6/08/2017, 22:05
Luego de las presentaciones y de correr un poco más, aquel grupo improvisado de shinobis llegó a la cima y se encontraron con una escena de lo más curiosa, un hombre tratando de mantener a raya a un hermoso ejemplar albino que lejos de sentirse intimidado por la silla o la pata de la misma, siguió como si nada.
Pero el color blanquecino de su pelaje era lo que más llamaba la atención de la rubia y lo que le trajo la idea de que tal vez no puedan darse el lujo de solo ir y matarlo, tal vez lo mejor justamente sería distraer a la fiera hasta que llegasen los samurái y se encargasen del asunto.
Lo más llamativo fue que tanto el peliverde como el pelirrojo ya habían hecho alguna intervención. El lado positivo fue que muy rápido el animal se centró en los shinobis así que… Si Keisuke actuaba adecuadamente podrían sacar al herido más fácilmente. Para ello Koko prefirió aportar a la distracción acercándose a Daigo.
—Intentemos no dañarlo mucho —indicó la kunoichi a su compañero.
Lo último que ella quería era ganarse un lío con los del Valle por haber matado un raro ejemplar como un león albino. Al menos para ella eran raros ya que literalmente era la primera vez que veía uno, ni siquiera en libros de la biblioteca Sakamoto aparecían de melena y pelaje blanco.
Pero el color blanquecino de su pelaje era lo que más llamaba la atención de la rubia y lo que le trajo la idea de que tal vez no puedan darse el lujo de solo ir y matarlo, tal vez lo mejor justamente sería distraer a la fiera hasta que llegasen los samurái y se encargasen del asunto.
Lo más llamativo fue que tanto el peliverde como el pelirrojo ya habían hecho alguna intervención. El lado positivo fue que muy rápido el animal se centró en los shinobis así que… Si Keisuke actuaba adecuadamente podrían sacar al herido más fácilmente. Para ello Koko prefirió aportar a la distracción acercándose a Daigo.
—Intentemos no dañarlo mucho —indicó la kunoichi a su compañero.
Lo último que ella quería era ganarse un lío con los del Valle por haber matado un raro ejemplar como un león albino. Al menos para ella eran raros ya que literalmente era la primera vez que veía uno, ni siquiera en libros de la biblioteca Sakamoto aparecían de melena y pelaje blanco.