Un fuerte sentimiento de alegría y camaradería fluía dentro de la chica.
Solo esperaría a que Ayame aceptara su intercambio artístico para escribir la palabra en su cabeza. Tal vez no fuese una palabra muy profunda por sí misma, pero simbolizaría el nacimiento de una relación entre artistas novatas, y entre ninjas de aldeas distintas. ¿Qué más poético que eso?
”¿Pero qué podría encontrar aquí? Esa batalla pasó hace bastaaante tiempo. Ya todo lo que debió descubrirse se descubrió. ¿No?” pensó, con un dedo en el mentón.
Se alegró entonces cuando Ayame, sonrojada, accedió a dibujarle algo. La morena tomó la libretita y el carboncillo y, después de pensarlo un momento, comenzó a trazar. Se inclinó levemente en su dirección, intentando no impedirle la vista o el movimiento. Después de varios minutos, Ayame le mostró el producto final: los tres Antiguos Kages. Se quejó de que no había salido tan bien, pero Taeko abrió la boca asombrada.
”¡Está súper genial!”
La peliplateada podía dibujar cosas simples, y sus garabatos eran bastante sencillos. Pero en Ayame la práctica. Su técnica de trazado y su estilo denotaban a una buena artista, a pesar de ser, en sus palabras, un hobby.
Taeko tomó la libretita y pasó la hoja con cuidado para escribir una nota. Luego se la mostró, acompañándola con una expresión de ánimo y ojos brillantes.
≫¡Está increíble, Ayame-san! ¿Puedo quedármelo, por favor? ¡Te daré algo bonito a cambio también!
Taeko había movido el pliego de papel con el primer kanji escrito y había sacado uno nuevo en blanco. Lo extendió mientras visualizaba los kanjis para iris en su superficie. Su mano agitaba el pincel para mantener la tinta en movimiento. Un fuerte sentimiento de alegría y camaradería fluía dentro de la chica.
Solo esperaría a que Ayame aceptara su intercambio artístico para escribir la palabra en su cabeza. Tal vez no fuese una palabra muy profunda por sí misma, pero simbolizaría el nacimiento de una relación entre artistas novatas, y entre ninjas de aldeas distintas. ¿Qué más poético que eso?
SILENCE
〘When deed speaks, words are nothing.〙
"Pienso" (thistle) ❀ ≫Escribo (orchid)
¡Visita El rincón de traducción de Taekūran!
〘When deed speaks, words are nothing.〙
"Pienso" (thistle) ❀ ≫Escribo (orchid)
¡Visita El rincón de traducción de Taekūran!